La noche del baile

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Bright era un muchacho adinerado y de familia real. Tenía una prima que bien podía pasar por su gemela. De niños les gustaba jugar a hacerse pasar uno por el otro sin que nadie de su familia se diera cuenta. A medida que crecieron lo único que cambió en ellos fue que cada uno desarrolló las características propias de su sexo.

Resulta que a su prima la querían emparejar sus padres con un joven de otra familia real, por lo que habían arreglado un encuentro con él en uno de los bailes que la familia organizaba año con año. Pero los hombres no eran del interés de la chica, por lo que no quería ser parte de nada de eso.

Le pidió a su buen primo que la ayudara en hacerse pasar por ella.

Bright – "¡Estás loca! Enfrenta la situación por ti misma."

Kary - "¡Por favor! Es solo que si tengo que pretender y pasar toda la noche con un chico de verdad moriré."

Bright - "¡¿Y yo por qué tengo que hacerlo?!"

Kary – "¡Porque en realidad tu no estarás atado a seguir hablando con él luego de esto! Por favor, solo será una noche, esa noche tengo una cita importante con Nely, ¡no la puedo posponer!"

Bright estaba haciendo una cara de enojo, definitivamente no accedería a la petición de su prima.

Kary – "Vamos, si lo haces te prometo que te ayudaré a que mis padres convenzan a tus padres a enviarte a esa escuela de intercambio que tanto quieres."

Si algo tenía que aceptar Bright era que su prima era muy buena para persuadir gente, sobre todo a sus padres. Lo que le decía era muy probable que lo cumpliera.

Bright  - "¡Esta bien! ¡Pero no tengo la menor idea de cómo pretendes que no se den cuenta cuando nuestros cuerpos han cambiado tanto!"

Kary – "Tranquilo taparemos esos músculos y espalda ancha con un buen chal, usaremos un vestido de cuello alto, y a esas manos tan varoniles que tienes le pondremos unos guantes. En cuanto al pecho no hay mucho que cambiar para mi desgracia, creo que tú tienes más atributos que yo en ese aspecto."

Bright - "¡Ya deja de bromear!"

Y así lo hicieron. Kary tenía a personas de confianza muy profesionales como maquillistas y estilistas. Cuando terminaron con Bright, parecía una concursante de miss universo. El maquillaje era abundante para que nadie se diera cuenta que era él pero aun así se veía elegante y con mucha clase, el vestido era largo y ajustado. Su espalda y brazos fueron cubiertos con un enorme chal que parecía hecho de plumas, la peluca de cabello largo enmarcaba muy bien su rostro, y unos guantes con pedrería le hacían lucir unas manos delicadas.

Bright – “Terminemos con esto” – Dijo frente al espejo momentos antes de salir al salón donde se estaba llevado a cabo el gran baile.

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Por otro lado estaba el joven Win, a quien sus padres habían decidido emparejar con Kary. Él estaba realmente molesto de tener que asistir a ese baile y tener que seguir con ese plan de sus padres.

Win - "¡Ni si quiera me gustan las chicas!" – Se quejó en voz alta mientras su asistente de confianza le ayudaba a acomodarse el saco del traje.

 - "Si no le gusta el plan de sus padres, le puedo recomendar portarse de manera indecorosa con esa señorita, sin perder la elegancia, solo asústela para que no le queden ganas de volver a verlo." – Le dijo su asistente.

No era mala idea lo que le aconsejaba. Pero aun así el portarse de ese modo y hacer sentir incómoda a otra persona no era una idea que le agradara. Pero no le quedaba otra opción a menos de que quisiera que el plan de sus padres tuviera éxito hasta el final.

CinderellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora