CAPITULO 8

6 0 0
                                    

Chandra
Estaba escuchando con suma atención todo lo que Alum estaba relatando, mis padres no son mis padres, no soy totalmente humana, nací extinguiendo la vida de otro ser humano, mi cabeza comenzó a dar vueltas, las lágrimas brotaban sin control, mi cuerpo temblaba sin parar, quería vomitar, quería gritar, quería golpear algo con suma fuerza, pero no pude mover ni un solo músculo, estaba completamente en shock, mi visión comenzó a nublarse, estaba a punto de perder el conocimiento, cuando las manos de Alum tocaron mi rostro, veía sus labios moverse, pero no escuchaba lo que decía, me agitaba constantemente, tratando de sacarme de la oscuridad en donde me encontraba, estaba llena de mucho dolor y consternación, absorbí el cuerpo de un ser humano, mate un ser indefenso, soy un monstruo...Podía escuchar un goteo constante, una leve brisa revolvía los mechones de mi rostro, ese olor a musgo que ya era tan familiar, se coló por mis fosas nasales indicándome en donde me encontraba, seguramente debí desmallarme, aún no puedo abrir mis ojos, están demasiado pesados, tampoco puedo moverme, mi cuerpo no responde, escucho un par de patas acercarse hacia mí, su olor es tan único, no necesito abrir mis ojos para saber quién es, siempre me ha gustado su olor, es un aroma a bosque, a lluvia, con un toque de madera, son de esos olores que no entiendes exactamente a que huele, pero te encanta, esos olores que te dan una tranquilidad descomunal.Lo escucho moverse inquieto, cuando escucho la voz de Achak que se acerca a nosotros.¿Cómo está? ¿Aún no reacciona? Pregunto Achak.No se ha movido ni un centímetro desde que la traje, me estoy volviendo loco, ¿crees que debería llevarla con los humanos para que la examinen? Le pregunto Alum a Achak.No lo sé, esperemos a ver si reacciona en el transcurso del día, fue mucha la información que recibió por tu parte, dejémosla descansar un poco más. Le respondió Achak.Achak salió de la cueva, mientras que Alum se acomodó a mi lado en modo lobuno, el calor que desprende su cuerpo me alivia la pesadez de mi cuerpo, siento como se relajan mis músculos, siento algo frío y húmedo cerca de mi cuello, seguido de una lengua un poco áspera que pasa por toda mi clavícula que me hace temblar, abro los ojos de golpe, y esas dos gemas verde esmeralda están mirándome fijamente, vuelve a lamerme, pero esta vez más hacia el centro subiendo hasta mi garganta, mi cuerpo comienza a reaccionar, puedo sentir mis dedos, pero aún no puedo moverme a voluntad, él sigue mirándome atento a cada reacción de mi cuerpo, mete su hocico por debajo de mi franela negra y logra subirla hasta mi busto, siento nuevamente su lengua pasar por mis costillas y una oleada de calor atraviesa mi cuerpo, me siento confundida, estoy sumamente atraída a este lobo de gran magnitud, siento que muero de deseo, pero es un lobo, sé que también es humano, pero me está lamiendo como su fuera un aperitivo ¡por todos los cielos me está volviendo loca! Se siente jodidamente bien, su lengua inquieta vuelve a rozar mi costilla y esta vez si logro retorcerme un poco, aún no consigo hablar, aunque creo que es lo mejor, no sé qué podría decir sobre esto, estoy sumamente excitada por las lamidas de un perro. ¡Genial ahora también me gusta la zoofilia! Definitivamente perdí la cabeza. No me di cuenta de que se había transformado, hasta que su fría mano tomo uno de mis senos, mis ojos se abrieron como plato, intente gritar por el asombro, pero nada salió, su rostro estaba completamente serio, estaba realmente concentrado en lo que estaba haciendo, comenzó rozar mi pezón suavemente con la yema de sus dedos, su mirada clavada en mi rostro me avergonzaba rotundamente, apretó suavemente mi pecho y un leve gemido salió de mi boca ruborizándome aún más, podía escuchar perfectamente a su corazón latir, aunque por fuera se veía calmado, por dentro estaba fuera de control, eso me hizo sonreír, y él lo capto en el acto.¿Qué te parece tan gracioso? Pregunto confundido.No pude contestar, sin embargo moví un poco mi mano en su dirección, indicándole que era él quien me hacía reír.MM. parece que soy yo el que te causa gracia, veamos si después de esto aún te sigues riendo. Dijo de manera maliciosa.Se subió encima de mí, y comenzó a mordisquearme el labio inferior, me beso dulcemente hasta llegar al lóbulo de mi oreja izquierda para lamerla con extrema suavidad, fue bajando por mi cuello hasta llegar al escote de mi busto, subió completamente mi blusa, luego mis brazos y finalmente me ato con la misma las muñecas, mi respiración cada vez más entrecortada, mientras que su mirada estaba cargada de un fuego vivaz, siguió descendiendo hasta toparse con la cinturilla del mono color caqui, me miro fijamente para no perderse ningún detalle de mi expresión, mientras me quitaba lentamente