Séptima carta.

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Hola, Namjoon.
Realmente no puedo describir lo que siento, mi corazón está estallando de felicidad. Nunca me he sentido tan feliz, no desde la vez que vi tu sonrisa volver a aparecer después de meses. Hoy me encontré contigo en la tienda, y me Re conociste. ¡Me reconociste! Después de seis años, me sorprende que puedas reconocerme. Me dijiste "Hola, ¿tu no eres Seokjin?" mi pobre corazón no puede aguantar tanto, has sabido de mi existencia todo este tiempo, si sabes mi nombre, y aunque no hayas estado pensando en mi todo este tiempo, ni escribiendome absurdas cartas que sabes que no leeré, te has acordado de mí. Mi sonrisa no podía ser más grande, con todo el amor de mi corazón te sonreí, me devolviste la sonrisa, al verte de mi di cuenta que mis sentimientos solo han ido creciendo con el paso de los años. Nos sentamos a conversar en la plaza, fue como en todas las fantasías con las que soñaba despierto todos estos años, aunque me contaste que te casaras con Momo aunque crees que sea pronto, me dijiste que en verdad la amas y que es la fuente de tu felicidad. A pesar de ello, no me sentí triste, más bien me alegro en demasía, por fin eres completamente feliz y encontraste la persona indicada para ti. No puedo, ni siquiera sentirme triste, tu felicidad es todo para mí.

Con melancolía, Kim Seokjin.

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