batalla de pensamientos, cosas que no pasarán

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Ella se fue y me quedé solo con mis pensamientos, si bien había más gente en el mismo lugar que yo, solo mi cuerpo se encontraba ahí, mi mente no. Mi cuerpo se recostó sobre mis brazos y mi mente voló, hundiéndose en ese mundo que cada quién tenía en su cabeza.

En el mío, estaban varias cosas como el pensamiento de querer irme a casa o el de hacer videos para YouTube, pero había un pensamiento que sobre salía de entre todos ellos y era el de ella.

No soy alguien que deje entrar a alguien en mi corazón fácilmente, en parte esa era la razón por la cual no había ni he tenido novia, a quienes dejo entrar son en su mayoría familiares cercanos o que han hecho mucho por mi, pero también hay quienes logran colarse e instalar su propio lugar como lo hizo ella.

Sin saberlo, ella había entrado como si se tratara una invasión silenciosa y ahora pasaba un buen rato en mi mente, buscando alguna cosa de la cuál hablarle. A su vez, otro pensamiento voló a mi mente en forma de pregunta
¿Cómo serían las cosas si la hubiera conocido antes? O ¿Qué hubiera pasado si mi yo de secundaria le hubiera hablado?
Ideas volaron y teorías surgieron, desde las que decían que nos hubiéramos llevado igual de bien hasta las que decían que ahora mismo tendríamos una relación, pero el pensamiento lógico me pisó fuerte en mi mente y ocupó un gran espacio al ser la que posiblemente hubiera Sido la realidad.

La realidad era que empezamos a hablar por estar juntos en el mismo salón, primero por trabajos en equipo o por cosas como ella, recuerdo que en pandemia ella me pedía tareas y hasta flojera me daba responderle, y oh vaya, quién lo diría, es mi mejor amiga. Incluso si yo para ella no soy algo como un mejor amigo, ella se instaló y rápido ocupó ese puesto.
Por eso, la lógica que en ocasiones solo llega a arruinar las cosas habló:
Lo más seguro sería que no serían amigos- dijo la lógica -me tenías que bajar de las nubes- le respondí
Es mi trabajo- respondió la lógica, -es cierto que ahora se llevan bien, pero tú en secundaria no pensabas en cosas como amigas o algo por el estilo, solo en pasar las materias y estar con tu mejor amigo haciendo cualquier tontería lo suficientemente discreta como para que no los reportaran - dijo la lógica sin que yo pudiera refutar algo.
Era cierto, en primero nació mi gusto por el japonés y mi admiración por un primo, en segundo solo quería pasarla bien mientras veía mis series  y en tercero pensaba mucho en las canciones de pascua y Rodri (y por eso es el apodo de mi mejor amigo), también pensaba en hacer videos y subir mis calificaciones, pero nunca realmente en una relación, incluso llegué a rechazar a 2 o 3 chicas porque no me interesaban.

En pandemia me centré mucho en el anime y vídeo juegos, por lo que al ver el afecto que se podrían tener en unas simples caricaturas japonesas empecé realmente a pensar en ello. Cuando llegaron las clases virtuales no le puse atención a ninguna de las chicas porque no me llamaban la atención y lo único que pensaba de mi amiga era que era alguien triste por su tono de voz.

Pero no fue hasta que regresé a la prepa que realmente lo pensé, ella había Sido la única y primero que hizo cosas que nunca nadie había hecho, como decirme/gritarme que no le hablara a otra chica porque ella era mi novia, las sensaciones que esas simples palabras eran múltiples, eran mezclas entre confusión, confianza, un toque muy pequeño de incomodidad y otro toque de cerotonina, pero nunca me molestó.

Mi mente fue regresada a la realidad de golpe, y escuché con fastidio el sonido de la campana sonando, -chance y el profe llega tarde- pensé  mientras cerraba los ojos y recordaba, en cierta forma ella fue la primera en darme la sensación de que querían que fuera a un lugar ya que ella se enojaba cuando le decía que me daba flojera ir a su cumpleaños.

Ciertamente nunca me había pasado, o, tan siquiera me habían invitado, yo me aburro en las fiestas, incluso si son de familiares o mías, por lo que no tenía pensado ir.
Ver sus ojos diciéndome más de 1000 palabras con tan solo mirarme hacía que yo me repensara si ir, sus gestos tan únicos con ella atraían mi curiosidad.
Ella era tan única que cuando estaba triste uno se podía percatar con facilidad, sus expresiones y comportamientos al decirle que tenía ojitos lindos me sacaban una sonrisa y el muy ligero rubor que obtenía era una hermosa vista.

Sabes que no puedes estar con ella, ella te lo dijo - me dijo mi Mante, buscando revivir la batalla interna que tenía
Lo sé, pero no cuesta nada imaginar- respondí esperando que no me respondiera una vez más
Ella tiene miedo de arruinar las cosas contigo, deberías estar igual que ella y además en todo caso ya lo sabes, no eres suficiente para ella- dijo la mente
Lo sé, lo sé, si una relación arruinaría todo prefiero quedarme tal y como estamos, ya sé que no me creo capaz de hacerla feliz como se debe- respondí -pero sigues queriendola- dijo la mente, -pero no piensas la posibilidad de que todo salga bien, yo quiero encontrar a alguien con quien estar el resto de mi vida y no quiero estar de chapulín - sigues pensando en eso a estas alturas?- preguntó la mente con cierta desaprobación, -es cierto que en algunos aspectos puedes garantizarle cosas que un fiestero o alguien más como ella no puede, como lo es la fidelidad o el sentimiento genuino, pero a su vez solo la aburrirías, a ti no te gusta bailar pero a ella le encanta, sería muy egoísta no dejarla bailar solo porque a ti no te gusta- dijo la mente.

En ese momento se escuchó la puerta junto a unos pasos, fije mi ojo en la entrada solo para ver cómo el maestro entraba en el lugar, ganaste por esta vez- pensé mientras me sentaba recto y buscaba mis cosas de la clase.






Ciertamente cuando digo "

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⏰ Última actualización: Sep 24, 2022 ⏰

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