Para un Gem el amor es definido desde que naces, pues nunca podrá haber una fuerza del mal sin que exista, el bien, en fin, en la teoría de caos nosotros, nacemos sabiendo quien nos acompañará, puede ser como compañero sentimental o como nuestro enemigo, dependiendo de nuestras funciones hay mas probabilidad de entablar una buena relación o no.
Yo por ejemplo soy un Gem nivel 4, es decir, que el circulo en el que se me instruyo eran personas con el mismo nivel que yo, con la mismas misiones siendo una de las ramas del gran aparato de justicia del mundo o bueno de su organización. La otra persona que comparte mi energía, por otro lado, es del grupo de los 5, personas con el ultimo nivel, desde donde tengo entendido, tiene una inteligencia excepcional, pero libertad muy poca, su vida es el laboratorio, su amor es la ciencias y ahí expende las 24 horas los 7 días a la semana, durante toda su vida.
Los nivel 5 no viven mucho, mueren por cansancio o se suicidan así que nunca me intereso ir a conocerlo, no soportaba esos laboratorios, dicen que los soldados son las personas con el corazón mas dormido con el espíritu mas apagado, pues por el marco jerárquico que los rige le es imposible mirar a otro lado, saltar una orden, creer en otra cosa que no sea la voz de tu comandante pero ¿en la inmensa libertad que la ciencia te inunda no te conviertes tu en su esclavo? la moralidad no va con la ciencia de los Gem, cualquier cosa que se puede hacer se hace por cualquier medio, y cueste lo que el ejecutivo tenga pronosticado.
Esta relación fática de amor pronosticada por nuestra energia nunca tubo oportunidad de surgir pues opuestos como agua y aceite, vivíamos en dos mundos diferentes, hasta que un Bum! sonó y derrumbo toda la base que el ejecutivo creó, derrumbando el mundo que yo había conocido en el que había crecido, desatando las cuerdas de mi cautiverio pero ¿por que no quiero correr?.
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juegos de un corazón herido
Romanceuna luz, un sueño, que perseguí desde una corta edad, pero como una estrella fugaz el pasó, y yo me desperté, preguntándome ¿Qué hare? ¿para que serviré? en esos grandes y largos pensamientos, es muy fácil mirar al la boca del vacío, pensando, lo im...