"Mutantes..." Soft Pico X Soft BF

Capítulo 2 - El Mutante del Lago

Narrador

Benjamín se despertó por el sonido del lago que tanto cuidaba, si llegaba a ensuciarlo, buscaba más de miles de maneras para limpiarlo hasta las más loca o la más estúpida, miró su reflejo como de costumbre, se quitó la máscara para limpiarse la sangre y el líquido negro de su cara que frecuentemente salía de lo que quedaba de ojos, una vez que terminó de lavarse bien, se puso su máscara nuevamente, subió al árbol donde durmió para sacar unos desinfectantes y vendas para irse de camino al bosque donde se encontraba Grace, la cuál seguía dormida, hasta parecía cadáver de no ser que ella de alguna manera respiraba.

— Que bien, todavía duerme — Dijo en voz baja Benjamín, pensó en una manera para curarla, en una de sus ideas miró sus alas — Bueno, no estaría mal probarlas... — Dicho esto empezó a aletear.

Se asustó al ver que empezó a volar, miró a Grace hasta estar lo suficientemente cerca para poder tratar las heridas, fue un poco difícil ya que no tenía nada de experiencia en vuelo, aún así logró curarla por completo a excepción del cuello por la soga, vió como la castaña se despertaba, voló sin pensar en el tronco que estaba al lado de ella y fue bajando en silencio, en un mal movimiento se cayó de espaldas, afortunadamente la castaña no vió la caída debido a que seguía adormecida por el sueño.

— Hola, buenos días, Benjamín — Dijo en un largó bostezó la castaña.

— Bu- Buenos días, Grace. ¿C- Cómo dormiste? — Preguntó con gran nerviosismo — ¿Cómo... Te sientes? — Agregó levantándose tratando de calmar el dolor del golpe.

— La verdad, me siento bastante aliviada, ya no me duele el cuerpo, a excepción de... — En toda la oración la castaña alzó su brazo notando que estaba vendado — Espera, ¿Cómo hiciste para curarme desde haya abajo? — Preguntó curiosa.

— Estabas dormida así que aproveché para ayudarte, la cabaña tenía bastantes medicamentos — Respondió Benjamín mirando a un lado muy nervioso.

— ¿Ben, que te dije sobre la cabaña? — Preguntó la contraría cruzando los brazos.

Él suspiro.

— No ir, y mucho menos de noche... — Respondió mirando su cola, que estaba jugando con el pasto.

— Descansaré un poco y seguiré esperando que la cuerda se rompa — Avisó la castaña.

— ¿No puedes simplemente romperla? — Preguntó confundido el pelíceleste.

— No tengo nada a mano para romperla — Respondió alzando los hombros.

— Bueno... Nos vemos — Se despidió el pequeño para irse a la cabaña sin que la castaña lo notará.

Narra Pico

Desperté sintiendo la fría madera donde me puse, mi cuerpo estaba recostado sobre la cama, simplemente hice que se levantará usando las dos manos, miré la motosierra llena de sangre seca en la mesa de la sala de estar, anoche después de que Benjamín se fuera, vió otro intruso solo dejé que mi cuerpo actuará solo como de costumbre suele hacerlo con los intrusos que solo vienen para intentar quitarme todo el equipo médico que tenía. Con solo recordar el gritó del sujeto, me dan ganas de vomitar, lo único que me sacó de mis pensamientos de arrepentimiento fue la sangre que salió de mi cuello decapitado, aún recuerdo con amargura el cómo fue que terminé de está forma tan desagradable, me senté en el sofá con vista a la puerta.

¿Por dónde empezamos? Luego de que Grace y Benjamín se fueron, fuí rápidamente a la puerta del garaje, estaba toda rota y los suministros estaban tirados en el suelo, aún que una caja estaba completamente vacía, alguien había sacado un par de la comida enlatada, recordé el sótano cuando fuí allá lo ví también roto, afortunadamente las cosas se salvaron. Cuando escuché a alguien entrar junto gotas de algo líquido, me dirigí a la puerta encontrando a Damien, pero no era la que nosotros conocíamos, ella al verme inmediatamente me atacó, me empiezo a asfixiar mientras me tiraba contra el suelo, empezé a perder el aire y cuando escuché un estruendo, me di cuenta que había roto mi cuello, pero ella simplemente no me dejó de soltar, de alguna manera seguía consciente y ella sabía eso.