Colegialas - Segunda parte (final) 💋

7.3K 37 2
                                    

Han pasado unas dos semanas desde mi encuentro en el cuarto del salón con Paula, y...realmente estoy decepcionada y algo frustrada. En resumen ella a estado de ofrecida con chicos de cursos mayores que el nuestro, incluso lo hace en mis propias narices luego de lo que ella me hizo sentir ese dia en el salón, parece ser que para ella no significo nada y yo era uno mas de sus encuentros sexuales, podía verla en los descansos de ofrecida con los muchachos, pero había una en especial...Sebastian de ultimo grado , el típico chico hetero con desorden hormonal, que iba cada tres días a una fiesta diferente para acostarse según el "mínimo con dos", a lo mejor y ya hasta tenia sida el desgraciado.

Era sumamente incomodo ver como se queria comer a Paula incluso en publico, simplemente decidí alejarme, mi orgullo estaba por encima de cualquier cosa, simplemente tenia que borrar de mi mente los recuerdos de ese dia con Paula, pero no...no era nada fácil...Incluso en las noches no podía, constantemente me soñaba a Paula cogiéndome de distintas maneras en distintos lugares, lo cual producía que cada mañana amaneciera muy mojada, me contuve varias veces de masturbarme pero era cada vez mas difícil...ella lo hacia difícil, apretando intencionalmente sus pechos en clase para que resaltaran mas, o moviendo su falda de un lado a otro mientras caminaba moviendo sus caderas, era un infierno para mi; hasta ese dia en el que llegue a su casa...

Ya se acercaba el fin de año y habían bastantes proyectos, ese dia la profesora pidió hacer grupos. Mas se demoro la profesora en decirlo que Paula llegar a mi puesto a preguntarme si nos podíamos hacer juntas.

-Vamos Isa hagamos juntas para el proyecto, se que podremos acabarlo incluso hoy.-Dijo esto mientras de tomaba del brazo y apegaba sus pechos contra mi cuerpo, teniendo en cuenta que yo era la mas bajita de las dos.

-Mmmm bien...supongo que no nos demoraremos mucho haciendo el trabajo y me podré ir a casa.

-Fantástico llamare a mamá para avisarle, así que tu haz lo mismo y hoy mismo quedamos en mi casa te parece?- Eso ultimo lo dijo con una mirada tan enceguecida de lujuria que en ese momento incluso creo que me llego una corriente eléctrica por todo el cuerpo, llegandome a excitar(Espero que no lo halla notado).

Las clases trascurrieron de lo mas normal a excepción de las miradas de Paula, que me ponian bastante inquieta. Pero ella no se iba a detener ahí, se debe cuenta de lo que sus miradas producían en mi, así que se fue hasta la parte donde yo estaba sentada, se sentó en el puesto que estaba a mi lado y lo acerco, nos encontrábamos por casualidad en la parte de atrás lejos de toda la atencion de los demas, de un momento a otro, baja su mano hasta mi pierna y la empieza a acariciar por encima de mi falda, yo la mire mal y aleje su mano, pero ella insistió y me la agarro con fuerza.

-Paula acá no...nos pueden descubrir que te pasa estamos en clase!- Susurre un tanto indignada.

-No se darán cuenta si te quedas calladita y quieta hermosa...-Empezó a acariciar de manera lenta pero con la intención de subir mi falda, poco a poco con cada roce la iba levantando mas hasta que llego a mis bragas, para nuestra suerte las mesas de nuestros escritorio eran algo bajas y anchas, casi no se notaban las piernas de los estudiantes. Aprovechando esto, y empezó a tocar suavemente son sus dedos mi ya mojada vagina por encima de las bragas, sus dedos estaban fríos y me generaban corrientes eléctricas muy seguidas, daba masajes a mi clítoris y a veces lo pellizcaba ligeramente, yo mientras trataba d no gritar de placer, así que abrí un poco mi boca, seque un poco mi lengua y me aferre ala silla de mi escritorio.

-Eso es...así me gusta tenerte, yo se que te encanta estar así para mi.-Dijo mientas se mordía el labio inferior viéndome, como estaba a punto de correrme.

De un momento a otra se detuvo y alejo rápidamente su mano, luego se levanto de la silla y simplemente se fue, si...se fue, con las ganas mas grandes de correrme en sus dedos, ella solo decidió irse, la maldije mentalmente, sabia que esto no se iba a quedar así, cobraría venganza de la manera mas placentera para mi y mas dolorosa para ella.

Relatos Eróticos LésbicosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora