𝗯𝗼𝗿𝗿𝗼𝘄 𝗮 𝗸𝗶𝘀𝘀 › 𝗋𝗈𝖽𝗋𝗂𝗏𝖺𝗇 (✓)

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—¡Iván! Hace tiempo no te veía, ¿Cómo has estado? —dijo Rubén abrazándolo, luego de haberse limpiado las manos con un repasador, ya que estaba cocinando.

—Bien, supongo. ¿Y ustedes?—dijo Iván mirando la hermosa casa.

—Nosotros estamos bien, Alexis se mudó hace poco así que algunas cosas están fuera de lugar. —dijo Rubén acercándose al chico, dejando un beso en su mejilla. El chico se sonrojó.

Iván sonrió, se veían tiernos juntos.

—Bueno, antes que nada, quiero que me expliques lo que sea que me dijiste por mensaje, no te entendí nada. —dijo Rubén guiándolo a la sala para sentarse. Iván se sentó en un sofá individual, mientras que Alexis y Rubén se sentaban juntos en un sofá más grande.

—Claro, tú sabes que vivo con alguien, somos roommates. Él es, oh dios, él tremendamente hermoso además está buenísimo. Es adorable y muy atento y... ah, me gusta mucho. —dijo Iván al recordar lo que pasó aquella mañana.

—Si si, tus cosas gays ¿entonces..? —dijo Rubén recibiendo una mirada extrañada de Alexis.

—P-pero, nosotros somos- oh. —intentó decir Alexis para luego recibir una mirada de Rubén, más bien una sonrisa que decía "si, era en broma".

—Y, me quiero declarar, pero no lo de siempre del típico "me gustas" porque es aburrido y cringe, quiero hacer algo más yo, ¿me captas? Entonces  busqué por google porque increativo siempre y me apareció la opción de usar piropos, me gustó la idea pero hoy a la mañana pasó algo súper raro y no entiendo. Creo que él no me quiere de esa forma… —dijo Iván motivado al principio pero llegando al final el volumen de su voz comenzó a ser más y más bajo.

—¿Te dijo algo malo? Porque si lo hizo voy y le pego con la escoba, no me importa que te guste. —habló Rubén tratando de levantarse con los puños cerrados, listos para golpear a alguien.

—Tranquilo Rubius, no hagas una locura. Dinos Iván, ¿te dijo algo malo? ¿Te trató mal o algo así? —dijo Alexis con su voz que tenía un tono sereno y relajante.

—No dijo nada malo ni eso. Es solo que... anoche fui con él a la sala, porque Rodrigo estaba trabajando en unas cosas. Me quedé dormido al lado suyo, entonces me llevó a mi cama. Al parecer no lo quería soltar, ya sabes porque cuando duermo soy una garrapata literalmente, entonces dormimos juntos. Hoy a la mañana fue hermoso, estaba dormido abrazándome y fue todo perfecto, valió la pena saltarme dos clases y hacer que él se salte tres, porque apague la alarma. Pero… cuando se despertó lo abracé pero se apartó y se fue, me sentí mal porque parecía incómodo. ¿Y si estoy ilusionándome con un chico que acepta mi cariño pero lo ve solo como aprecio de amigos y que de paso hay una gran probabilidad de que sea hetero? Mátenme. —dijo Iván explicando todo con el mayor  detalle que pudo, evadiendo el hecho de que escucho como Rodrigo se masturbaba en la ducha.

Los dos chicos lo escucharon esos dos o tres minutos en los que Iván estuvo hablando sin parar como un perico.