"Mi Omega Salvaje" (BAKUDEKU)

Cap 14: Pequeña inocente.

Al salir de la sala de reuniones, Izuku se dirigió al vestidor de varones.

Izuku: ¡Son unos malnacidos! - tiro su bolsa de mano al piso.

Los profesores y oficiales que estaban presentes en la reunión le hicieron preguntas tras preguntas, él respondió una por una pero lo último que le preguntaron, no supo como responder.

Izuku: Una niña - pronunció dejándose caer al piso deslizándose de espalda por los casilleros - Usar a una niña para esos actos tan ruines - la información que le brindó Tsukauchi era demasiado irreal.

Izuku estaba tan perdido en su ira contra las personas que crean el nuevo fármaco que no se dio cuenta de la presencia de alguien más en el vestíbulo.

Se puso de pie y comenzó a quitarse la ropa para una vez más ponerse su disfraz encubierto.

Pov Bakugo.

Después de que Deku saliera del baño, me dirigí al salón de clases, aun no había casi nadie, quería saber a donde se regía Deku así que tomé como excusa llevarle la carpeta al profesor Aizawa y lo seguí sin que se diera cuenta, al principio pensé en regresar al salón de clases ya que no tenia tanta importancia saber algo sobre ese idiota.

Lo seguí hasta que se detuvo frente a la sala de reuniones, lo sabía ya que conosco todo el jodidoe edificio a la perfección.

Esperé a que ingresará dentro de la sala y lo seguí, al entrar estaban todos los profesores presentes y también la Policía, nadie noto mi presencia ya que las luces estaba tenues con una enorme pantalla al fondo de la sala.

El parloteo entre ellos comenzó, el idiota de Deku parecía dirigir la reunión, ¿quien mierda es este tipo? Con unas palabras hizo callar a todos ahi dentro.

Deku comenzó a decir un montón de cosas que no tenían sentido para mí, pero.... a medida que pasaba el tiempo y seguía escuchando todo... me sentía demasiado impotente, enojado, iracundo sin saber por que, pensé en salir de ahí y cuando lo estuve por hacer.... ¡pum! El imbécil se clava un lápiz en su brazo, por poco y me lanzo a detenerlo, ¿En qué mierda estaba pensando? No lo sé, simplemente mi cuerpo reaccionó por si solo pero logré contenerme y evitar que se dieran cuenta de mí presencia.

Al ver como Deku se sacaba el lápiz del brazo, su herida comenzó a sanar casi de inmediato, fue como ver a miles de parásitos unirse unos a otros, aún siento ganas de vomitar lo que desayune maldita sea.

Terminó eso y ya no lo soporte más así que me salí de ahí y vine directo al vestíbulo, después de todo el timbre del receso sonó.

Y.... ahora estoy metido en esta maldita situación de nuevo. Ugh mierda esque no se puede evitar esto.
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Izuku seguía desvistiendose pero se detuvo al escuchar su teléfono sonar, lo sostuvo y respondió la llamada.

Izuku: Si diga - al otro lado de la línea estaba el oficial Tsukauchi - Si comprendo, no se preocupe estaré ahí en cuanto salga de la Academia - colgó la llamada y puso de nuevo su celular en la mochila - Si ha de ser por alguien más débil que yo, lo haré sin importar que - murmuró terminado de cambiarse de ropa.

Katsuki aun seguía tras de los otros casilleros escuchando todo.

Katsuki: ¿Y ahora de que habla? - pensó para si mismo esperando a que se fuera el peliverde.

Paso un par de minutos y el peliverde salió de ahí vestido como entró en la mañana, Katsuki se preguntaba como demonios no se podía diferenciar entre el Deku original de la apariencia que tenía justo ahora al salír de ahí, su apariencia era la de una mujer y no se notaba sus facciones masculinas en lo absoluto, bueno después de todo es un Omega y no es tan inusual que eso fuera posible.

Horas después.

Pov Izuku.

La verdad tras mi transferencia a la U.A. no es de ser un estudiante más.

La verdad es otra y por el momento nadie debe saberlo, nisiquiera mi madre lo sabe, Toshinori, el oficial Tsukauchi y yo tenemos una meta en mente y es desmantelar a la banda de los Yakuza, gracias a la información que me brindó el oficial Tsukauchi ahora se quien fue el que me causó tanto daño y no dejaré que está oportunidad de poder hacerle lo mismo pase de entre mis manos.

Ahora me dirigió a un lugar en específico en dirección a las oficinas del detective Sir Nighteye donde trabajo un colega mío también.

Mirio Togata un graduado de la Academia U.A., él y yo tenemos una nueva misión que cumplir.

Izuku: Creo que... era por aquí - miraba la dirección en su celular - Si es por esta dirección.

Seguí caminando tranquilamente sin preocupación cuando de repente algo chocó contra mí.

Me caí al suelo y levanté la vista de inmediato parandome del suelo con brusquedad.

Frente de mi estaba una niña pequeña tirada en el suelo, su aroma olía a miedo y desesperación.

La pequeña se puso de pie y camino hasta estar junto a mí y me sujeto de la camisa olgada que traía puesta.

-¡Ayúdame por favor! - me pidió temblorosa.

Izuku: ¿Que pasa, estas bien? - observe sus brazos y cuerpo completo, tenía vendas por todas partes y usaba una bata de hospita....

-¡Ayúdame ellos vienen por mí! - señaló al callejón por donde salió ella.

A lo lejos vi un par de siluetas acercándose en nuestra dirección, la pequeña niña se aferraba aun más a mí, sin dudarlo la sostuve entre mis brazos y comense a correr, por suerte esas personas no me vieron y logre perderlos de vista.

Ya no podía ir a la agencia, así que tome un camino diferente y nos subimos a un taxi, yo cubri a la pequeña niña con mi chaqueta que tenía puesta, ella se veía demasiado asustada.

La acerque ha mi y le acaricie su cabello dejando salír mis propias feromonas para calmarla, que bueno que el taxista es un Beta y no un de nosotros.

Le pedí al taxista que conduciera a mi apartamento y nos dejará en el estacionamiento subterráneo, de ese modo si alguien nos estaba vigilando desde lejos no sabría quien era yo y tampoco la pequeña.

Le pagué al taxista y subimos por el ascensor hasta nuestro apartamento, una vez dentro puse a la pequeña en el sofá y llame de inmediato a mi colega Mirio para informar sobre la situación.

Ahora no se en que lío me he mentido pero...

Izuku: Dime pequeña ¿Como te llamas?

-Mi-Mi nombre... es..

Asustada no podía articular palabras.