01| Septiembre

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Cuando la lluvia se ablanda

Primavera

Una estación que nos vuelve locos a cada uno de nosotros, pero pensándolo más a fondo ¿Qué somos sin algo de locura? Nos hace sentir vivos.

Yor observaba con una pizca de contrariedad como la lluvia caía a raudales en Berlint. No había olvidado algo tan imprescindible como su paraguas, pero de alguna forma se sentía inconforme al tener que pasar con su paraguas desvencijado al lado de parejas, que al faltar el mismo sol, intentaban duplicar su luminosidad.

Ella misma había renunciado a momentos como ese, en el instante en que se adicionó a Garden como una de sicarias más reconocidas. Ver el color rojo por todas partes le recordaba cuando decoraba las paredes de sus clientes con el color carmesí, no podía evitar pensar que tal vez, como en todo habían secretos de por medio.

Tal vez, simplemente no estaba hecha para estaciones tan... afables.

Intentó animar su rostro al notar a la lejanía la silueta de su esposo. Agradecía a Yuri por ser tan sobreprotector y dispensarle cuidados a pesar de que su trabajo lo traía muy atareado, el hecho de que la distancia no mermara sus lazos familiares la hacía sentir satisfecha. Pero, también se sentía presionada.

Cada llamada con su hermano le hacía consciente de lo poco normal que era, y tener que mentirle. Su matrimonio no era real, no amaba a su esposo, aunque no por eso no dejaba de respetarlo e incluso admirarlo por sus convicciones que tal vez no seguían su procedimiento, pero a pesar de todo, había tenido una pequeña esperanza de no pretender aunque sea en tal aspecto.

- Buenas tardes – procedió a saludar Loid sin aproximarse demasiado para evitar un choque entre paraguas – El tiempo ha sido algo errático, ¿sucedió algo en el trabajo?

¿Por qué se sentía de esa manera?

Tenía a un esposo que la respetaba, que no evidenciaba sus muchos fallos y resaltaba sus virtudes. Una persona talentosa, y que era muy allegado a su familia.

¿Por qué esa sensación de vacío inexplicable?

Se sentía insatisfecha, y dicha sensación se prolongaba al ver a tantas parejas de Berlint, que no hacían sino recordarle la poca verdad entre tanta falsedad que había construido a su alrededor

- ¿Yor?

Intentó balbucear alguna salida pero las palabras se le enredaban.

Loid, era quizá, un prospecto más cercano a lo que ella buscaba en una potencial pareja. Pero el hecho de que se tratara de una farsa de mutua conveniencia, comenzaba a herirla, saber que Anya no era su hija apropiadamente, sino era un simple acuerdo, comenzaba a levantar dudas. La pequeña tenía seis años, y tras la pérdida de su madre era mejor que obtuviera una figura materna adecuada, ella no podía fungir ese papel porque ella no escogió esa familia por amor.

- Perdóname –musitó al percatarse que había ignorado los cuestionamientos del rubio – Tengo trabajo pendiente, eso ha estado carcomiéndome los nervios, disculpa, Loid.

Forger comenzó a observarla cuidadosamente. No lo admitía abiertamente, pero la mirada de Loid siempre le dio la impresión de que podía leer parte de ella.

- Creo que tengo un problema con el paraguas, Yor – comenta antes de mostrar una sonrisa nerviosa demostrando que a pesar de forzar el mecanismo una de las varas no se abrían correctamente – Podríamos compartirlo?

Yor asintió entre tartamudeos y se condujeron un par de calles, adentrándose en las calles de Ostania rumbo a su hogar.

Sin embargo antes de dar un paso, Loid, que se había ofrecido para llevar el paraguas lo bajó repentinamente, la pelinegra creyó que se terminarían mojando por la lluvia pero una sensación suave la invadió al sentir el primer copo de nieve.

- ¿No estamos en primavera? – preguntó para si misma antes de dejarse encandilar por la tranquila estampa que les ofrecía el caótico clima.

Loid cerró el paraguas y ambos caminaron lo que restaba del trayecto lado a lado. Pero por alguna razón esa sensación de disconformidad había mermado, un poco.

- No me parece mal – con una sonrisa... sincera, expresó lo que creía – Creo que incluso resalta la belleza de Yor.

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¿Por qué lo hiciste Twilight?

Una pregunta que abordó al padre de la respetable familia Forger. No había necesidad absoluta de realizar un pequeño altercado con su propio paraguas o simular que se había averiado.

Los rumores de las vecinas estaban dirigidos a otros nuevos vecinos de momento, y la relación que tenían era buena y tenían confianza dentro de los parámetros necesarios.

¿Entonces, por qué había decidido iniciar un acercamiento fortuito?

Carecía de sentido, incluso podría ser tomado como ridículo, y para rematar el cumplido. Normalmente estudiaba y formulaba dentro de su cabeza todas las alternativas posibles al momento de iniciar una conversación. Pero había salido de forma tan natural que incluso daba algo de miedo. Porque no era algo característico de Twilight.

Era un pequeño destello de personalidad de Loid Forger.

Esa fue la primera vez que ambos bajaron la guardia.

Y eso podría ser tanto como bueno, como malo.

Every Month • TwiYorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora