ʟᴀ ᴘᴀʀᴇᴊᴀ ᴍᴀs ᴅɪsᴘᴀʀᴇᴊᴀ//𝗸𝗶𝘀𝗮𝗺𝗲 𝘅 𝗸𝗮𝗸𝘂𝘇𝘂

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𖦹𖦹𖦹𖦹𖦹𖦹𖦹𖦹𖦹𖦹𖦹𖦹𖦹 (continuación del anterior capitulo)

Un día después de que la mayoría de los akatsukis se fueran de la cueva, kisame y kakuzu seguían en su cuarto, dándose cariño.

Eran las 9:30 a.m., hace poco Kisame y Kakuzu se habían despertado, estaban abrazados en la cama, dándose besos, y acariciándose.

-Eres la cosita mas hermosa del mundo- Dijo kisame con voz tierna, acariciándole el pelo y abrazándolo mas fuerte, pero con cuidado de no lastimarlo.

-Mmmm... Kisameee, ¿desde cuándo estas tan meloso eh?- Preguntó kakuzu -No lo sé, pero con tal de que te dejes mimar todo perfecto- dijo kisame con voz lenta, ya que aún tenía un poco de sueño, kakuzu abrazó a kisame.

-Te amo, Kisa, y neh, no me molesta que me mimes, me gusta, así que sigue- dijo con voz despreocupada, acostándose de nuevo en el pecho de su "tiburoncin".

Varios minutos después se levantaron a desayunar, y Zetsu como siempre se entrometió.

-Con que por fin se dignan de levantarse estos dos tortolitos- Dijo Kuro o "Zetsu Negro" molesto, y con un toque de burla en su voz

-Cállate maldito aloe vera parlante- dijo molesto y con su típica voz gruesa con la que le habla a todos, menos a Kisame.

-Ya cálmate kaku- dijo kisame acercando a Kakuzu a su cuerpo, agarrándolo de la espalda.

-¿Viste? te lo dije, Shiro, esos dos estaban saliendo- dijo kuro a Shiro o "Zetsu blanco".
-Maldita sea- Se quejó Shiro, y después saco 200¥ yenes y se lo entregó a Kuro
-Ya, ¿satisfecho?- dijo shiro
-Seh- respondió Kuro

La pareja miraba de forma extraña a esos dos, pero no les importó mucho, kakuzu hizo el desayuno para Kisame y para él, comieron juntos, luego volvieron al cuarto de kisame, hablaron un poco y luego los dos se metieron a bañar, pero en diferente bañera, no se sentían listos para bañarse juntos o hacer otras "cosas", después se juntaron de nuevo, Kakuzu contó un dinero que tenía pendiente, pero no lo contó en cualquier parte, lo contó sentado en el regazo de kisame, el cual estaba en un sillón, estuvieron así una hora, kakuzu terminó de contar el dinero, lo guardo y luego miro a kisame, que estaba medio dormido, con una mano en la cintura del monero y otra apoyando su cabeza, la cual estaba casi para atrás, con los ojos cerrados.

-Kisa, amor, ¿estas dormido?- pregunto Kakuzu
-Mmmm, más o menos, tengo sueño, pero lo que si tengo es un calambre en la pierna- lloriqueo kisame, haciendo reír un poco a kakuzu, cosa que hizo sorprender a Kisame, la risa de kakuzu era simplemente hermosa. Kakuzu se movió del regazo de kisame, y mejor se sentó a su lado y puso su cabeza apoyándola en el cuello del más alto, enrollaron sus dedos, y kisame como podía, acariciaba los dedos del contrario, sin soltar sus manos, se miraban como si su vida dependiera de ello, hasta que kisame se durmió, lentamente kakuzu se separó de kisame, fué a servirse un té de manzanilla, luego volvió donde kisame, lo miró, y sonrió debajo de su máscara, le dio un tierno beso, y se quedo a su lado, mirándolo fijamente, mientras sonreía, de repente kisame perdió el equilibrio y se cayó donde estaba kakuzu, quedando su cabeza apoyada en uno de sus muslos, kakuzu se sorprendió por tan repentino acto, pero luego rió y le empezó a acariciar el cabello, resulta que era muy suave, y brillante, después le acarició una de sus mejillas, y descubrió, que como un pez, tenía pequeñas escamas en su piel, esto a Kakuzu le dió gracia, y también le empezó a acariciar, también ha descubierto que si acaricia la piel de Kisame hacia arriba es áspera, y dura, un poco seca, pero si la acaricia hacía abajo, es suave, y pulida, esto pasa por las escamas que tiene, kakuzu se quedó tanto tiempo admirando las bellezas de su lindo novio que perdió la noción del tiempo, y de repente ya eran las 2:10 p.m., después kakuzu despertó a kisame, ya que tenía ganas de salir a alguna parte, no quería estar todo el día en una guarida fría de roca húmeda y obscura, un tanto tenebrosa, esa guarida es más vieja que el papá de kakuzu, eso fue lo que pasó por la mente del moreno.

-Kisa, quiero salir, no me quiero quedar todo el día aquí- le dijo el moreno a su novio

-Bueno, pero no nos podemos demorar tanto, aparte que hay muy pocas aldeas y pueblos cerca de aquí- Dijo kisame, que todavía estaba un poco adormecido. Kakuzu se levantó, se fue a la habitación de kisame mientras el mencionado lo seguía, allí kakuzu se quitó su capa, quedando en una camiseta negra con mangas largas, y un pantalón típico vino tinto, mientras que kisame, hizo lo mismo pero el quedo con una camiseta negra sin mangas y un pantalón típico azúl marino oscuro, combinando con su cabello, se quitaron sus bandas y kisame por si algo llevó su espada, Samehada, salieron agarrados de la mano rumbo hacía la aldea o pueblo más próximo, encontraron un lindo pueblo, era simple, pero acogedor, pararon en un restaurante, comieron un poco, se dieron uno que otro beso y cuando ya eran las 6:00 p.m. acordaron regresar a la cueva, empezaron a caminar mientras kakuzu estaba agarrado del brazo bien trabajado de kisame, y una de las cosas que más admira Kakuzu de kisame es que es muy musculoso, tiene un buen pecho; Pectorales grandes y fuertes, y también tiene buenos abdominales, y también tiene músculos en sus brazos, por lo que hace ver a Kisame una persona fuerte y para colmo, es alto, las características perfectas para un hombre que toda persona quisiera tener, eso imaginaba kakuzu, mientras kisame le decía lo lindo que era y que lo amaba, lo amaba mucho, y que daría hasta la vida por él, mientras kakuzu iba distraído, de un momento a otro kisame le quitó la máscara a kakuzu y le dio un beso fugaz, y en medio del beso, habían risas, y algunas palabras.

-Mmmm~.... Te amo- dijo Kakuzu con dificultad en medio del beso

-eres la cosita mas tierna del mundo, aunque eres un poco enojón- dijo kisame después del beso, soltando una risa, kakuzu lo miro con mala cara, después llegaron a la cueva, volvieron al cuarto de Kisame, se quitaron la camisa, zapatos y calcetines y se propusieron a dormir, en forma de cuchara (Básicamente consiste en que en que ambos duermen uno detrás del otro, acurrucados y en posición fetal, de manera que casi o todo el cuerpo está en contacto), con la sabana en la mitad del cuerpo.

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épico, dos capítulos por día, es que yo soy yo. Espero les guste, porque me demore como 2 horas, no tengo imaginación
😭🔫 bueno bay