. . .
Kakucho sonrió de lado cuando seishu cayó de espaldas a la cama por lo que no dudó en acomodarse encima suyo para poder acorralar al rubio, inupi se sonrojo ante eso, de verdad que ese hombre no podía ser más caliente.— Hueles a jazmín.. adoró el jazmín – susurró en el oído contrario provocando que todo la piel de esa zona se erizara.— Me dan ganas de comerte todo..– agregó pasando su lengua por el sensible cuello de inupi quién ahogó un jadeo y abrio más sus piernas pues hitto estaba metido entre ellas y cada vez se le pegaba más y más.
— ¿Y por que no lo haces? – logró formular el rubio, había titubeado pero la verdad es que ahora no le importaba mucho solamente quería que ese fornido y sexy hombre se lo follara hasta desmayarse si era posible.— Uy, uy, uy.. seishu – susurró el contrario con una sonrisa burlona mientras acercaba sus manos al borde del pantalón de inupi para hacerle creer que lo iba a desabotonar pero no lo hizo.— Te estas yendo muy profundo en este mar de deseo..– agregó acercándose nuevamente al rostro contrario y rozando sus labios, inupi tembló ante cada uno de sus toques.
Era como ponerle la comida enfrente a alguien pero no dejarlo comer, demasiado cruel y lento.— P-Porfavor kaku.. y-yo no resisto tanto – lloriqueo apretando sus talones en la espalda baja de hitto quién negó con la cabeza y quitaba algunos mechones del penoso y bonito rostro de seishu, estaba al borde del llanto, justo como le gustaba al menor.— Sabes que si quieres que te folle solo debes decirmelo.. o te da pena, corazón? – murmuró pegando su frente con la de inupi, sus narices rozaron y sus ojos se encontraron en un instante, era mágico.
Los hermosos y verdes orbes cautivaron a los bicolores y sin dudarlo un segundo más; devoró sus labios con fervor. Sus respiraciones se mezclaron más y sus cuerpos se apegaron más si es que eso era posible.— A-Ah.. joder inupi – gimio el pelinegro al sentir su miembro muy apretado en sus boxers por lo que tuvo que cortar el delicioso beso que se estaban dando para poder desabrochar su pantalón.
Kakucho relamio sus labios y con permiso del rubio pudo retirar los pantalones contrarios encontrándose con la linda erección de seishu escapando de su ropa interior la que por cierto se trataba de una muy provocativa tanga blanca de encaje y tiras, le quedaba jodidamente sexy.— No sabia que te gustaba usar este tipo de cosas..– murmuró metiendo sus pulgares dentro de aquel pedazo de tela que estaba a punto de quitar sin embargo lo que dijo seishu le interesó mucho más.— Eso es porque aún no has visto nada..
El pelinegro enarco una ceja y miró con curiosidad al rubio quién llevó sus delicadas manos a los botones de su camisa para comenzar a desabrocharla.— Tu esposo me la regalo, tiene buen gusto para estas cosas — expreso de manera seductora en lo que se recostaba mejor en la cama dejando que su torso se delineara y que el corpiño de encaje que tenía se luciera más, era lencería que combinaba con sus bragas y lo hacía ver muy pero muy sexy.
ESTÁS LEYENDO
( 四 ) ‧ 𝗜𝗻𝘁𝗲𝗿𝗰𝗮𝗺𝗯𝗶𝗼 𝗱𝗲 𝘂𝗻𝗮 𝗻𝗼𝗰𝗵𝗲 +18.
Fanfic─ Kakucho y kokonoi compartían la idea de querer pasar una caliente noche con los integrantes del matrimonio contrario, nunca lo mencionaron como tal pero tenían la certeza de que estaban de acuerdo. Por lo que una noche deciden poner aprueba a drak...