aquel mono que tanto le estorbaba en su camino, mis ojos casi se salen de órbita, me faltaba el aire, estaba completamente indefensa ante aquella semejante criatura llena de deseo voraz, me tomo del tobillo y alzo mi pierna hasta su hombro, comenzó a besarme tan lentamente que me estaba enloqueciendo, fue subiendo hasta mi muslo, donde me dio un leve mordisco, sus ojos cambiaron repentinamente, el autocontrol que poseía, se había ido por completo, todo su cuerpo comenzó a temblar, apretó sus puños fuertemente, su respiración era totalmente descontrolada, y su mirada estaba pidiendo a gritos devorarme, tomo mi ropa interior entre sus dientes y comenzó a quitármela con lujuria, sentir su respiración en mi sexo fue todo lo que necesite para que mi poca cordura se fuera al demonio, mi cuerpo estaba en llamas, poco a poco comencé a moverme, mientras que mi macho alfa se había quedado completamente inmóvil contemplándome, tome su rostro entre mis manos, lo acerque lentamente hasta mi boca, pero súbitamente se abalanzó sobre mí.No... no... puedo... parar...Vete... corre... por favor... aléjate de mí...Lo dijo tan desesperadamente, que no me quedo más remedio que hacerle caso, me vestí rápidamente y me aleje de él sin mirar atrás.Alum¡Rayos! ¡Maldición! No se suponía que iba a llegar tan lejos. ¡DEMONIOS! Es tan jodidamente hermosa, me vuelve completamente loco, su aroma a vainilla, dulce frágil, delicado, provoca comerla de un bocado, su piel blanca pálida es tan suave como el algodón, acariciar su cuerpo desnudo ha sido uno de los mejores momentos de mi vida, no puedo describir con palabras la sensación que sentí al morder su muslo, perdí totalmente la cabeza en ese instante, quería hacerla mía, quería escucharla gemir, quería saborear todo su cuerpo, me abalance sobre ella como un cazador atrapando a su presa, cuando una voz inquietante resonó en mi cabeza.Si sigues, te matare en este instante. Dijo.Supe de inmediato quien era, la Diosa jamás vacilaba ante sus amenazas, me congele en el acto y tuve que pedirle a Chandra que huyera de mí, estaba completamente fuera de control y lo peor de todo es que la Diosa estaba al tanto de todo, ¡demonios soy un completo imbécil!Me quede en la cueva inmóvil por lo que pareció una eternidad, hasta que Astik me saco de mis pensamientos traumáticos.¡Alum, Alum! Chandra se fue corriendo y Litha y Leah fueron tras de ella.¿Y POR QUÉ DEMONIOS NO LAS DETUVISTES?¿Acaso yo soy el alfa? Respondió enfadado.Yo solo vine a avisarte, es mejor que vayas pronto y lo resuelvas de una vez.ChandraSalgo de la cueva a toda velocidad, sin saber exactamente a donde ir, trato de transformarme, pero mi cuerpo aún no me obedece del todo, tropiezo con una rama y caigo al suelo de manera violenta, escucho unas pisadas acercarse hacia mí, giro bruscamente mientras que dos lobas color ámbar se acercan sigilosamente en mi dirección.¿Qué demonios quieren? Pregunte enojada.¿Pues acaso no es obvio? Respondieron ellas.La verdad no, aunque lo más curioso aquí es ¿cómo puedo entenderlas?Muy fácil, también somos descendientes de los meta morfo, por eso es que yo soy la mejor opción para Alum, tú solo eres un estorbo que está interfiriendo en mi camino. Dijo Leah.Qué curioso, si de verdad las cosas fueran así como tú dices estoy segura de que Alum no tendría ojos para nadie más que no fueras tú, lo sé bien por qué así es conmigo. Sonreí de manera victoriosa.¿ACASO QUIERES MORIR? Gruño Litha.¿Te atreves a gruñir a tu alfa? Sonreí nuevamente.Las dos se abalanzaron contra mí, pero antes de que pudiera moverme Alum apareció a toda velocidad posándose al frente de mí.¿PERO QUÉ RAYOS CREEN QUE HACEN? Grito Alum enfadado.NO TE METAS ALUM, SOY TU COMPAÑERA, SOY SU ALFA, YO RESUELVO ESTO, POR FAVOR APARTATE. Le dije.Alum retrocedió y nuevamente las dos lobas se prepararon para atacar, pero esta vez estaba preparada, me transforme, y me abalance sobre Leah primero, esta trato de morder mi cuello, pero pude sostener su mandíbula y lanzarla hacia un árbol que estaba cerca, Litha se enfureció, trato de tomarme por la pierna izquierda, pero con la misma la patee fuertemente en el hocico, me sentía tan llena de vida, tan poderosa, la adrenalina recorría cada parte de mi cuerpo, mi cabello comenzó a brillar, mientras que las dos lobas se preparaban para atacar al unísono, me puse en posición y con todas mis fuerzas le estampe un golpe a Litha, tan fuerte, que Leah también fue sacudida, las dos cayeron fuertemente sobre el suelo.¡YA ES SUFICIENTE! SOY SU ALFA ACÉPTENLO, YO LAS PROTEGERÉ CON MI VIDA, ES HORA DE QUE USTEDES HAGAN LO MISMO. Grite con autoridad.Las dos lobas se retorcieron en el suelo, el vínculo de alfa estaba haciendo efecto, tardo lo que pareció una eternidad, hasta que dejaron de luchar y se rindieron ante mi autoridad.

LA DONCELLA Y EL LOBODonde viven las historias. Descúbrelo ahora