desearas al hombre de tu hermana › jikook.

Capítulo 29

Caminaba por los pasillos con las manos dentro de los bolsillos de su abrigo beige que lo hacia ver mas deseable que los ñoquis del 29, el cuello de la polera negra que llevaba estaba apretandole el cuello de más y no sabía si era por toda la presión que sentía al saber a dónde se dirigía.

JiMin acomodó sus anteojos y peinó su cabello rubio hacía atrás, sonreía y saludaba a los empleados que caminaban por los pasillos de la editorial. Subió al ascensor y se recostó en la pared para tomar un poco de aire. Subió hacia el último piso, la diferencia de altura se sentía haciéndolo marearse una vez más, nuevamente saludo a los empleados que se cruzaron por su camino mientras caminaba por los pasillos doblando en donde debía.

Avistó la gran puerta doble de madera y sintió su estómago revolver.

─Hola EunWoo, ¿está mi padre disponible?

─JiMin, puedes pasar. Recién llegó de una reunión.

Le sonrió a el asistente de su padre y caminó unos pasos hacia la puerta y dejó caer su mano unas veces, su cuerpo se congeló cuando escuchó la grave voz.

─Que sorpresa, JiMin─. Dijo, lo observó desde su escritorio. La oficina de su padre siempre le sorprendía cada vez que entraba, era el doble de la suya y era adornada con preciosos muebles blancos y negros.

─Buenas tardes─. Dijo─. ¿Sorpresa?

─No te he visto por aquí últimamente y me preocupa porque eres... Mi vicepresidente─. Dijo, se levantó y caminó hacia su mini bar, sirviéndose un caro licor en un vaso─. Y uno muy irresponsable, ¿quieres?

Negó con la cabeza y quedó parado en su lugar.

─¿A qué vienes?─. Preguntó el hombre─. ¿Un favor, dinero, que quieres?

─No quiero nada, en realidad, vine a avisarte un par de cosas─. JiMin siguió a su padre hasta un juego de sillones de cuero, en donde se sentó frente a él en un sillón individual, una mesa de café separándolos.

─Tiene que ver con Jeon JungKook, ¿no?

Sintió las palabras atorarse en su garganta, se removió incómodo en su asiento con ganas de salir volando de allí. La mirada de su padre estaba casi matandolo, tenía una sonrisa malvada en su rostro.

─¿Qué sabes de él? ─. Preguntó enderezandose, no quería verse vulnerable frente a él, pero su cuerpo se había tensado y había comenzado a doler del miedo.

Dongwook se levantó rápidamente de su asiento, haciendo que JiMin se sobresaltara, pero el viejo simplemente caminó hacía su escritorio y abrió un cajón, sacando un sobre. El cual tiró al regazo de JiMin antes de volver a sentarse a beber.

Abrió y el calor subió a su cara.

Múltiples fotos de JiMin y JungKook. Entrando al edificio, ese día que busco a su novio por la escuela, y algunas dentro del auto, ambos riendo, de diferentes ángulos y había algunas con zoom.

─¿Mandaste a alguien a espiarme?─. Preguntó indignado, con el ceño fruncido.

─No simplemente a alguien, aproveché a TaeMin, es muy bueno con la cámara─. Soltó una risa─. ¿Quieres darme una explicación o lo envío a darte un correctivo como hace unos años? Me sorprende que no hayas entendido.

Apretó sus puños y mordió fuerte, suspiró y lo miró.

─JungKook es mi novio, la boda ya está cancelada y SoMin está embarazada de SungYeol─. Escupió.

─Ya hablé con ambos, SoMin se adelantó y decidió contarme, lo cual aprecio muchísimo. Todos quedamos en que la culpa la tienes tú, ¿no darle atención a tu prometida por un mocoso de mierda?─. Su padre comenzó a reír, parecía que algo le daba risa.