POV Rose
Me voy a la casa y me topo con mi madre frente a mi cuarto—¿que sucede Rose?, ¿por qué tienes esa cara?—dice mi madre en cuanto me ve.
—El doctor Chad me diagnosticó con esquizofrenia y me moleste por eso, porque no estoy loca—le respondo y entro a mi habitación y cierro la puerta con seguro para que nadie entre.
—Siéntate Rose y respira un poco—articula el Espíritu y le hago caso.
—¿Por qué están difícil de creer?
—Tranquila.
Me acuesto en la cama y me arropo cubriéndome hasta la cabeza—ahora estoy un poco triste—le digo.
Siento que algo jala la sabana hasta mi cuello descubriendome el rostro—no estés triste—expresa el Espíritu.
—Rose, abre la puerta—escucho a mi padre decir.
—Ains—me levanto de la cama y le quito el seguro.
Él abre la puerta—si no te tomas el medicamento no tenemos más opción que internarte Rose, ¿lo entiendes?
—No me importa, no voy a tomar medicamentos porque se que no estoy loca.
—Deberías tomarlo Rose, solo por un tiempo, no te pasará nada malo te lo aseguro—manifiesta mi madre y yo frunzo el ceño.
—¿También estas de su lado?—no me responde—me voy de aquí.
Agarro mi cartera y las llaves del auto—no vas a ninguna parte—articula mi padre—te tomarás el medicamento y si no lo haces, mañana mismo te interno.
—Pues intername porque no me lo tomaré.
—Que así sea entonces—me sorprendo por su respuesta—empaca la ropa de ella Sonia y mañana temprano nos vamos.
—De acuerdo—contesta mi madre y siento como si me apuñalaran en la espalda.
Salen de mi habitación y yo respiro hondo. Mi madre regresa inmediatamente con una maleta en mano y comienza a sacar mi ropa del closet para entrarlo a la maleta—mamá no, no hagas esto—expreso haber si reacciona y deja de ser tan sumisa.
—El doctor ya habló Rose, estas mal ¿porque no lo aceptas?—no le respondo.
Después que ella termina sale de mi habitación y me deja sola en el cuarto. Yo me acuesto otra vez y ni siquiera bajo a almorzar ni a cenar pasandome prácticamente el día completo en la cama pues, no quería levantarme.
—Tienes que comer algo Rose—me dice el Espíritu.
—No quiero—me empieza a sonar el estómago como una hora después y me remuevo incómoda porque se que tiene razón, tengo que comer algo.
Miro el reloj y veo que son las 12 de la madrugada—ya deben estar durmiendo—decido bajar para comer algo.
Y me preparo un sándwich—Espíritu, ¿cómo era Adelaine?
—Pues, era muy hermosa, con pelo rubio y ojos azules. Le encantaba estar conmigo, disfrutaba mucho estando con ella hasta que llegó ese día...
—¿cómo...cómo fue que sucedió exactamente?
POV Espíritu
Miro a Rose llenándome de tristeza.
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El chico invisible que vive en mi casa
ParanormalneElla, fría y solitaria. Él, caliente como el fuego. Cuidado porque te puedes quemar aunque prefiero arder en fuego que estar congelada en el hielo.