[TERMINADA]
Todos conocen la historia de Romeo y Julieta pero nadie conoce está versión, sobre un joven que se enamoro de alguien de otro mundo
Cuenta la historia de dos jóvenes que, a pesar de la oposición de sus mundos, deciden enamorarse, apesar...
La luna estaba en su punto máximo, la luz entraba por la ventana del castillo de piedra.
El sonido de un bebé llorando hizo que los perro comenzarán a ladrar.
—Por el poder que me otorga la corona real, te nombró Romeo I príncipe de Terranova, primero en la línea del trono.
Un pequeño bebé de cabello rubio y ojos azules lloraba sin cesar, su madre lo tomo en brazos y comenzó a tararearle una canción.
Un caballero de la guardia real entro corriendo a la habitación del Rey—Su majestad, están tratando de entrar al castillo.
—Claudin, llévate a nuestro hijo aún lugar seguro, yo los iré a buscar.
—Pero mi Rey.
—Amada mía, prometo encontrarte a ti y a nuestro hijo per primero necesito salvar nuestro reino.
La joven mujer de pelo rubio beso a su esposo, al separarse miro por última vez al hombre que algún vez amo.
Por la ventana del castillo se escuchan gritos su pueblo pidiendo piedad por su vida.
—Vete, ahora.
La mujer tomo su capa tratando de ocultar a su hijo entre sus brazos para después acercarse a un librero que conducía a un pasadizo secreto.
Llegó hasta el final del pasadizo frente a ella había una cueva y un lago, a la orilla de este había una pequeña valsa.
Rápidamente se acercó a ella, acostando a su hijo para después empujarla lejos, aquella valsa iba alejándose.
La mujer escucho pasos por el pasillo, no tuvo más remedio que esconderse en las sobras, cinco hombres se acercaban a ella con antorchas.
—La reina no está.
—Encuentrenla y matenla.
El sonido de una piedra alertó a los hombres haciendo que estos movieran las antorchas en sus manos tratando de encontrar la fuente de aquel sonido.
Y en un abrir y cerrar de ojos una mujer que trataba de salir de ahí con vida fue descubierta y con ello una espada de hierro fue clavada en su vientre.
—Que viva la reina—dijo el hombre que había enterrado la espalda nuevamente en el vientre de la mujer.
La pequeña balsa seguía el curso del agua, un pequeño bebé lloraba sin cesar hasta llegar a un muelle.
En aquel muelle se encontraba un grupo de hombres haciendo guardia, al escuchar el llanto del bebé se acercó a el y al no ver rastro de alguien lo tomaron en brazos y lo llevaron a un castillo.
—¿Que tienen ahí?—cuestiono una mujer pelirroja, su vestimenta estaba opaca y sucia.
—Petunia encontramos este bebé en el agua—contesto uno de los hombres entregándole al bebe—.Estaba solo y no podíamos dejarlo ahí.
—Lord Miraz pide su presencia caballeros—interrumpio una joven de cabello rubio.
—Margareth, busca sábanas limpias y prepara el baño para este bebé.
—¿No lo quedaremos?
—Niña tonta no hagas preguntas y haz lo que te pedí.
