Jin ha decidido poner en renta una de las habitaciones del apartamento en el que vive con su novio JungKook, para así tener un gasto extra, ya que se acerca su aniversario de novios.
O al menos esa era la mentira base.
Ninguno de los dos imaginó q...
El dulce olor del café recién hecho es lo primero que el fino olfato de Jin se permite contemplar al adentrarse lentamente a su cafetería favorita, donde casi siempre va a distraerse, aunque ésta vez la situación es algo diferente, pues ha ido a encontrarse con el chico interesado en compartir departamento.
Acercándose al mostrador, el pelinegro de Jin observa detenidamente cómo una linda y simpática chica se para frente a él y acto seguido le regala una extensa sonrisa y un menú con el especial de esa tarde y que sin duda alguna, se ve muy tentador.
Dirigiéndose a una de mesas en el centro de la cafetería pero frente a los enormes ventanales de color blanco, Jin toma asiento y tranquilamente comienza a revisar el menú que aquella chica en el mostrador le ha dado.
Dejando de lado por un momento el menú entre sus manos, el pelinegro de Jin siente una penetrante mirada sobre su persona, detalle que para nada puede pasar por alto y que discretamente lo hace alzar su rostro y mirar de izquierda a derecha en busca de aquella persona que lo mira con tal intensidad, y grande es su sorpresa cuando un atractivo chico de cabellera rubia aparece frente a él y le sonríe de forma tan linda que Jin inevitablemente queda prendado de aquella sonrisa cuadrada.
Sintiendo los latidos de su corazón acelerarse, SeokJin le devuelve la sonrisa a aquel chico y admira como el mismo se acerca hasta él caminando en cámara lenta.
-¡Hola, buenas tardes! -saluda el pelirrubio, extendiendo poco después su mano a Jin quien no lo piensa mucho y toma aquella mano que hace rápidamente a su cuerpo erizarse por completo -¿Te hice esperar mucho? -pregunta risueño TaeHyung.
-Para nada -contesta Jin, mientras le ofrece al chico frente a él tomar asiento -. Acabo de llegar también de hecho.
Sonriendo dulcemente, TaeHyung toma asiento y mira con total atención a Jin mientras coloca su mochila bandolera de color verde oscuro sobre el perchero de piso que se encuentra a su izquierda.
-Bien, en ese caso ordenemos antes de siquiera hablar del asunto por el que estamos aquí -menciona TaeHyung suavemente, haciendo que las manos de Jin suden.
-Perfecto -susurra el pelinegro de Jin, volviendo su vista al menú entre sus manos -. Con el frío que está comenzando a hacer, creo que ya sé lo que me gustaría pedir.
-En ese caso ordena por ambos, por favor.
-¿Estás seguro? ¿Qué pasa si lo que pido no te gusta? -Con una pequeña sonrisa entre sus labios, Jin decide jugar un poco con aquel chico frente a él y que ante sus ojos parece ser muy interesante.
-Solo diré, sorprendeme.
Alzando Jin su mano para llamar a una de las chicas que atendían en aquella tan coqueta cafetería, son escasos los segundos que pasan hasta que una guapa joven de cabello rojizo se acerca hasta ellos y les pregunta a ambos amablemente qué es lo que desean beber o bien comer.
-Para beber vamos a querer un Latte Macchiato, y un Caramel Macchiato, y para comer un Muffin de Chocochips y un Mini Cronut de Chocolate, por favor.
-Enseguida traeré sus órdenes -canta la chica sin mirar a Jin ni un solo instante pero si a TaeHyung, a quien le guiña y coquetea descaradamente.
Admirando a la sensual mesera contonear sus caderas de un lado a otro frente a TaeHyung, el mismo rubio sonrió burlonamente.
-¿Te parece graciosa su forma de coquetearte? -cuestiona juguetón Jin, al ver cómo TaeHyung se ríe y niega con la cabeza al ver a la chica que les atendió, muy segura de si.
-Para nada -Vuelve a reír -. Lo que me parece gracioso es que en este punto de mi vida si yo le dijera a ella que soy un hermoso homosexual, ella no me creería -dice sin cuidado alguno TaeHyung.
Con aquella confesión adentrándose muy de pronto en la conversación, Jin siente que TaeHyung sería el candidato perfecto para ser su nuevo roomie.
-¿Homosexual, en verdad? -indaga Jin y entonces TaeHyung sabe que no se ha presentado como es debido, más no siente miedo pues a plena vista se ve que aquel hermoso chico pelinegro no es homofóbico.
-Lo siento. Olvidé decirte que soy un sexy y flamante gay.
Riendo fuerte por las palabras antes dichas por TaeHyung, Jin se siente un poco más seguro sobre a quién le gustaría tener como roomie.
Y sin duda, TaeHyung parecía ser el candidato perfecto.
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