(PAUSADA) Happiness || Mason Mount

Fourteen

Ya fuera del estadio, prácticamente sola y con mucho MUCHO frío, espero a que los chicos salgan.

-¡Bú!- dice de repente una persona mientras coloca las palmas de sus manos en mis hombros.

-Dios, qué haces- suelto asustada mientras me doy la vuelta y encuentro a Ben, que ríe.

-¿Qué tal?- dice saludándome en condiciones

-Bien, bien.- contesto y se mueve a mi lado para dejarme ver a los demás jugadores.

-Solo quedamos nosotros 6, los demás se han ido a casa ya- me informa Kai mientras se acerca a saludarme, seguido de sus otros compañeros.

Christian, Reece y Kepa se acercan a Ben y Kai para empezar a andar hasta el parking, mientras miro a la última persona que queda ahí.

Mason, con la expresión un poco contraida, se podría decir hasta triste, da unos pasos hacia mi.

-Tienes frío- afirma y busca en la mochila de deporte que cuelga de su hombro- Toma- me extiende la chaqueta beige que llevaba en la foto del autobús.

-Muchas gracias- digo poniéndomela y empezando a caminar con él a mi derecha.- Oye...

-Mhm

-¿Estás bien?- pregunto y gira la cabeza para mirarme

-Bueno- dice encogiéndose de hombros.

-No, bueno no. ¿Qué pasa?

-Es raro, siento que pase lo que pase en el campo, van a criticarme por redes.- dice y yo le miro con compasión antes de llegar hasta los demás.

-¿A dónde vamos?- pregunta Reece-

-A ver, si queréis podéis venir a mi casa y quedaros a dormir.-Propone Mason, a lo que todos asentimos.

-Yo tengo que recoger algunas cosas- informo.

-¿Has venido andando?- pregunta Christian y yo asiento-

-Si quieres te acerco a casa y luego vamos a la mía .- ofrece Mason, sacando las llaves del coche del bolsillo de su pantalón.

-Por favor.

•••

Mason aparca delante de mi portal y bajo del coche pronunciando un "ahora vuelvo".

Subo a mi habitación y pongo mi pijama, cepillo de dientes y el cargador del móvil en una pequeña bolsa.

Escucho unos ladridos de cachorro que provienen del patio y me llevo las manos a la cabeza

Cómo se me ha podido olvidar.

Pongo la mochila en mis hombros y salgo al patio para recoger a Thor en mis brazos.

Cada día pesa más.

Salgo de mi casa y me acerco al coche de Mason.

-Oye- toco el cristal de la ventanilla- ¿Puedo llevarle?- pregunto enseñando al cachorro.

-Claro que sí.- dice y abro la puerta del copiloto para sentarme de nuevo.

-

Buenooo lo prometido es deuda, quizás un poco más tarde de lo que planeaba pero aquí lo tenéissss