𝐒𝐓𝐀𝐘 | 𝐏𝐀𝐑𝐓𝐄 𝐔𝐍𝐈𝐂𝐀

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A Scorpius le comía los nervios y la tristeza, la pelea que había tenido la noche pasada con su mejor amigo, Albus Potter, ¿Fue una pelea con sentido? no, no realmente, pero es que Scorpius ya estaba cansado de verlo al rededor de esas chicas que le coqueteaban, insinuaban, o cualquier otra cosa que pareciera otra a los ojos del rubio, no es que estuviera celoso de su amigo, si no todo lo contrario, estaba celoso de esas chicas ¿cómo se atrevían a acercarse tan descaradamente a su amigo? en realidad lo tenía muy claro, Albus era muy atractivo, en especial para el, sin embargo, la noche pasada algo había cambiado, usualmente el rubio solía soportar estás acciones, mirando desde lejos o simplemente ignorandolas.

Llegaba a los patios de escuela buscando a su amigo, y realmente no tardo en posar su vista sobre Albus, pero no estaba solo, por supuesto que no, había una chica de Gryffindor que Merlín-sabe-quien sea se estaba despidiendo de un beso sobre la mejilla de Albus, al momento que el rubio se percató que su amigo se acercaba a él le pareció bastante complicado ocultar su molestia, Scorpius escuchaba todo lo que el contrario tenía que decir, su día, las clases, entre otras pequeñas cosas que la mayoría del tiempo -por no decir siempre.- escucharía atenta y felizmente, pero ese día no era el caso.

Del patio hasta los dormitorios de Slytherin, el rubio iba con su seño levemente fruncido, sus labios apretados y la vista hacia el lado contrario, algo que albus captó rápidamente, al entrar al dormitorio Albus se paró frente al rubio para por fin cuestionarlo.

- ¿ahora me vas a decir que tienes? no creas que no me di cuenta de como me ignoraste olímpicamente solo por venir molesto -preguntó Albus, tomando por sorpresa a Scorpius.-

- bueno, que te importa -soltó a la defensiva, esto no era muy representativo de el, solía ser bastante calmado, pero en ese momento los celos, la molestia y el reprimir tanto tiempo sus sentimientos le estaban jugando una mala pasada.- ¿Por qué no vas y le preguntas a esa Gryffindor?

- oh, así que es eso entonces, ¿realmente te molesto eso? ¿es enserio Malfoy?

- claro, tantas chicas y chicos, señor perfecto, anda, ¿por qué no pasas el día y todos tus días con ellos? - sentía su pecho presionarse, relamente la escena de la tarde fue la gota que derramó el vaso.-

Albus solo mostró una sonrisa, se metió en su cama y murmuró un claro "vale", así termino aquella noche de los dos muchachos, un Albus indiferente y un Scorpius atacado y molesto por la discusión, sin embargo en la mañana no se resolvió por "arte de magia" en las clases, Albus había ignorado a Scorpius y Scorpius se negaba a disculparse con Albus, el orgullo de ambos era alto, pociones entre algunas otras clases pasaron y ninguno de los dos se atrevía a dirigirse la palabra, y ahí es donde llegamos a dónde comenzamos, un Scorpius solo, molesto y triste a la vez, ¿estaba bien todo esto? por qué definitivamente no se sentía bien.

Terminaba su entrenamiento de quidditch, se dirigía a la biblioteca, vacía por la hora que era, lo sabía perfectamente, pero lo que no sabía es que su chico favorito estaría en una mesa leyendo algunos libros, se congela un momento, tenía la opción de dar la vuelta para marcharse y que las cosas siguieran igual, pero esa opción no se escuchaba como la mejor, Scorpius alguna vez leyó sobre cómo nunca debes dejar una pelea sin resolver, en especial si es una persona cercana, y albus más que ser cercano era especial, una pieza clave en su vida, se armó de valor dirigiéndose a la mesa sonde se encontraba el chico, se sentó al lado de el en silencio, no hubo saludos, no hubo miradas, solo silencio, hasta que fue interrumpido por la suave voz del rubio.

- deberíamos hablar sobre eso. - dijo tranquilamente, o eso quería pensar al esconder sus nervios con un jugueteo en sus manos.-

- está bien, hablemos. - cerró el libro, colocando toda su atención sobre el rubio, cómo solía hacerlo hace unos días.-

- estuvo mal lo que dije ayer. - mencionó sin despegar su mirada de sus manos.- pero no me arrepiento.

- ¿es enserio? - Albus estaba bastante dispuesto a levantarse de esa mesa y retirarse, pero la mano del rubio fue más rápida, sujetandolo, mirando con esos ojos profundos.-

- quédate. -fue lo único que se le vino a la mente.- tu piensas que es divertido verme molesto, y te lo tomas muy enserio, pero ambos...es lo mejor si ambos nos quedamos.

- ¿entonces puedes explicar que fue lo de ayer?

Scorpius definitivamente no quería explicar que había sido lo de ayer, por qué ni el mismo sabía de dónde nació el impulso, dedujo que su desesperación y celos fueron la pésima mezcla que hizo que los llevará a esta situación, pero el ya están cansado, llevaba pensado eso desde hace buen tiempo, y si no estaba en sus cinco sentidos en esa discusión en este momento mucho menos lo estaba, buscando una explicación que le dejara claro a ambos cuál había sido el motivo.

- te he amado desde hace un tiempo.

silencio.

- simplemente me gusta salir contigo...todo el tiempo.

aún más silencio.

- Albus yo..-sus palabras fueron interrumpidas por un beso fugaz por parte de su amigo.-

- esperaba un giro más dramático. -p una risa se escapó de sus labios, su mejillas levementes sonrojadas, una imagen perfecta para Scorpius.- solo me has dado razones para quedarme Scorpius, creo que por eso te amo también.

Le tomo unos segundos para salir del shock, intentando procesar el momento siendo sutilmente rodeado por los brazos de Albus.

- ¿no pudiste decirlo antes? nos hubiéramos evitado todo esto. - intentó fingir molestia, lo cual le resultó imposible.-

- es divertido verte molesto.

En ese momento momento ambos tomaron la mejor decisión de quedarse juntos.

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