Mas Que Una Simple Amistad (EDITANDO)

CAPITULO 6 - SIEMPRE CONTARAS CONMIGO

"Count on me - Bruno Mars"

Olivia

Mis párpados se sentían demasiado pesados y las rendijas de mis ojos cada vez se hacían más pequeñas.

La tranquilidad que había a mi alrededor me relajaba tanto que siento como empiezo a cabecear, mientras que la voz del profesor Grand de cálculo avanzado me arrulla.

Estas clases han sido siempre como una canción de cuna para mí. Y no es como si la voz del profesor fuera como una especie de coro celestial o algo por el estilo, no tiene nada que ver. Sino que aparte de que el tema en varias ocasiones no lo comprendo -por qué a alguien se le ocurrió que sería divertido meter el alfabeto americano y el griego a las operaciones-.

"Uy si, miren como me divierto". Nótese el sarcasmo.

El profesor Grant no ayuda hablando como una tortuga y con un tono de voz por debajo de los decibeles.

¿En serio alguien le presta atención?

Me dejo llevar por la relajación y el cansancio de mi cuerpo, ignorando todo a mí alrededor... o eso intento cuando siento un leve codazo a mi izquierda que hace que levante mi cabeza y abra los ojos rápidamente, encontrándome a mi amiga tratando de hacer una clase de comunicación telepática con la mirada que no logro comprender.

Con una mueca le hago entender que no entiendo, pero ella no cambia su expresión y es ahí cuando me doy cuenta que soy el foco de atención de toda la clase, haciéndome pasar saliva.

Oh oh...

— Señorita Müller.

Un Carraspeó y la voz del profesor Grand llama mi atención, encontrándomelo parado a mi derecha con una expresión pétrea en su rostro.

— P-perdón.

Empiezo a tartamudear de la vergüenza que empiezo a sentir, mientras siento mis mejillas arder y me hago pequeña en mi lugar.

Ay, yo me voy avísame cuando termines.

Ésta de brazos cruzados con una ceja enarcada, mostrando una cara de pocos amigos bajo esas gafas horribles de botella, sin mencionar la calva brillante a la cual parece le puedes pedir que te lea el futuro, y usando su usual y feo chaleco de cuadros.

¿Qué no tiene más ropa o tiene varios modelos iguales a ese?

A alguien le vendría un buen día de shopping.

Olivia, concéntrate no es el momento.

Regaño a mi subconsciente.

— Señorita —vuelve a hablar sacándome de mis pensamientos—, si no le interesa mi clase le recomiendo que se retire.

Me señala con la mano la salida, mientras yo me encojo más en mi lugar.

— No, perdón... es solo que estoy un poco cansada, pero le prometo que no volverá a pasar. —me disculpo un poco apenada.

Lo que ahora menos necesito es una mancha en mi expediente de buena alumna.

Y no sé si mi triste y vergonzoso rostro hizo que se compadeciera de mí o por qué soy una alumna que jamás le causa problemas -porque si no entenderé mucho el tema, pero nunca le he faltado el respeto a su clase y con ayuda de Scar y Devon hago mis tareas-, hizo que le bajara cinco rayitas a su enojo.

— Pues más le vale, porque si vuelvo a ver que se está quedando dormida saldrá de mi clase —me advierte—, pero a la oficina del director.

Asiento repetidas veces como una niña buena acomodándome bien otra vez en mi lugar.