hot blood // chanjin ~ hyunchan

8

— ¿Puedes sacarme de aquí? — Había suplicado Chan, sin demostrar ninguna emoción en su rostro luego de apagar su teléfono.

Viendo sus ojos vacíos y su mirada ensombrecerse luego de ver el video, Félix solo tomó su mano, pidió un taxi y lo llevó hasta su pequeño departamento sin decir ninguna palabra.

Chris parecía haberse vuelto un muñeco sin vida mientras se dejaba arrastrar hacia su departamento, e incluso una vez que estuvo sentado en su pequeña sala de estar, se mantuvo sin demostrar emoción alguna, lo que realmente preocupó al rubio.

No sabía que estaba pasando por la cabeza del mayor y no tenía idea que podría hacer para sacarlo de ese estado.

El chico parecía estar analizando todas las decisiones que había tomado en su vida, como si algo se hubiese quebrado para siempre. Pensando cuando se había ido todo a la mierda.

— ¿Q-quieres un café? — El menor consultó tímidamente al pelinaranja.

Chris lo observó por un segundo al escuchar su voz, y con tranquilidad desde el sofá, le indicó con una mano que se acercara a su lado.

Félix acudió enseguida, apoyándose contra su brazo, pero sin verle directamente a los ojos. Estaba un poco nervioso de tenerlo en su departamento, incluso si sabía que no era el momento, no podía evitar como su cuerpo reaccionaba. El tequila que había tomado tampoco ayudaba.

— El acuerdo no especificaba que los mejores amigos estuviesen prohibidos. — Mencionó Chris, hablando como piloto automático. El rubio decidió escucharlo en silencio. — Seungmin incluso me abordó la primera noche, pero yo no fui capaz de besarlo.

— Oh...

— No sé por qué siempre creí que Hyunjin haría lo mismo, o que Changbin nunca se atrevería... — Chris gruñó las últimas palabras con frustración. Estaba dolido y enojado con ambos.

Félix podía ver y sentir los músculos y las venas de sus brazos tensarse. Que dios lo perdonara o lo ayudara, pero él no quería ver a Chan sufriendo así, no cuando era un hombre tan jodidamente sexy.

— ¿Cómo puedo ayudarte? — Preguntó en un tono sugerente, apoyando su mano cerca de su entrepierna. — ¿Qué debería hacer...por ti...? — Murmuró arrastrando las palabras.

Chris cerró los ojos, confundido consigo mismo, permitiéndole a Félix mover sus manos más arriba, causándole una fricción peligrosa.

El rubio se sentó sobre él, satisfecho, viendo como el mayor parecía relajarse con cada uno de sus toques. Completamente rendido a él.

Félix sabía que se iría al infierno si seguía jugando con un chico tan vulnerable emocionalmente.

Pero no podía parar.

El menor jadeó cuando Chris lo agarró con fuerza de las caderas en el momento en qué intentó besarle en la boca, evitando el roce de sus labios.

— Félix.... — el mayor intentó sonar firme, sin embargo, sus ojos y su cuerpo estaban tan confundidos como su corazón.

No porque amara al rubio sobre él, sino porque ya no tenía fuerzas para seguir siendo el bueno de la relación.

¿Era esto lo que Hyunjin quería? ¿Qué él fuera el primero en equivocarse, para luego tener el camino libre para hacer lo que quisiese? ¿Por eso se había encargado de hacer evidente cada uno de sus encuentros?

Chris al fin comprendía.

Todo para hacerlo entender algo que él ya sabía.

Que incluso si Hyunjin lo engañaba, él no tendría la fuerza para dejarle. Nunca lo haría.