Capítulo 4 Karaoke

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POV Kara


El beso con Lena era lo único que deseaba y esperaba con ansías, sus labios siguen siendo tan suaves y cálidos, su sabor... Rao como extrañaba su sabor, simplemente queda perfecto con el mío, sus besos siguen siendo tan tiernos y cargado de pasión, cuando sentí su lengua peleando con la mía, mi cuerpo y mente no quiera nada más que llevármela de ese lugar y volver a ser una, volver a hacerla mía, volver a tatuarme en su piel y borrarle cualquier besos o carias de Alex... Rao es como si fuera que no paso el tiempo, como si fuera no hay otras personas de por medio, todavía no entiendo de donde saque la fuerza para separarme de ella, con que fuerzas deje a Lena en la cocina, con su rostro lleno de tristeza... me hace sentir la peor mierda del mundo, nuestra conexión sigue intacta, puedo sentir como el corazón de Lena se hace chiquito, como si se lo estuvieran estrujando, ¿y si vuelvo? ¿y si abrazarla y le digo <<Aquí estoy mi amor>>? miré a Alex y recordé nuevamente todo, Lena estaba con alguien más y yo... yo tengo que rehacer mi vida, sin ella, miro a mis hijos, tengo que tratar de recuperarlos, que grande y lindos están, al menos Lena les puso los nombre que elegimos juntas, no puedo evitar sonreír


– ¿Lindos? –dijo Sam

– Hermosos –la mire– mezcla perfecta entre Lena y yo –veo a Sam asentir

– Solo pueden crear cosas lindas –me dijo y me abrazo

– Me beso –le susurre, ella sonrió

– ¿Y? ¿Qué haces aquí? –me miro– ve por ella –mire la puerta de la cocina y vi a mi hija salir de ahí– ve –no lo dude y fui

– Te recomiendo que no entres –dijo Lori, le fruncí el ceño y miré– Sip, esta con ella –vi como Alex la abrazaba, vi como Lena envolvía sus brazos en su cintura, vi como Alex besaba su frente, lo único que me quedaba por hacer, era morder mis dientes

– ¿Ya ves amo? –siento que dice Alex– por esta razón es que no quiero que la veas –sentí el sollozo de Lena– recuerda lo egoísta que es –apreté mi puño y mi hija me tomo la mano y me negó– te dejo sola hace años atrás y ahora lo hace nuevamente... ella no vale ni una lagrima tuya

– Tienes razón –dijo Lena– no puedo seguir llorando por alguien que no le importe nunca


No quise escuchar más, realmente era suficiente, si ella pensaba que yo era una egoísta y la había abandonado, que asi sea, volví junto a Sam y le Conte, ella solo hizo una mueca y me abrazo, vi que mis hijos a lo lejos me miraban, como estudiándome y cuando los miraba fruncían el ceño y me quitaban la mirada, me resultaba divertido la pelea en su interior, sabía que era su madre, pero peleaban con algo que desconocía, pero lo averiguaría. Tome a Sam de la cintura y los chicos se acercaron a nosotras, estábamos conversando divertidos hasta que un carraspeo nos hizo mirar hacia atrás


– Con Lena no iremos –dijo Alex tomándola posesivamente de la cintura– no se siente bien –la mire y vi sus ojos rojos y con el semblante serio mirando mi brazo sobre la cintura de Sam

– Pero aún no hemos comido, ya está todo listo, estábamos esperándolas que salieran –dijo Sam

– Si cada vez que desaparecen lo hacen por ho... –no termino de decir Nia que Lena la miro frunciendo el ceño y luego me miro a mi– perdón

– Porque me pides perdón –le dije riendo– mi hermanita es toda una tigre –dije dándole un golpecito en el hombro queriendo que fuera más fuerte y que fuese a parar al espacio, ella sonrio con superioridad

Stop crying your heart outDonde viven las historias. Descúbrelo ahora