☆ c-016

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     Nota de Autor: Holaaap, bueno, la verdad estos últimos días no me he sentido muy bien anímicamente, pero de todas formas quería actualizar.💗

Cuídense!

[...]

Definitivamente esto no era lo que Jungkook había imaginado cuando Jeno lo había invitado a ver la nueva película de Thor.

Su "amigo" y Jaemin se habían sentado en otros asientos, los hijos de puta. Así que él se encontraba con Taehyung, en los asientos que estaban en la última fila, al lado de la pared.

Prácticamente estaban solos porque no tenían a nadie cerca.

No habían vuelto a hablar, ni del tema, ni de nada, simplemente murmuró un gracias cuando Taehyung le entregó una Coca-Cola.

Jungkook tenía un desastre en la cabeza. Cuando se enteró que Taehyung iría, era demasiado tarde para retirarse – literalmente, Jeno se lo dijo cuando se bajaron del autobús – pero tampoco imagino que el peliazul le hablaría, menos, que mencionaría lo del baño.

Le había costado tanto trabajo olvidar la sensación, y ahora el chico se lo había mencionado como si nada, y no dejaba de pensarlo.

Jeon había llegado a la conclusión que tenía un brote de hormonas saliendo de su cerebro – eso ni siquiera era posible –, porque la idea de agarrar y besar a Taehyung era cada vez más insistente, y le estaba costando mucho trabajo concentrarse en la pantalla.

Se estuvo intentando convencer de que podría con toda esta situación, que Taehyung no lo molestaría más, pero ahí estaba, pidiéndole explicaciones con sus ojitos de perrito y sus mejillas rosadas, y vaya que lo hizo hablar.

Jamás se imagino a sí mismo contándole a Taehyung que había estado mirándolo, menos diciéndole que jamás se cansaría de él.

"Nadie me había tocado así." Recordó las palabras de Taehyung, su tímido rostro cuando lo dijo.

Se había visto tan besable, maldita sea.

Lo odiaba, lo odiaba con toda su alma. Odiaba sus ojos y odiaba su boca, su tono de voz, sus manos, su pelo, el como jugueteaba con sus dedos cuando se ponía nervioso y el como sus pupilas se dilatan cuando comienza a mirarlo.

Odiaba que no pudiese odiar ninguna de esas cosas.

Jungkook poco a poco volvía a perder la cabeza por Taehyung, y no sabía si quizá tendría que admitir que nunca podría recuperarla, o seguir luchando contra ello.

Su voluntad era cada vez más débil.

Pero su corazón dolía tanto ante los recuerdos del pasado, que aunque aveces, cuando pensaba en Taehyung, no había nada malo, ninguna sensación negativa, al mirarlo a los ojos solo podía preguntarse porque lo había traicionado así.

No fue a su cumpleaños, no le escribió, lo ignoro y deseo nunca haberlo conocido.

Y si, tenían doce y trece años cuando eso habia ocurrido, Jungkook sabía que los niños se equivocan, que comenten errores, pero el estaba enamorado de Taehyung, de su mejor amigo, el cual lo había abandonado en el momento más crítico de su preadolescencia, y ese corazón roto nadie se lo había devuelto.

El solito tuvo que reunir pieza por pieza.

Y sabía que el pedazo más grande se había ido junto con la hermosa amistad que alguna vez compartieron.

No podía dejarlo pasar, no podía olvidarlo.

Aún cuando las ganas de agarrar sus mejillas y unir sus labios estaba carcomiendolo, Jungkook no se veía capaz de afrontar contra ello después.

Fire For(4) U  ☆ KookV.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora