El Pequeño Demonio Zorro de Dos Colas y su Sacerdote Taoísta Gong

Capítulo 11

El cuerpo del pequeño demonio zorro probablemente era demasiado sensible. Solo unas pocas caricias y comenzó a hacer un dulce gemido desde su garganta. Un aura seductora también apareció en sus ojos de fénix, ese era el instinto natural de los demonios zorros.

Aunque el pequeño demonio zorro acababa de convertirse en adulto y no tenía muchos años de cultivo, la seducción de un demonio zorro era innata.

Ese tipo de seducción natural, por lo general, no sería suficiente para dominar al sacerdote taoísta, pero le gustaba la inocencia del pequeño zorro, por lo que este tipo de energía sexual natural era como un afrodisíaco y lo excitaba insoportablemente.

El sacerdote taoísta estiró un dedo y lo insertó en el pequeño agujero trasero del pequeño zorro demonio. No se podía negar que el demonio zorro tenía un talento natural en ese sentido. El pequeño demonio zorro no sintió que el dedo del sacerdote taoísta fuera incómodo de ninguna manera, solo se sintió un poco lleno. Movió la cintura, dejando que el dedo se asentara más cómodamente y luego retomó su postura obediente en los brazos del sacerdote taoísta. El dedo entró extremadamente de manera suave. Si no fuera por el hecho de que el sacerdote taoísta acababa de ver al pequeño demonio zorro luciendo muy confundido ante la escena erótica y claramente no tenía idea de cómo actuar con el hombre en la cama, entonces probablemente habría pensado que el pequeño demonio zorro ya había untado lubricante en su pequeño agujero.

La elasticidad del pequeño agujero era muy buena y no tardó en aceptar tres dedos. El sacerdote taoísta se había abstenido durante muchos años.

Ahora que había
conocido a ese hermoso y obediente demonio zorro, su deseo explotó como un volcán. Inmediatamente se empujó agresivamente. "¡Ya——!"