Capítulo 28

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El sacerdote taoísta reservó una habitación en la posada. El pequeño demonio zorro finalmente cambió de nuevo a su forma humana, agarrando sus grandes colas.

"A-Yuan..." El pequeño demonio zorro sostuvo el cuello del sacerdote taoísta. Sus ojos de fénix estaban un poco rojos.

"No me regalarías a nadie más, ¿verdad?" El sacerdote taoísta pensó un momento.

"Xiao MianHua, ¿por qué no firmamos el contrato para convertirnos en compañeros Dao?" El pequeño demonio zorro lo miró atónito.

"¿Qué es eso?"

"Oh, si firmas el contrato, estarás ligado a mí. No podrás huir".

El sacerdote taoísta tocó la punta de su uña y dijo con amor: "Incluso si te pierdes, puedo usar el vínculo contractual para encontrarte de nuevo".

El pequeño zorro se hizo un pequeño corte y firmó el contrato. Era el contrato Dao de más alto nivel del mundo de la cultivación, un contrato de vida o muerte. El sacerdote taoísta jaló alegremente al pequeño zorro hacia él, se quitó toda la ropa y sostuvo al pequeño zorro demonio desnudo.

"¿Sabes lo que significa ser compañeros Dao?" El sacerdote taoísta palmeó el trasero del pequeño demonio zorro. Tan suave y levantado. El pequeño demonio zorro inclinó la cabeza.

"Esposo... ¿fóllame?"

El sacerdote taoísta: "..."

"Je je, se llama cultivo dual".

No había ningún problema en el mundo del cultivo que una ronda de cultivo dual no pudiera resolver. Y si lo hubiera, entonces solo serían necesarias dos rondas. El pequeño demonio zorro se arrastró felizmente al abrazo del sacerdote taoísta, abrió las piernas y frotó su trasero contra el sacerdote taoísta durante un rato. El sacerdote taoísta tosió dos veces y su poste de carne se presionó contra el pequeño agujero. Justo cuando se estaba preparando para insertarlo, el pequeño demonio zorro de repente se sentó sobre él hasta el fondo.

El sacerdote taoísta: "..."

El pequeño demonio zorro se frotó unos minutos y luego se agarró el cuello y dijo con voz estropeada: "Me pica..."

El sacerdote taoísta dijo con ternura: "¿Quieres probar tú mismo para descubrir qué es lo más cómodo?"

El pequeño zorro asintió ingenuamente con la cabeza, luego trató de usar las piernas para levantarse y se sentó con fuerza. El resultado fue que usó demasiada energía y todo su cuerpo se cayó.

El pequeño demonio zorro le dijo lastimeramente al sacerdote taoísta: "Estoy cansado..."

Sacerdote taoísta, acepta tu destino. De todos modos, no puedes soportar cansar al pequeño demonio zorro.

El Pequeño Demonio Zorro de Dos Colas y su Sacerdote Taoísta GongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora