capitulo 6 📚

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La libreta abierta frente a el, leía con detenimiento cada palabra buscando algo que delatara el paradero de su amado...

Hoy... He descubierto que no le importan las pecas en las mejillas de la gente... El físico no le importa... Me da tantas esperanzas de lograr conquistarlo pero... Yo soy tan... Imperfecto y el es tan imperfectamente perfecto...

R:pecas...

Su amado tenía pecas en sus mejillas, río levemente a pensar en lo tierno que se verían esos ojos azules con unas mejillas llenas de pecas como miles de estrellas... O talvez pocas estrellas como esas que se ven aunque el cielo está contaminado y solo se distinguen pequeños puntos blancos en el cielo...

Sonreía pensando en como sería su chico, hasta el momento solo conocía sus ojos y que sus mejillas tenían pecas pero... Que más?... Cómo sabría que es el?...

Siguió leyendo, encontrándose con un mechón de pelo, o bueno dos mechones, uno de un tono castaño obscuro y uno más claro...

Mi cabello y el de el... Cómo se vería el de mis hijos con el... Si pudieramos tenerlos...?

El ojibicolor noto el color del cabello de su chico, era un castaño claro, no se imaginaba tan claro ese castaño... Lo había visto si pero no había distinguido bien el color,   tomo el mechón de ese cabello un poco ondulado, suave y lindo...

Siguió leyendo aquella libreta llena de secretos de su amado

Adoro cuando usa esos lentes... Lo hacen ver tan... Sexy... Si sexy y lindo, son las palabras correctas...

Un sonrojo inundó la cara de el de ojo bicolor, era una de las únicas personas que pensaba que el se veía bien con esos lentes, sonrió, si a él no le importaba tantas cosas imperfectas que tenía el bicolor como sus ojos, sus lentes, su torpeza, sus tonterías, su voz ruidosa... El no se quejaría de quién sería su amado... Cerró la libreta, había tenido mucho amor en el aire por ese día...
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Las cosas estaban tranquilas un castaño ojimiel mantenía su cara pegada a una mesa de la escuela mientras pensaba en si su amigo habría leído la libreta entera el día de ayer, escucho un sonido familiar o bueno que el había memorizado para distinguir si su amado estaba cerca cerca o lejos y era el sonido de las llaves que llevaba con el, miro la puerta y hay estaba tan sonriente como siempre, hoy traía algo nuevos en la mano una hoja de papel doblada en cuatro partes, el ojimiel estaba dudoso que contenía ese papel...

R:hola

Sp:hola... Que traes ahí?

R:es una carta la escribí ayer para mí niño x pero... No sé cómo dársela si ni siquiera se quién es...

Sp:oye... Creo que tú chico amado pasa tiempo en la biblioteca - mintió pues el nunca iba a la biblioteca más que a dormir-

R:la biblioteca?... Y tú como sabes de mi niño x?

Sp:lo vi entrar a la biblioteca ayer en la salida... Es todo

R:y no pudiste decirme?! Quiero saber quién es!

Sp:y si yo no quie-

R:tu?!

Sp:yo no quero delatarlo?!

R:solo quiero saber quién es

Sp:que tal que el no está listo

R:hablas como si lo conocieras, sabes quién es?!

Sp:no tengo idea de quién es, solo digo las cosas como puede que el las quiera

R:ok, estamos discutiendo por algo que es mi problema, yo iré a la biblioteca a ver si lo encuentro y le entregaré esto o no se... Sabes cuál es su casillero?

Sp:no... Pero yo podría dárselo por ti, es probable que el huya de ti, no?

R:si... Esta bien, tómalo y entregárselo a mi niño x, dile que es con mucho cariño

Sp:lo buscaré

El ojimiel tomo la hoja de papel y la guardo en su bolsillo, estaba más que feliz de no haberse delatado, pero aún quería su libreta, eso era lo que más lo delataría...

siempre tuyo... señor x~ {spartor}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora