Los Haitani siguieron los pasos de Haru para encontrarlo y pedirle perdón por su comportamiento.
Los hermanos sintieron las feromonas de Haru cerca.Llegaron a un callejón, y Haru se encontraba hay, haciéndose bolita en el suelo. Se acercaron un poco y empezaron a hablar con voz suave.
- Haru, perdonanos. No quisimos gritarte y hacerte sentir mal, porfavor perdonanos- Dijo Ran acercándose a Haru-
Haru al sentir la presencia de los Haitani, subió la mirada. Sus ojos estaban llenos de lágrimas y de su boca salían auditivos sollozos.
Rindou se acercó a Haru y lo abrazo dejando salir sus feromonas para calmarlo, su cuerpo estaba temblando y también estaba frío. De un momento a otro, Haru paro de llorar y se aferró al cuerpo de Rindou, sintiéndose más calmado.
Derrepente, algo cayó del cielo, era una gota de agua, eso significaba que hiba a llover, tenían que irse del lugar.
Ayudaron a Haru a levantarse para luego salir corriendo del callejón.
Pero aún así, la lluvia les ganó a los tres, dejándolos empapados.
- Nuestra casa esta cerca de aquí, vallamos- Dijo Ran todo mojado-
[...]
Los tres ya estaban en la entrada de la propiedad Haitani. Entraron a la mansión y fueron al cuarto de los hermanos. La habitación era muy grande y acogedora.
Ran se quitó la camisa, dejando ver su delgado cuerpo tatuado.
Rindou hiso lo mismo, dejando ver su trabajado cuerpo con la mitad del tatuaje de su hermano.
Haru solo miraba a los hermanos, mientras que sus mejillas se ponían rosadas por la escena.
Los Haitani se dieron cuenta de eso, y no pudieron evitar sonreír por la cara de Haru.
Haru se volteo apenado y se quito su camiseta holgada, dejando a la vista la parte superior de su cuerpo. Un delgado y sensible cuerpo.
Los hermanos lo miraron fijamente, sonrojados y con una sonrisa maliciosa en el rostro, viendo cada parte del cuerpo de Haru.
Derrepente, los hermanos empezaron a sentirse calientes, sus ojos se ponían amarillos y unos colmillos brotaron de sus bocas. Habían entrado en celo, y al tener a un Omega en una habitacion, les prendía.
Pero aún así, los Haitani trataron de mantener la cordura, tenían que controlarse, no querían lastimar a Haru, pero que más podían hacer si estaban a solas con un Omega.
Haru obviamente lo noto, las feromonas de los hermanos estaban por todas partes, inundando el ambiente de feromonas en celo.
Corrió hacia una habitación, y se encerró hay. Tenía miedo de que se descontrolaran y lo empezaran a lastimar.
- H-Haru.. Q-Quédate hay y n-no salgas para nada- Dijo Rindo entrecortado-
Pasaron minutos, y Haru seguia en la habitacion, mientras escuchaba los jadeos y maldiciones de los hermanos. Estaban masturbándose para calmar su celo, para los Alfas no es era suficiente, querían saciar su celo con el Omega. Era una tortura total para ellos tener que aliviar su celo por ellos mismos. Ya no lo soportaban. Se dirigieron a la puerta de la habitación donde se encontraba Haru y empezaron a llamarlo.
- Haru~, cariño, no seas cruel con nosotros.. Vamos sal~ - Dijo Ran, apoyándose a la puerta-
~°Haruchiyo Akashi°~
A quien quería engañar, era obvio que quería salir, pero sería mi primera vez, y quería que tuviera su tiempo. Me quedé sentado en el suelo esperando a que al menos se les pasará para salir del lugar. Mi teléfono estaba apagado, no podía llamar a Takeomi para que venga por mi, era mi fin.
- Haru por favor sal~ t-te nesesitamos~ - Dijo Rindou masturbandose-
No respondi y me quedé inmóvil, no serían capaces de romper la puerta solo para sacarme.
No es así?...Derrepente sentí que estaban pateando la puerta con fuerza, la puerta empezaba a romperse, hasta que la puerta fue abierta por completo. Ran habia
abierto la puerta a patadas y Rindou fue el que me saco de la habitación a jalones.- Ohh cariño~ si hubieras salido por tu cuenta, no hubiéramos tenido que llegar a este punto, pero no nos diste opción~ - Dijo Rindou tirandome con fuerza a la cama, esto me hiba a doler-
___________________________________________________Gracias por leer ^°^