desearas al hombre de tu hermana › jikook.

Capítulo O3

JungKook no recordaba haberse dormido, pero al día siguiente se levantó con risas y voces fuertes provenientes del pasillo frente a su habitación.

Enojado y con su pijama de ositos se levantó a ver de qué se trataba aquel barullo.

─¡DÉJENME DORMIR!─. Gritó con su voz mañanera, SoMin y JiMin corrían por el pasillo persiguiéndose entre sí, totalmente manchados con lo que parecía harina.

─No, es hora de que te levantes y hagas tu tarea. JiMin está preparándote el desayuno─. Dijo SoMin.

¿Por qué él estaría haciendo tal cosa?

JungKook cerró la puerta y cambió su ropa, no se puso nada elegante, solo unos pantalones sueltos y una sudadera. Tomó sus libros y su cartuchera, se decidió a bajar a desayunar ya que su pancita rugía.

Sabía que sus padres estaban trabajando, asi que suponía que estaba solo con la pareja en su casa.

Se sentó en la mesa, algo nervioso al ver que su hermana no se encontraba por ningún lado. Solo estaba JiMin.

─¿Y SoMin?

─Se fue a comprarte leche de chocolate, para disculparnos─. Dijo el mayor, estaba dando vueltas cocinando algo que JungKook no podía ver.

─No tienen que disculparse, es más, yo debo dis...

─En realidad sí, me voy a casar con tu hermana y me metí en tu vida como si nada, SoMin quiere disculparse por haberte tratado mal anoche─. Dijo JiMin riendo, JungKook sonrió, parecía un buen chico.

─De todas formas lo siento, por cómo reaccioné anoche. SoMin es mi vida entera, mi mejor amiga... y no sé, que este por casarse es lo que menos esperaba─. Rió triste el menor.

─Te entiendo, ella es mi vida entera también. Ahora somos familia, así que nos conviene que nos llevemos bien─. Sonrió JiMin─. ¿Quieres que te ayude con tus deberes?

El mayor se acercó y se sentó con él antes de que el menor pudiera responder, tensandose un poco abrió en donde se había quedado antes, eran unas simples preguntas sobre biología.

─¿Cuántos años tienes? ─. Pregunto JungKook comenzando a escribir las respuestas que ya estaban marcadas en su libro.

─Veintiuno─. Contestó, bien, un año mayor que su hermana.

─Son muy jóvenes para casarse─. Dijo, todo lo que pasaba por su mente salía sin pedir permiso.

JiMin asintió.

─Pero nos queremos mucho, ya hemos planeado nuestro futuro─. Sonrió el mayor.

─Bien por ustedes.

JiMin le sirvió el desayuno a su cuñado, este último repitiendo que no hacía falta, que el sólo podía.

SoMin llegó justo para cuando ambos comenzaron a comer, los tres se sentaron y comieron pancakes con leche de chocolate. mientras charlaban.

JungKook no iba a negarlo, se veían muy bien juntos, ella dándole de comer en la boca a el chico de pelo rubio, dándose pequeños besos y llenándose de comentarios bonitos.

JungKook no podía sacar sus ojos de JiMin, por más que quisiera, había algo de él que llamaba su atención, y aún no sabía qué era aquello.