VERNANO
Dichoso pirata de aguas dulces que avistaste tierra hace 8 meses. Cuanto me ha costado llegar a ella, soltar el barco y bajarme. 8 meses. 8 meses se dice rápido, pero 8 meses en los que el cielo se iba oscureciendo, se iba ennegreciendo, en los que esa tierra a la vista se alejaba de mi.
No, no se si se alejaba, no se si la tierra quería que yo llegase, no se absolutamente nada, solo se que la pisé y me besó. Guau que si me besó. Una semana entera en la que ella me besaba y yo le besaba. Una semana entera sintiéndome afortunado por estar en esa tierra que tanto me gustaba. Una semana entera pendiente de ella, ¿y ella de mi? Quisiera creer que si. Quisiera creer.
No se con que intenciones iba, pero si sabía las mías, me gustaba sentirle, me gustaba abrazarle y por supuesto, me gustaba besarle. En definitiva, me gustaba pasar tiempo ahí. Lo malo es que no podía dormir allí. Tenía que volver al barco, aunque tuviera echado el ancla, tenía que vivir en el barco, tampoco me apetecía vivir en esa tierra, solo me apetecía estar allí.
Durante mi estancia en el barco, la tierra se congelaba, se volvía distante y desinteresada, pero era bajar y mostraba interés otra vez por mi.Así durante casi 2 meses, hasta que de pronto, la invadieron, de echo 1 día fue un intruso y otro día, otro distinto.
Muy a mi pesar decidí abandonarla ya que la tierra les trataba igual que a mí y yo, no soy igual que los demás. Ella misma hizo que yo creyera más en mi, y verme a mi mismo de una manera que nunca antes me había visto, sin ni siquiera hacer nada, pero...Al cabo de un par de semanas acabe volviendo a ella con la única intención de hablar, dejarle claro cuáles eran mis sentimientos, no me apetecía que se fuera de rositas. Quería que se sintiera mal, que de una forma u otra, sintiera lo que yo sentí cuando vi todo eso, solo que yo sabía que ella a mi no me debía nada, por tanto, mi "odio" e "ira" se convirtió en compasión y honestidad. Al fin y al cabo ni puedo ni quiero adueñarme de esas tierras, simplemente quiero pasar tiempo en ellas.
De momento sigo aquí, en mi barco, anclado frente a esa tierra. A veces le miro y a veces no. A veces pienso en ella y a veces no. A veces me imagino como seria poder dormir en ella, y otras pienso que es algo imposible, ¿sabes por qué?, porque esa tierra en un par de semanas desaparecerá del lugar donde se encuentra, y créeme cuando te digo que desaparecerá.
Lo único que me queda es disfrutar de las vistas, visitarla cuando pueda y decirle adiós. ¿O quizás un hasta luego?, depende de cómo me encuentre, porque quien sabe. ¿Y si nos volvemos a ver?, aún así, yo seguiré surcando los mares, sin buscar nada, pero seguro que encontrando tesoros.