Mayor que yo ||C.V&TU

Capítulo #4

Papá y yo subíamos en el ascensor en silencio. Sentía vergüenza por la estupidez que había cometido, pero no quise quitar el follow porque después de todo ahora Christopher también me seguía. Que loco.

Cuando salimos e íbamos de camino a la oficina de papá una señorita se le acercó y entablaron una conversión un poco aburrida. Yo miraba a la nada hasta que el me habló.

–____(T/N), ¿me oyes? –Bajo de la nube en la que estaba.

–¿Que pasó?

–Tengo que salir un momento, no tardaré mucho, ¿me esperas en la oficina? –me da las llaves.

–Claro.

Tomé las llaves y camine hasta la oficina, cuando introduje la llave se me hizo difícil desbloquear la puerta. Creo que soy demasiado débil para mi gusto. Seguía intentando y nada, ya había empezado a sudar.

–¿Pasa algo? –me voltee rápidamente y vi a Christopher mirándome con el seño fruncido.

Mi estómago dio un vuelco. Su perfume exquisito ya había llegado a mi y por un momento me sentí en otra dimensión, una muy agradable, y me imaginé que mi vida sería más feliz si tuviera su perfume todos los días, y sus ojitos claro.

–Oh...es que, emm, no puedo abrir la, la puerta. –le dije como pude, logrando que mi lengua no se enredara mucho.

–Permiteme –yo me hice a un lado y observé cómo la abría. Si gente, la abrió muy rápido, y no es que el tuviera mucha fuerza o yo muy poca, es que había intentado abrirla para el lado incorrecto –. Ya está

Me sentí tonta....

–Gracias, en serio.

Estiró su mano para darme las llaves y las tomé, rozando su mano.

–Me gusta ayudar

No había caído en cuenta de su voz, era angelical pero varonil. ¿Me entienden? Lo que trato de decir es que es una voz masculina pero de esas que no te cansas de oír porque simplemente te encantan.

Y bueno, no se en que momento me di cuenta de que me gustaba todo de Christopher, aun no lo conociera, me encantaba.

–Hey, ____(T/N), ¿en que piensas? –pasó su mano por enfrente de mi cara para que notara que me hablaba.

–Si, disculpa, ¿que decías?

–Olvídalo, no era importante.

Ugh, maldición. Yo y mi retraso.
Eso hizo que me enterara curiosidad pero no quise seguir preguntando.

–Vale. ¿Nos vemos luego? –digo insegura.

–Claro, nos vemos luego, ____(T/N) –la forma en que pronunció mi nombre me hizo sonreír, y él me devolvió la sonrisa para luego marcharse.

Iba a extrañar verlo de vez en cuando y disimuladamente, eso me hizo bufar. ¿Qué haría ahora? No tenía posibilidad de verlo nuevamente, no es como que el andará por ahí y pudiera tomármelo por cualquier lugar.

Entre y me senté pensativa. ¿Por qué me fijé en él?

¿En serio lo preguntas? –respondió mi consciencia

Sonreí como tonta al recordar el color de sus ojos, sus labios, su perfume... Era imposible que no me fijara en él.