Good Karma

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Comencé con mi trabajo, ser asesora de vestuario y maquillaje para las luchadoras de la WWE no era cosa fácil, todas las maquillista y diseñadoras estaban majo mi mando, no tenía ni un minuto de descanso, siempre llevaba telas y papeles a todos lados, aunque, por una vez en mi trabajo, tuve un descanso, así que esa mañana, decidí llevar a mis dos sobrinos a una de las peleas de la noche, ellos al ser pequeños y criarse en un ambiente lleno de la lucha libre, puesto que yo había competido en las luchas ilegales al igual que mi hermano de más jóvenes, nuestro padre era un entrenador personal medianamente conocido, aficionado por este deporte, ya con sus 47 años se veía bastante bien, nuestra madre, que siempre que podía nos ponía a ver el deporte, puesto que era su favorito, influyeron bastante en ellos.

lo olvide, Mi nombre es Joy Brown, soy una mujer de 24 años, con una altura de 1.69 m, teniendo una buena masa muscular, no era tan exagerada como para hacerme ver tan masculina, pero si era la necesaria para hacerme ver aterradora, mi cabello, el cual era de un castaño oscuro, estaba creciendo de una manera lenta, ya que hace menos de 2 meses había tapado la mitad de mi cabeza, recortando el largo cabello que llegaba a mi cintura hasta mi mejilla, mis ojos de un color verde, con pequeños toques de cafe, según todos, el sueño de cualquiera.

-Niños! A levantarse flojos! Pedí salir temprano del trabajo para llevarlos a la lucha! No a verlos dormir!!

Sus pequeños ojos se abrieron emocionados, Nico es el mayor, su pelo castaño y sus ojos azules, tenía nueve años, tenía 5 años, al igual que su hermano, Jackson, solo que los ojos de este último eran verdes como los míos.

Mi hermano fue padre de gemelos a los 18, ahora con sus 27 años y una carrera de enfermería en la espalda, se había vuelto un hombre responsable y muy guapo, siempre molestando por ser más pequeña que el, pero siempre teniendo una buena relación.

—Hoy es la lucha de Rhea Ripley! La mejor luchadora de todos los tiempos!!!—la voz emocionada de Jackson me saco de mis recuerdos, se levantó rápido de su cama en forma de auto y corrió a su armario, sacando de este una camisa con una mujer en ella, la reconocí al instante, su maquilladora había renunciado hoy, dijo que tenía problemas en su hogar, tendría que conseguir un remplazo, lo había olvidado, tendría que encargarme de ese maquillaje yo misma hasta que consiga un remplazo.

—Oh...yo la conozco—solte sin pensar mucho en eso, los niños me miraron sorprendidos, sus ojitos brillan y siento las preguntas bombardear— la conozco por mi trabajo, tampoco piensen que soy su amiga, mejor vamos, tengo que hacer algo antes de la pelea...

Con toda la paciencia del mundo me dirijo a aquel "coliseo" si se le podía decir así, los niños llevan sus dibujos o cartas para la luchadora favorita de los dos, Rhea Ripley, se veían tan lindos que no pude negarme a comprar sus dulces favoritos y su refresco de cola preferido para que lo disfrutarán al máximo.

—ok vengan con la tía Joy, tengo que hacer una cosa del trabajo y se que les va a gustar a quien vamos a ver!—los cargue en mis hombros, uno en cada lado, la verdad, era fácil, eran pequeños y no pesaban mucho,además de que yo seguía entrenando después de dejar la ilegalidad, tenía que estar preparada.

Abrí la puerta del camerino con cuidado y la mire por primera vez, su perfil era hermoso, su cabello negro y corto la hacía ver jodidamente atractiva y sexy, la ropa negra de cuerina se ajustaba a ella con facilidad, su cara que estaba sin aquel maquillaje negro y de colores oscuros, me dejó ver el color de sus ojos, azul, azul como el cielo de cada mañana, con un brillo único.

—buenas noches señorita Bennett, soy Joy Brown, la asesora de vestuario y maquillaje, pero el día de hoy seré su maquilladora personal... Espero me disculpe, pero mis sobrinos vinieron, además de que son muy fans suyos...

—no es problema señorita Brown, me alegra saber que tengo fans tan fuertes y pequeños—su sonrisa iluminó mi alma en un santiamén, parecía un sueño hecho mujer, era simplemente lo que deseaba en este momento, tenerla para cuidarla de todos, ser aquel Karma para los que le hagan mal.

Sonrío y mis sobrinos corren a ella para entregarle sus regalos, ella los acepta gustosa, sonriendo y comenzando una pequeña conversación mientras comencé a maquillar, tenía su mirada en mi mientras cubría sus labios con ese labial mate negro, la tentación hecha mujer me hizo un ojo y se levantó para despedirse de los niños y ir detrás del escenario a esperar su llamado.

Mis sobrinos emocionados tomaron mis manos y me llevaron hasta nuestros asientos, la pelea estaba por comenzar, quien hubiera pensado que terminaría siendo el Buen Karma de esa hermosa mujer, Demi Bennett...

—♡𝕹𝖎𝖌𝖍𝖙𝖒𝖆𝖗𝖊♡

Hola, esto es el prólogo de la historia, espero te guste, si tienes ideas de algo solo escribe un comentario ♡.

𝘢𝘳𝘦 𝘺𝘰𝘶 𝘮𝘺 𝘨𝘰𝘰𝘥 𝘬𝘢𝘳𝘮𝘢? (𝘙𝘩𝘦𝘢 𝘙𝘪𝘱𝘭𝘦𝘺 𝘢𝘯𝘥 𝘠𝘰𝘶)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora