Eternidad Prometida. [[Jasper Hale.]]

01 Olor Embriagante.

La semana comenzó en Forks, Andrómeda se integraba a clases ese día. El día la reciba con un frío agradable y nada de lluvia o nieve.

Andrómeda se metió a bañar, ella entraba a las 8:00 a la escuela, por lo que aún tenía tiempo para desayunar, cambiarse y llegar a tiempo por sus horarios. Eran las 6:00 de la mañana, por lo que tenía tiempo suficiente.

Escogió un atuendo sencillo pero perfecto para ese día. Llevaría un suéter color beige claro, una falda negra que acompañaría con unas botas largas que le llegan hasta arriba de la rodilla. Se pondría un cinturón beige para enmarcar su delicada cintura se pondría unos accesorios dorado que harán resaltar su presencia, tomó una mochila negra con algunos detalles en dorados. Y para no ir totalmente monocromática, usaría una pashmina en color rojo y formó una rosa para el cuello. Se puso un poco de loción de su padre para llamar más la atención y bajo para preparar su tupper con comida para llevar.

Después de casi una hora, decidió que era momento de limpiar sus platos, los lavó y guardó su comida en una bolsa térmica, después se lavó los dientes y cuando el reloj marcó las 7:40, salió de su casa para irse a la escuela, no le quedaba lejos, y su padre pagó el estacionamiento. Le tocó un buen lugar, así que comenzó su camino en su hermoso carro. Un hermoso audi en color gris, lo amó desde que lo vio en la agencia.

And I've always lived like this
Keeping a comfortable distance
And up until now
I had sworn to myself
that I'm content with loneliness
(The Only Exception.)

Cantó la canción, a decir verdad, si conoce a esa persona, sería una canción para cantarle. Sonrió mientras manejaba con calma. Vio como todos se sorprendieron cuando entró al estacionamiento, pero decidió restarle importancia.

Escuchó como todos admiraban su auto, pero decidió salir, tomó su mochila y con una sonrisa en los labios, bajó con la seguridad que sus padres le habían educado desde niña. Se puso un audífono con música baja para escuchar con claridad y responder en caso de ser necesario.

Lindo auto. - Exclamó un alumno.-

Gracias. —Respondió con tranquilidad y siguió su camino. Hasta que algo le llamó la atención.-

¿Será Cullen? Son los únicos que visten así y que aparte traen autos hermosos como el de ella. —Dijo con admiración una de las alumnas. Lo que hizo que la atención de Andrómeda se activará.-

Buenos días. Soy Andrómeda Campbell. —Saludó al entrar a la oficina de orientación.-

Ahh claro, la estudiante nueva. —Sonrió una señora, con una sonrisa.- Deja voy por tu carpeta.

Andrómeda se quedó ahí, esperando mientras llegaba la orientadora. Comenzó a realizar algunas anotaciones para la compra de la semana, compró cosas para un par de días, pues quería visitar varios lugares para comprar comida. Sonrió al ver a la orientadora.

Querida, aquí están tus horarios, el mapa de orientación y la lista de asistencia, los maestros deben firmarla y al final de las clases traes esa hoja para darla de alta y te doy otra. -con una sonrisa le entrego la carpeta.- Bienvenida a la escuela y bienvenida a Forks.

Muchas gracias. —Sonrió mientras caminaba con elegancia, atrayendo la mirada de los demás.-

Hola —escuchó un saludo y vio a un joven con aspecto algo descuidado, pero con una sonrisa amable.- Soy Eric, ojos y oídos de la escuela. Cualquier cosa que necesites, una cita, un guía, un amigo  quizá alguien con quien llorar. Y tú eres Andrómeda Campbell. ¿Verdad?

Un gusto, si, soy Andrómeda. Acepto el guía, por ahora.
—Sonrió amable aunque no estaba muy acostumbrada a las multitudes, sus padres y ella viajaban mucho, pero su círculo de interacción era algo estrecho.-

Claro, ¿qué clase tomas? —Leyó el horario.- Historia. Vamos te llevo.

Andrómeda caminó en silencio, recordó que debía hablarle a su padre o irían a buscarla. Por lo que para evitar eso. Decidió que era bueno hablarles.

Este es tu salón, aún faltan unos minutos y el maestro aún no llega. Nos vemos pronto. -dijo intentando coquetear, pero solo logró una sonrisa amistosa.-

Gracias Eric. —Sacó su celular y le marcó a su padre.-

Mi pequeña Andy. - Se escuchó la calma del otro lado de la linea.- Ya iba a mandar a alguien a ver si todo estaba bien.

Lo siento papá, estuve algo ocupada y se me olvidó marcar. Ahora estoy en la escuela, pero tengo unos cortos minutos. —Sonrió mientras escucho la voz de mi padre.-

Tu madre está feliz, ¿ya sabes quien es? —Preguntó molesto, no quería entregar a su hija aún.-

No, ¿cómo puedo saber si es? —Pregunta con un poco de miedo, ¿y si se equivoca? Realmente no quiere sufrir.-

—En eso otra voz masculina se escucha. Dejando a Andrómeda con mucha calma.- Escucha pequeña, lo sentirás en el momento, a veces tarda un poco, pero son segundos, puede ser por el toque, quizá por la mirada, el olor, la voz o un acto que te lo diga.

No quiero sufrir. —Sintió un poco de dolor. Pero su apariencia seguía siendo firme y elegante, sólo si la conoces bien, serias capaz de distinguir todo.-

No te preocupes, si alguien te hace sufrir, pasará por nuestras propias manos. Tu sigue con tu objetivo en mente. Nosotros estamos a tu lado.

Gracias papá. —Le mando un beso y colgó la llamada.-

Andrómeda entró al salón con mucha calma, hablar con sus padres le hacía sentir protegida. Se presentó con el profesor y con sus compañeros, para tomar asiento a lado de un joven rubio, muy guapo y serio.

¿Qué es ese olor? —Jasper se sintió intimidado, hasta que vio en la entrada y ahí la vio, su olor. Lo volvía loco, pero a la vez le transmitía calma.- Calma Jasper, está a tu lado. Tiene un hermoso nombre y es muy hermosa. —Pensó mientras deseaba poder hablar.-

El silencio entre los dos jóvenes era muy tranquilo, Andrómeda se sentía cómoda, por primera vez no se sentía como un objeto de deseo. Pues el joven a su lado la veía, pero de otra forma. Por otro lado Jasper agradecía que no fuera igual que Isabella.

Soy… Soy Jasper Hale, un gusto hermosa señorita. —Se sorprendió al dudar en hablar. Pero deseaba poder hablar con ella. Lo deseaba y era lo que más anhelaba.-

—Andrómeda sintió que flotaba, sintió una calidez que lleno su corazón.— Destino.- Fue lo primero que vino a su mente.- Andrómeda Campbell. Apuesto caballero.

Andrómeda tocó la mano de Jasper, y ambos sintieron una descarga eléctrica, algo único, algo más allá que la Tua Cantante, incluso más allá que es vínculo. Algo que Jasper no logró identificar, pero Andrómeda sintió que había encontrado su lugar.

Traducción de la parte de la canción seleccionada…

Y siempre he vivido de esta forma,
manteniendo una confortable distancia,
y hasta ahora,
me había jurado a mi misma
que estaba contenta con la soledad.