ᴘᴀɪɴᴛɪɴɢ ʏᴏᴜ ᴛʜʀᴏᴜɢʜ ᴍʏ ʜᴇᴀʀᴛ

I

Felix respiró el aire fresco de la ciudad durante unos tres minutos antes de que escuchara un grito junto a su oído y, para ser honesto, estaba sorprendido de que su paz hubiera durado tanto.

"¡Estamos en París!"

"Tienes tanta suerte de que esté de buen humor", suspiró Changbin, con las manos enterradas en los bolsillos y una sonrisa de suficiencia plasmada en su rostro mientras miraba la calle húmeda. "O ya habrías ido al río, desde aquí arriba".

Jisung hizo un puchero, retrajo los brazos y puso los ojos en blanco. Su cabello azul oscuro estaba un poco más largo de lo normal haciéndolo lucir incluso más etéreo de lo que ya era. Tenía un paraguas, uno negro, colgando de su brazo y la elegante gabardina lo hacía parecer como si encajara en la ciudad del amor,corriendo a su trabajo en un edificio histórico hablando su lenguaje romántico, al contrario que el resto del grupo, vestido con ropa de calle y luciendo completamente perdido.

Por supuesto, estaba completamente equivocado. Jisung no tenía idea de cómo hablar una palabra de francés, y la gabardina en realidad pertenecía a Seungmin, quien les había dicho a los demás que esperaran en ese lado de la calle como perros, cruzándolo y hablando con los vendedores ambulantes, tratando de averiguar dónde diablos tenían que ir para encontrar la casa en la que se alojaban.

"Eres tan malvado, literalmente acabamos de llegar".

"Sí, bueno, nos sentamos juntos en el avión, realmente no puedes culparme".

Jisung se volvió hacia Felix, intensificando su lindo rostro.

"Lix, está siendo malo conmigo. Golpéalo".

Se escuchó una risa femenina detrás de Felix, quien se dio la vuelta para sonreírle, envolviendo lentamente el brazo alrededor del hombro de la chica de cabello oscuro mientras ambos miraban a Jisung.

"¿Qué pasó ahora? Salgo por dos segundos para ir a atender una llamada y ya está haciendo pucheros de nuevo", Jisung dejó de hacerlo y fingió llorar. "No llores, grandulón, ¿qué te hicieron estos dos?"

"Felix te trajo a un viaje de chicos, eso es suficiente".

Felix dejó caer la barbilla, pero la chica no pareció molestarse, simplemente se rió entre dientes con Jisung, aunque ambos estaban un poco tensos.

"Bueno, no te preocupes, te dejaré hacer tus cosas de chicos, solo quiero estar en la ciudad del amor con mi novio por unos días, el resto de las semanas, él es todo tuyo", le guiñó un ojo , sus dientes casi cegaron a la más alto, quien le lanzó una sonrisa falsa.

"Genial, o tendría que robármelo".

Felix también se rió entre dientes, y Changbin suspiró ante las palabras, agradeciendo a todos los dioses en los que no creía cuando el chico pelimarron apareció junto a ellos con una sonrisa. Tenía puesta una camisa blanca, lisa, que hacía juego con el vestido de la chica, jeans negros que no combinaban para nada con la gabardina que le había regalado a Felix, y unas simples gafas de sol negras colgadas de su cola, que no hacían falta para nada para el tiempo de la mañana