Simbiosis

Capitulo 7: Bienvenido

Chapter 7: Welcome

Se acercaron al pueblo por la tarde, cuando empezaba a refrescar, por lo que no resultó sospechoso que llevaran las chaquetas abotonadas para ocultar las manchas de sangre en sus camisas. Era un pueblo pintoresco de casas de madera con techos de paja, caminos sin pavimentar de tierra apisonada, los cacareos y rebuznos de los animales de granja se escuchaban incluso en el centro del pueblo, donde los aldeanos se reunían en una pequeña plaza de adoquines y sacaban agua de un pozo de agua colectivo.

Nadie cuestionó a los visitantes. De hecho, en su mayoría fueron recibidos con sonrisas de bienvenida, y cuando preguntaron por direcciones, los aldeanos respondieron rápidamente. De vez en cuando, George pillaba a alguien mirando con curiosidad la máscara de Dream, pero solo curioso, no preocupado.

Resultó que no había una casa de empeño para vender las joyas porque no había moneda en esta región. Aparentemente, los pueblos al norte de las montañas tenían una economía comercial simple, pero valoraban el oro y las gemas que contenían sus joyas, por lo que las piezas en sí seguían siendo valiosos.

Dream tenía todo tipo de planes sobre lo que deberían comprar, ropa, armaduras, armas, alimentos, suministros, incluso caballos, si pudieran permitírselo. George lo detuvo con una mano en su hombro y señaló la posada y taberna local.

"Ya es tarde, creo que deberíamos dormir, primero", dijo. "Obtener una buena comida, también".

"¿Qué? Pero podemos dormir en el bosque. Y nos traeré la cena, no necesitamos gastar dinero en eso".

"Dream, por favor", suspiró George. "Estoy realmente cansado."

"¿Qué? Oh lo siento, seremos rápidos..."

"No, Dream..." George negó con la cabeza. Dream tarareó con curiosidad, todavía sin entender.

"Estoy cansado de dormir en el suelo, solo quiero... solo una noche en una cama de verdad", dijo.

Dream se rio.

"Principito mimado", bromeó, golpeándolo suavemente en el pecho. George frunció el ceño.

"Sí, sí, estoy tan mimado" Rodó los ojos "¿Y sabes qué más? Esas son mis joyas, así que, francamente, debería ser yo quien decida cómo se usan".

"Bien, bien." Dream levantó las manos "Una noche en la posada y una comida de la taberna"

"Dos, quiero un desayuno caliente" George se cruzó de brazos, mirando a Dream para asegurarse de que cooperara. Jadeó, aparentemente increíblemente divertido por las necesidades básicas de George, pero asintió.

"Dos comidas", cedió. "¡Pero entonces eso es todo! Tenemos que gastar el resto en suministros" 

"De acuerdo" George asintió y se dirigió directamente a la posada.

El interior era cálido y acogedor, la chimenea crepitaba, las mesas estaban llenas de rostros amistosos que conversaban. George se acercó a la mujer que estaba detrás del mostrador, una figura robusta con una mirada dulce y maternal, y preguntó por una habitación.

Al final resultó que, su argumento era parcialmente innecesario porque las comidas eran gratis para cualquiera que se quedara en la posada. George entregó un fino collar de oro con un único amuleto de zafiro que le gustaba a la mujer, y la habitación fue suya por la noche, junto con la cena y el desayuno.

"Me encanta este lugar", dijo George, sentándose frente a Dream, con un abundante plato de pollo, papas y salsa frente a cada uno de ellos.

"Mmm" Dream se cruzó de brazos y no hizo ningún movimiento para comer. George se rio entre dientes y sacudió la cabeza, pensando que solo estaba haciendo un puchero porque la idea de George resultó ser excelente, luego se dio cuenta de que probablemente no se sentía cómodo levantándose la máscara para comer frente a todos estos extraños.