El Día Después De Mi Muerte

Capítulo 1

7:45 am

-Vaya, todo se ve diferente, se ve limpio, se ve claro.
¿Donde estoy?
Espera es mi cuarto, puedo verme hay tirada en mi cama, bañada en sangre!!
Ese es mi hijo,dándome besos para que me despierte y le haga su desayuno especial- pienso con un nudo en la garganta.

Me acerco y le susurro en el oido: -ve a buscar a tu abuela-.
Mi niño, mi precioso hijo se queda mirándome sin verme. Como si supiera que estoy hay, pero que no puede verme.
Veo como sale corriendo y escucho sus pasitos subir las escaleras en busca de mi mamá, mientras yo me quedo mirando mi cuerpo inerte y mis ojos abiertos con manchas de lagrimas en las mejillas.
Esta vez, si lo lograste Lucia, al fin lo lograste- me digo a mi misma mientras cierro mis ojos suavemente.

Escucho bajar a mi mamá rezongando y diciendo: -mira la hora que es y esa vaga no se ha despertado, ni la basura saco- veo como se asoma en la puerta, su cara pálida y escucho un grito estridente salir de su garganta, esta llamando a mi cuñado.
-Jose!!! Jose!!!- la veo gritar desesperada mientras entra corriendo y pasa a mi lado y  abraza  mi cuerpo.
-Abre los ojos Lucia, abrelos aún no te puedes ir, no puedes dejar a tu hijo solo- escucho sus palabras ahogadas por un llanto incesante.

Llega a toda velocidad mi cuñado y entra a zancadas al cuarto y mira la escena.
-Si lo logró-escucho que murmura con los ojos rojos aguantando las lágrimas.

Me sorprende un poco verlo en ese estado, teniendo en cuenta de que no nos llevábamos muy bien. Veo como aparta a mi madre que ya está cubierta de mi sangre, y toma mi pulso en el cuello.
Nada,no siente nada, mi cuerpo yace frío y sin vida en la cama donde dormí tantos años, a mi lado... El cuchillo que usé, lleno de sangre y un poco de mi piel. 

8:45am

La calle está llena de gente, policias, médicos y vecinos curiosos que salen de sus casa a ver que ocurre.

Sale por la puerta del frente los médicos con una camilla tapada con una sabana blanca, seguidamente sale mi madre, mi hermana menor y mi cuñado a toda velocidad.
Mi hijo se ha quedado con mi hermana.
-Conseguiste lo que querías, te has quedado con mi hijo, espero que tu si puedas criarlo bien- pienso mientras miro la escena desde un lado de la ambulancia.
Escucho que mi madre grita de dolor mientras llora sostenida por mi hermana y mi cuñado.
-Ella no está muerta!!! Ella no está muerta!!- repite mi madre llorando a mares.
Bien actuado mamá, mereces un oscar por esa actuación, pienso con amargura mientras la veo montarse en la ambulancia, que sale con la sirena y luces prendidas a toda velocidad.
Luego los alcanzo, quiero caminar un poco.
Entro en la tienda de mi hermana y veo como esta sentada en la mesa redonda, donde siempre se sienta a cenar o a desayunar, está con mi hijo y tiene los ojos rojos de llorar.
-Tu mamá está enferma, la van a llevar al hospital y tu te quedas aquí con tía valentina a jugar y ver caricaturas- veo como le habla con calma a mi niño mientras el la mira con su carita inocente y sin entender mucho de lo que esta pasando.
-Puedo ver la pantera rosa? Mientras espero a mami?- escucho su dulce voz y se me rompe el corazón.

¿Acaso tome la decisión correcta? Pienso mientras veo a mi hermana abrazar al bebe y decirle: claro que si mi rey.

-Es algo tarde para pensar en eso, no crees tu?- escucho una voz ronca detrás de mi.

-¿Quien eres?- pregunto asustada. -No tengas miedo, soy inofensivo, vengo a llevarte- me dice el extraño con voz calmada.
-Puedo quedarme un poco más? Quiero visitar a algunas personas- digo con la voz entrecortada. -Claro que si, pero debes hacerlo rápido, nos están esperando- dice con un tono de advertencia. -Tienes hasta la media noche de hoy- dice finalmente y se va caminando.
 

A quien debo visitar  primero, a mis amigas? A mi ex pareja?...
Me siento en la acera y miro la gente que comienza a caminar en distintas direcciones murmurando sobre lo que acaban de ver.
-Parece que se suicidó-escucho que dicen los vecinos de al lado. -Ya lo había intentado antes cierto?- pregunta mi vecino y a quien considere mi mejor amigo por muchos años. Veo su mirada triste y melancólica y siento una punzada de culpa.

Iré a visitar a mi comadre y única amiga.