Hijo de la Luna - Dos Mundos ~Kookmin~

Capítulo 2

La Isla perdida

Pov's Jungkook

Me duele la cabeza una fatalidad, mis pulmones arden por el agua salada que trague, mis labios y piel reseca me dicen que he estado un buen tiempo inconsiente en la arena con el ardiente sol dando directamente a mi inmóvil cuerpo.

Mis recuerdos de la noche anterior son borrosos casi nulos, parece que el suceso de casi ahogarme me dejó traumas, ya que no recuerdo cómo es que llegue aquí, no sé cómo es que estoy vivo...

Solo veo imágenes borrosas que mi mente por alguna razón guardan, el como ví el cuerpo de mi mejor amigo que estaba inconsciente en lo más alto del barco, el cómo caí al mar siendo arrastrado por las inmensas olas.

El como me estaba debilitando y ahogando, dándome por vencido dejándome hundir por la corriente marina, cuando de pronto una cabellera roja apareció frente de mi, fui lo último que ví antes de caer inconsciente.

Lo demás, no sé si fue una alucinación, pero lo más seguro es que así fue realmente...

El que mi mente fabricará un momento con una persona con cola de sirena, la más bella que allá visto en las ilustraciones de los libros mitológicos, un chico el cuál era magnífico, era hermoso y perfecto, no podría ser real por más que quisiera, pero igual disfrute de esa pequeña alucinación. Quiero guardar cada recuerdo como si fuera real, quiero recordar la textura de esos hermosos y regordetes labios rosas, su inocente y atractiva mirada, el como me inoptizaba con sus peculiares ojos verdes esmeraldas.

Como desearía que el fuera real...

Me levanto de la cálida arena suavemente ya que mi cuerpo duele, que me allá chocado inmensas olas y golpeado mi cuerpo con agresividad, el que mi cuerpo estuviera a casi desvanecer no me debería sorprender.

Miro todo a mi alrededor y solo veo inmensos árboles que rodean toda esta Isla peculiar, en ningun mapa del Reino de los mares úbican una Isla en el oeste lejano, son aguas que nunca antes mis antepasados han recorrido. Es un gran descubrimiento, una Isla perdida sería mi cierre de broche de oro al regresar al Reino, claro si es que logro regresar.

Después de pensarlo un poco decido entrar al inmenso bosque, el cual está en completo silencio, hermosos árboles me rodean, nunca he tenido el privilegio de ver de estos tipos, es como si los rodeara algún tipo de magia. Pero claro que solo fue un pensamiento absurdo.

Estaba tan metido observando todo a mi alrededor que no me fijé que me han estado siguiendo desde que entre al bosque.

Actúe como si no me hubiera dado cuenta y seguí caminando, mirando de reojo hacia atrás, camine aún más rápido perdiendo me entre los árboles para poder despistar a quien me este siguiendo.

Veo que la persona que me seguía se apresura aún más buscándome con la mirada, auque solo alcanzó ver su perfil del rostro, puedo ver qué es una persona muy bella, aunque su vestuario sea extraño no se le mira mal.

Me voy por detrás para poder sorprenderlo, me acerco aún más rápido para después apresarlo con mis brazos. El se asusta y suelta un grito, se remueve inquitamente intentado soltarse de mi agarre pero no lo permito.

- ¿Por qué me sigues? ¿Alguien te mando a seguirme?

Se quedo quieto cuando mis palabras golpearon con suavidad en su oído. Respirando con dificultad y levemente temblando se intenta girar para verme a la cara, cosa que permito ya que también tengo curiosidad.