Bright se encontraba en su habitación. Estaba tumbado en la cama, mirando al techo, pensando en Win.
Aquella noche del baile debía espantarlo, sin embargo desde el primer instante en que lo vio quedó cautivado. No pudo evitar sentirse como muchacha de preparatoria enamorada estando en su compañía. Esa noche estaba deleitado con todo lo que Win le decía y por cómo se comportaba. Puesto que no podía hablar mucho solo sonreía y asentía la mayor parte del tiempo. Esas sonrisas le salían naturalmente por estar embelesado con él.
En cuanto a Win le había pasado igual. Su plan era asustar a Kari, pero luego de ver su comportamiento tan tranquilo y dulce quedó conmovido, además de que se había sentido muy atraído por ella, por Bright realmente.
Nuevamente unas lágrimas comenzaron a caer por los ojos de Bright, caían y mojaban su almohada mientras él permanecía acostado, inmóvil y perdido en sus pensamientos.
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Win estaba haciendo todo lo posible por "recuperar" los afectos de Kari, sin embargo era muy frustrante ya que cada uno de esos intentos eran inmediatamente descartados por ella y de la peor manera.
Se estaba aferrando a la imagen de la primer Kari que conoció, esta nueva Kari era completamente diferente en su forma de ser. También se aferraba a aquello que creía que ambos habían sentido aquella noche y no se resignaba a simplemente dejarlo ir así como así, sin embargo ella no cooperaba. Cada día los ánimos de seguir intentándolo iban bajando más y más. Le entristecía el irse dando cuenta de quizás todo había sido solo una ilusión de una noche.
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En algún momento Bright no pudo evitar darse cuenta de cómo su prima estaba tratando a Win, así que decidió ponerle un alto.
Fue a buscarla a su salón de clases. Mientras iba subiendo por las escaleras para llegar al salón, se percató de que cerca de la puerta estaba el asistente de Win. Se detuvo en seco al pensar que Win estaría ahí, así que de inmediato retrocedió, entonces topó con alguien que por reflejo lo agarró de la cintura para evitar que ambos cayeran al suelo al chocar.
Era Win con quien había chocado al intentar escapar de ahí de inmediato.
Win por reflejo lo había tomado de la cintura e inmediatamente sintió eso mismo que aquella vez en el baile cuando había tomado de la cintura por primera vez a quien pensaba que era Kari. Se desconcertó de inmediato pues a quien sostenía en esta ocasión era una persona completamente distinta, primero que nada era un chico. Y aunque le pareció muy lindo al verlo, no se detuvo a pensarlo mucho ya que era mayor la confusión del por qué había sentido eso que nunca había sentido con nadie más, una vez más pero ahora con alguien completamente diferente. Entonces lo reconoció: "Es el muchacho que estaba jugando el otro día en las canchas".
Bright se puso pálido temiendo ser descubierto, además era el hecho de ver a Win de nuevo luego de pensar tanto en él todos esos días después de la noche del baile.
Se disculpó apresuradamente y salió de ahí de inmediato.
Win solo se quedó ahí parado, desconcertado por lo que acababa de suceder mientras veía como se iba aquel chico.
Entonces su asistente lo llamó, la clase de la srita. Kari acababa de terminar, ya podía hablar con ella.
A Win se le había ocurrido un último intento para que las cosas funcionaran con ella. Quizás necesitaban otra "noche de baile". Por eso había ido a buscarla.
Le pidió que lo acompañara a uno de los antros más exclusivos de la cuidad.
Debido a la insistencia de Win y el hecho de que fue a pedírselo en persona, Kari sintió que no se podía negar, sin embargo esa noche nuevamente tenía un compromiso con su novia y tampoco quería dejarlo plantado a él pues aunque no lo trataba de la mejor manera tenía su corazoncito y sabía que eso ya sería pasarse de mala.

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Cinderell
RomanceBright es obligado a hacerse pasar por mujer la noche de un baile y engañar al joven Win sobre su identidad.