En un universo (One shot)

Un fin y un inicio (parte 1)

Las grietas iban consumiendo aquel mundo.

Por donde se viera la vida empezaba a perecer, animales morían sin control y que decir de la flora, pueblos enteros iban desapareciendo, consumidos por las grietas que no paraban de salir.

Era tristemente común escuchar gritos de desespero y dolor en cualquier rincón que se viera

–Venga chavales no debemos perder las esperanzas, aun podemos arreglar todo esto–

Trato de dar esperanzas el líder de aquellos héroes

Pero más de uno ya la había perdido

Más de uno se cuestionaba si en verdad eran héroes

¿Que clase de héroes dejaban morir pueblos enteros?

¿Que clase de héroes dejaban morir a sus propios compañeros?

¿Donde estaban Willy y Mangel?

Definitivamente con ellos ya no

–Vegeta tiene razón puercos, aun podemos encontrar una solución a todo esto–

Hablo por fin el chico de perforaciones mientras se ponía al lado del mencionado para ver a sus amigos con una sonrisa

–Aun podemos encontrar la forma de comunicarnos con los dioses y que nos ayuden, podemos.....–

Sin embargo esto no era un cuento o una película, esto era la vida real, ruda y cruel en cualquier momento.

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Auron apenas podía abrir los ojos, sentía un líquido ir bajando desde su frente, pasando por su cara dejando un camino rojo por donde pasaba asta llegar a su mentón y caer al suelo

Intento ponerse de pie pero soltó un quejido de dolor, el cual era insoportable, podía jurar que sentía mil cuchillos clavarse en su pecho.

Como si se tratara de un mal chiste una grieta apareció justamente abajo de ellos, rompiendo todo a su alrededor, llevándose a los chicos sin piedad

–No no no! Doblas?! Venga levantate! Tenemos que salir de aqui–

Escucho gritar a Fargan, quería voltear a ver, pero el dolor le impedía moverse si quiera un poco, sabía muy a fondo de él, que le quedaba pocos segundos de vida y sorpresivamente estaba tranquilo con eso

–Auron!–

Escucho gritar a lo lejos por lo que movió la cabeza un poco para ver a luzu, su niño.

Mostró una sonrisa al verlo a su lado.

–Luzu....–

Hablo como pudo, sintiendo un ardor insoportable en su garganta por lo que empezó a toser sin saber que empezaba a salir sangre de su boca.

Luzu no podía creer lo que veía, tenía en frente suyo a un auron falleciendo, podía ver como sangre no dejaba de salir de su pecho y por la comisura de sus labios.

Aquella escena estaba destrozando su corazón.

No supo cuando empezó a sentir una mano en su mejilla por lo que bajo la vista, viendo como auron trataba de limpiar las lágrimas que salían de sus ojos castaños

–Venga cara...cara pimienta no llores...no llores mi niño, que tus lágrimas caen a mi hermoso rostro–

Bromeo el de perforaciones en un vago intento de calmar las cosas

–Tenemos que irnos auroncito... tenemos que encontrar a unos chamanes que puedan ayudarte...aun podemos ir con los demás–

Decía con desesperación el castaño, no quería perderlo, no quería dejarlo ir