05; donde ella pertenecía

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ChaeYoung rió risueña al contacto de la nariz que olisqueaba su cuello con verdadera curiosidad, poniendo una mano en el rostro de la alfa peligris para alejarla, riéndose otro poco cuando comenzó a olfatear sus rechonchos dedos.

— ¡Ya! ¿Qué se supone que haces, Yeonnie?

— Es que hueles demasiado a MiNa unnie, ¿te hizo algo?

La omega negó sonriente, acomodándose sobre el césped del jardín de la institución para colocar su mochila sobre sus piernas, así sacando después su almuerzo y prepararse para comer. Junto a JeonYyeon se encontraban en unas horas libres comiendo algo, donde la alfa no pudo contenerse más y decidió preguntar lo que llevaba queriendo cuestionar desde que vio a la omega entrar en su primera clase del día. Aunque ciertamente ya tenía una razón en mente, quería escucharlo directo de los carnosos labios de su mejor amiga.

— Pasamos su celo juntas, normal que huela a ella — había dicho con total normalidad, sonriendo como una niña inocente antes de darle una mordida a uno de sus rollitos de kimbap.

— Dime que se cuidaron...

— Uhm... nos cuidamos tanto como pudimos en los asientos traseros de su auto frente a mi casa — rió ante la mueca asqueada de JeongYeon, agregando: —. Pasar el celo con tu pareja es completamente normal, tú harás lo mismo con JiHyo unnie en algún momento.

JeongYeon, quien había estado bebiendo de su botella de refresco, comenzó a toser por el repentino comentario de la omega, quien sólo soltó fuertes carcajadas al verla empaparse la camiseta por el brusco movimiento de la tos, golpeando su pecho con palma abierta para intentar controlarse un poco. Todo mientras su supuesta mejor amiga se dedicaba a revolcarse por el césped riendo a carcajada suelta, risas que verdaderamente podrían sonar malvadas.

— Eres una... una degenerada — murmuró con un tono receloso tomando agua de la botella de la omega, quien incluso se había acostado en el césped, acomodando su cabeza en las piernas de la peliazul con su sonrisa de villana dibujada en el rostro.

— Ni siquiera eres virgen, no entiendo por qué exageras.

La alfa bufó, acariciando distraído los cabellos lilas de su amigo. — Porque en serio quiero a unnie, no lo sé... ella no nos toma ni a Nay ni a mí en serio, así que sólo puedo pensar en cortejarla como se debe. No sexo, sonrisas sí... quizás besitos si me deja...

ChaeYoung hizo una mueca, pues ella conocía bien los sentimientos que tenía su mejor amiga hacia su hermana mayor; ella misma estuvo ahí la primera vez que se le confesó. Fue hace meses cuando repentinamente había estado un poco celosa de la manera en que la omega mayor pasaba tiempo con aquella alfa de grados menores, quien parecía realmente feliz a su lado. Ambas sabían quién era, puesto que compartía el club de fotografía donde JeongYeon también asistía, por lo que era algo así como una conocida cercana que no pasaba a ser amiga, bien siendo alguien con quien ambas entablaban conversaciones de en vez en cuando. Pero no por eso fue menos desconcertante verlo al lado de JiHyo hablando como si se conocieran de toda la vida, siendo que en realidad conoce a JiHyo desde que era una mocosa de trece años.

¿Qué resultó de esa confesión? JiHyo sólo pudo reírse cuando NaYeon también tomó la decisión de admitir sus sentimientos, y decir con una sonrisa divertida: ''ambas son adorables... ¿quieren ir por un helado?'' teniendo después a ambas alfas detrás de ella como un par de fieles cachorritas. Y así continuó meses después de ello, JiHyo sólo las dejaba acompañarle y cumplía algunos de sus pequeños caprichos como era el llevarle la mochila o permitir que se encargaran de comprar el almuerzo. No porque estuviese aprovechándose de ellas, en realidad era porque JiHyo no podía evitar sentirse enternecida por la manera tan linda de mirarle con esos ojos brillantes de ilusión.

𝑪𝒂𝒑𝒑𝒖𝒄𝒄𝒊𝒏𝒐 𝑪𝒂𝒏𝒅𝒚 (𝟑𝑴𝒊𝒙 𝑻𝒘𝒊𝒄𝒆)✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora