Tú no eres un idiota.

PARTE II. Rencuentro.

Dedicado a: Natalia-Yang

- Hola Choi Seung Hyun, cuanto tiempo sin verte - Sonrei y él me miro con miedo.

Ninguno de los dos hombres frente a mí hablo. Seung Hyun mantenía su boca entreabierta y Jin Woo contenía las ganas de llorar, quería reírme de sus rostros pero ¿No sería demasiado cruel? Un sonoro suspiro alejó el silencio, el menor había bajado el rostro.

- Hyung - le habló a mi Seungie tomándole del brazo, haciéndome recordar los años de secundaria. - Creo que me iré primero. Te veo en casa, hyung.

Le sonrió, y sentí envidia. Él lucía realmente bello a pesar de sus notables ganas de llorar.

- Iré contigo - Seung le siguió unos pasos pero Jinwoo le negó.

- Tienes que hablar con Ji Yong-hyung.

Apreté los labios, me había llamado "Hyung" quizás por respeto pero no deseaba que lo volviera a hacer. Les preste más atención tratando de leer los labios del menor pues empezaron a platicar muy bajito para mi gusto, Seung Hyun le depositó un delicado beso sobre su frente, encendiendo en todo mi cuerpo aquello llamado ira, desvíe mi mirada hacia otro lado.

- Así que... el pequeño Jinwoo - hablé cuando le oí sentarse a mi lado.

- Sí - habló seguro hiriendo mi ego - Hace mucho que no te veía Ji Yong.

- Estuve aquí todo el tiempo, me enteré que tú te fuiste por un tiempo a París.

- Sí, tenía muchas cosas que pensar.

- ¿Y por eso te fuiste con Kim Jin Woo?

Me miró entrecerrando los ojos. No tenía nada que reclamarle, no debía pero los celos comenzaban a escocer mi cuerpo tentándome a reprocharle el por qué de su huida a lado de aquel chico. Pero yo no era quien para reprocharle algo, pues era debido a mí todo esto. El que me haya dejado, el que haya huido a París para olvidarme mientras yo me consumía aquí, no era más que mi propia culpa. Bien dicen que todo se paga en esta vida. Clavé mi vista hacia en frente, oí su pequeño quejido y sonreí de lado.

- ¿Qué es lo que quieres Ji Yong? ¿Por qué apareces de nuevo?

Me preguntó, giré para verlo aun manteniendo mi sonrisa, le escaneé con la mirada. Se veía igual que antes, tan apuesto, los años no habían pasado por él y eso alteraba todos mis sentidos, su mirada era intensa, sentía que me atravesaba con ella y eso me gustaba.

- A ti Seung, te quiero a ti... - oí su risa sarcástica y le seguí. No podía engañarme, le había puesto nervioso pues conocía muy bien aquella risa.

Flash back.

No era la primera vez que me sentía atraído por un chico, pero era muy difícil que alguien llegara a gustarme. No todas las personas llenaban mis estándares de gustos. Pero él, Choi Seung Hyun, alteraba cada poro de mi piel con su voz tan grave y su mirada tan profunda. Él era ese tipo de persona que no necesitaba mostrar piel para ser considerado sexy. Era tan atractivo, digno para modelo de revista.

- ¿Qué tanto miras Kwon Ji Yong? - Me preguntó sonriendo.

- A ti hyung - aseguré, le sonreí agitando mis pestañas. El desvío su mirada de la mía y pude apreciar un delicado tono rosa sobre sus mejillas. - Eres tan atractivo.

Y soltó una pequeña risa nerviosa, haciéndome saber que le había avergonzado, me acerqué y besé su mejilla, él volteó a verme muy sorprendido, me levanté del asiento y salí del aula con el pretexto de ir a los sanitarios.