Las luces de esta ciudad

4. De charlas y nuevos comienzos

4. De charlas y nuevos comienzos

If I could trade mistakes for sheep
Count me awake before you sleep
I'll stay awake til I dream my mistakes so they fade away

Si pudieras cambiar los errores por ovejas
Cuéntame despierto antes de dormir
Yo me quedaré despierto hasta que sueñe mis errores y desaparezcan

— Panic! at the Disco (Trade Mistakes)

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Katsuki no esperó que el ambiente en el café fuese tan cómodo.

Había una canción que sonaba muy bajito que no lograba identificar pero que definitivamente tenía que recordar el coro para buscarla después.

We scream
We shout
We are the fallen angels

Mira a Izuku frente a él, que sostiene una taza grande de chocolate caliente mientras que él se conformó con un capuchino. Estaba feliz de que el sitio estuviera prácticamente vacío, pero no por las razones que su compañero creía. Parte de la apuesta era hacer que los demás empezaran a ver a Izuku como una persona genial y digna de su voto para el baile, pero quería al menos estar así un poco.

To those who sing alone
No need to feel the sorrow
We scream, we shout, woah oh
We are the fallen angels

Su ex mejor amigo había cambiado mucho, él siempre supo que Deku era diferente, le gustaban muchas cosas consideradas fuera de la norma, pero a Katsuki casi nunca le importó. Eso, hasta que se dio cuenta de que en la escuela podía ganar respeto si se acoplaba al estatus quo, finalmente era reconocido por algo.

— Entonces... — dice Izuku, tomando un sorbo de su chocolate — ¿Qué es lo que tienes para decirme que es tan importante?

— ¿Has pensado en la universidad?

Izuku lo mira con los ojos entornados.

— Si... — dice, pero no es una afirmación al cien por ciento.

— ¿Qué has pensado?

— ¿Por qué quieres saber?

— ¿Quieres dejar de ponerte a la defensiva? Intento hacer plática — dijo, ya un poco impaciente.

— ¡No estoy a la defensiva!... tú-tú no puedes venir a pretender que somos amigos de nuevo y querer que te cuente mis planes a futuro.

— ¿Y por qué no?

La pregunta lo sorprendió hasta a él mismo, pero la expresión atónita de Deku le indicó que iba por buen camino.

— Porque me hiciste mucho daño... Kacchan.

No esperaba que la conversación fuese a un lugar tan profundo tan rápido, pero Katsuki podía trabajar con eso, era lo mejor. Quería convencerse de que estaba haciendo todo por la estúpida apuesta, porque después de la graduación, lo más seguro es que Deku se quedara como un viejo recuerdo de un chico al que solía conocer en la escuela.

Si es que las cartas llegaban.

— Lo siento... — musita, como si eso fuese a remediarlo todo.

— Eres increíble — dice Izuku riendo sarcásticamente —. El chico dorado de Aston dice "lo siento" y automáticamente todo está mejor ¿No?