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Jeongyeon se consideraba una persona bastante aburrida y que no interesaba a nadie. Sus libros apilados y la pluma en su mano la hacían recordar eso.

Sin embargo, tener a su jefa Im lamiendo y mordiendo su cuello, la hacia dudar de todo lo que pensaba en ese momento.

— E-Espera Nayeon... Por favor, tengo que presentar esto para mañana. Tú misma me pusiste la fecha.- Algo que odiaba Jeongyeon, era retrasarse en su fecha de entrada ya que le gustaba salir por un café tranquilamente.

— Pero puedo darte más tiempo... Lo sabes.- La mayor sonrió coqueta y comenzó a arrancar la camisa de la joven escritora que solo miraba sus acciones con un rostro indescifrable.

— Pero... Nayeon...- La menor se alejó un poco y con un rostro serio, miró esos ojos cafés lujuriosos.— Estamos en mi habitación, me van a escuchar los vecinos y tú no eres muy discreta.

La editora Im mordió su labio inferior y acarició la entrepierna de Jeongyeon, que solo soltó un pequeño jadeo.

— No digas eso, me estas extrañando además que esa idiota Son me ha hecho fantasear en tener a alguien como un compañero sexual.- Las marcas en el cuello de Jeongyeon fueron cubiertas por la lengua de Nayeon, cosa que la menor solo se rindió y recibió las caricias que la mayor le daba.

— No entiendo... Nada.- Las manos de la menor viajaron por el cuerpo arriba suyo, poniéndolas en los glúteos de Nayeon, haciéndola soltar un gemido.

[°] Flashback

A Jeongyeon no le gustaba salir de su casa solo por las revisiones de su jefa, Im Nayeon. Si bien, la editorial había pedido correos electrónicos e incluso invertido en una página web que agilizará todo, aun no llegaba y los correo generalmente se perdían.

— Es un fastidio todo esto, tal vez pueda conseguir una editorial mejor.- Jeong dejó su manuscrito en el asiento de copiloto y soltó un suspiro, entre cansado y enojado.

Subió a su carro y arrancó, escuchando en la radio música clásica y lenta. Jeongyeon no era una joven atrevida y alegre, se encasillaría en una vieja aburrida que solo sale por y para el trabajo o para hablar con sus 2 únicas amigas.

Cuando estaciono su carro y sacó sus manuscritos, vio a Chaeyoung Son a lo lejos y con un rostro triste. Al parecer nuevamente Nayeon había rechazado su historia.

— Al parecer tendré que gastar mi dinero en un café después.- No le molestaba en absoluto, solo no entendía porque su amiga seguía insistiendo en eso.

Subió las escalera a paso lento y cansado. Todas las personas que la miraban solo rezaban por su alma.

Nayeon enojada y Jeongyeon estresada no era una buena combinación si querían mantener su silencio absoluto.

— Buenas tardes, acabo de llegar.- Jeongyeon se sentó en una de las sillas que dejó la líder. Nayeon volteó a mirarla con un rostro entre enfadado y frustrado.

— ¿Trajiste tu manuscrito verdad?.- Nayeon se le acercó amenazante, pero el porte de Jeongyeon hizo que Nayeon dejara de acercarse.

— No tienes porque tratarme mal.- Jeongyeon mordió su labio sin querer, Nayeon extrañamente pensó que se veía bastante sensual con esos gestos.— Ambas sabemos que nuestras personalidades rozan bastante.

— Lo sé perfectamente, por eso estoy tratando de calmarme para hablarte.- Nayeon agarró los papeles con un poco de molestia, comenzó a leerlos de manera lenta y sería.

Jeongyeon solo jaló de una silla y se sentó. Ella no tenía un celular moderno, por lo que solo se puso a mirar seriamente a la mayor, buscando alguna mueca llena de confusión.

Mi Vecina De Al Lado. A MiChaeng FanfictionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora