Corriendo en busca de su maestro, un joven de 17 años, llevando una camisa, pantalón y simples botas, que indicaban su rango de cadete, corría a gran velocidad por la capital de Erald, ansioso por ver a la persona que más admiraba en todo el mundo.
[¡Maestro!]
En una banca de piedra en el centro de la plaza principal, un elfo oscuro estaba sentado, mirando al cielo, mientras que las personas no paraban de mirarlo y murmurar, debido a su apariencia.
[Ahhh...] —suspiró el elfo oscuro.
[¿Maestro? ¿Sucede algo?]
[Oh, August ¿Cómo estás? ¿Todo bien? Yo estoy bien... creo...]
[Ah... ¿está seguro?]
[Sí, por supuesto. Soy un caballero, me reencontré con mi familia después de años y nadie me está persiguiendo ¿Qué podría molestarme?]
Al joven August le parecía extraño lo melancólico que se veía, pues normalmente estaba en guardia por si algún peligro ocurría o con una actitud positiva, listo para enseñar. Decidió sentarse a su lado para vigilar por si acaso, pero también porque estaba preocupado por él.
[Maestro, desahóguese. Si está preocupado, puede hablar conmigo.]
[Mmm... Es raro verte tan asertivo. ¿Te pasó algo a ti?]
[¿Eh? ¿A mí? Bueno... no es como si... quizás... es que...]
El joven parecía nervioso.
[Mmm...] —el elfo oscuro lo miró directo a los ojos. —[Es una chica ¿verdad?]
August pudo sentir como la temperatura de su cuerpo subía de golpe y recordando cierta noche, no pudo evitar avergonzarse y voltear hacia otro lado, sin saber exactamente qué hacer.
[Vaya, vaya. Supongo que no eres tan cobarde en ese tema, August. Y dime... ¿Qué hiciste? ¿Te tomaste de las manos como en esos cuentos que lees constantemente en el cuartel en vez de entrenar?]
[Bueno...]
[¿O fueron a la plaza y se besaron bajo la luz de la luna? Jeje. Que cursi sonó eso.]
[Bueno... al principio... si fue un beso...]
[¿Eh?]
[¿Eh?]
El elfo oscuro quedó sin palabras al escuchar la reacción de su pequeño cadete, el cual quizás ya no era más un pequeño como él pensaba.
[Espera, August... Acaso ya...]
[¡AAAAHHHH! ¡Por eso no quería hablar de eso con usted!]
El joven August dio un grito para callar a su maestro y levantándose de golpe de la banca, se alejó de él con la cara completamente enrojecida. Por otro lado, su maestro también se levantó de la banca, pero por la sorpresa de que haber acertado.
[¡Bien hecho! ¡Ya eres un hombre, supongo!]
[Podría... no... enfocarse en eso... se supone que soy yo... el que iba a escucharlo...]
[Bueno...] —dijo mientras volvía a sentarse. —[La vida a veces no es como planeas. Solo asegúrate de cuidar de la chica ¿sí?]
[Claro... gracias... maestro...]
August se volvió a sentar a su lado, pero no podía verlo a la cara debido a la vergüenza. No estaba seguro de que hacer, pero cómo ya habían tocado el tema, quiso probar si le podía dar algún consejo.
[Maestro... ¿tiene algún consejo para...]
[Me reencontré con mi hermana.]
[¿Qué?]
ESTÁS LEYENDO
Soy el más fuerte... ¿verdad? (Pausa)
Fantasy"Si eres el más fuerte entonces... ¿Cómo logré quitarte todo?" Kino Mato solía ser un estudiante normal, hasta que repentinamente fue transportado hacia Grigaria, un mundo de fantasía dividido en 8 Países que se encontraban en aparente paz. Sin emba...