Y los olores dulces y amargos, las texturas bajo mis dedos, el frío en mi cuerpo o el calor que me despierta el picor del pasto, o la arena bajo la fina tela de mis ropas, cada sensación y sentimiento es único, íntimo, ya sea en las penumbras abismales de la belleza de los almendros en las colinas, o en el helado abrazo de la brisa marina bajo las estrellas, mientras el murmullo arrullador de las olas me acarician el alma como en un consuelo, tantas emociones, tan poco tiempo para sentirlas, es una pena que las pocas escapadas en las que me he entregado al amor que me tiene la tierra, no haya teniendo el suficiente valor para quedarme un poco más para disfrutarlas, porque etéreas son para mi, pero eternas son para la vida, es eterno el olor de las flores creciendo sobre el campo, el sabor salado de mar, la helada lluvia sobre la piel, y el cálido aroma del humo en una noche en vela, mientras el sonido del mundo se vuelve la orquesta que tanto habías esperado escuchar, todos esos sonidos que sin ellos te sentirías tan solo, pero nunca lo estás, siempre hay vida que si estiras la mano puedes tocar, solo basta con mirar arriba, a los lados, o a tus pies, ¿Puedes sentirlo?, ¿Puedes sentir cómo si todo tuviera respuestas y a la vez nada tuviera algún sentido? Como el aire entra en tus pulmones y sientes la sangre caliente recorrer tus venas, el moviendo suave de tu respiración en tu pecho, que puedas ver más allá del mundo, todos esos colores que se exponen ante ti sin movido aparente, más que el de hacerte sentir real, ¿Lo ves?, ¿Lo hueles?, ¿Lo escuchas?, ¿Lo sientes? Cuéntame, ¿Puedes?
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Cantos al olvido del dolor
PoetryRecopilación de textos que he escrito a lo largo de mi vida adolescente y joven adultez, en este lugar hallarás una cantidad casi exorbitante de melancolía inherente y un poco de romanticismo..., o tal vez mucho. Solo les pido que lean con amor, por...