01

982 54 3
                                    

Mi despertador sonó, la rutina diaria comenzaba.

Di un gran bostezo, aún con un poco de sueño; si fuera por mi seguiría durmiendo, de no ser que hoy en el pueblo habría un festival, después de todo hoy era aniversario de Karmaland.

Abrí mi cofre en busca de un hacha, me habían encargado el ayudar con la comida, ya tenía la carne y demás, solo faltaba la leña para poder empezar a hacer mis platillos.
Una vez la encontré salí de mi casa, si quería terminar cuánto antes para tener más tiempo de diversión, tenía que iniciar cuánto antes.

El bosque estaba un tanto lejos, por lo que a parte de mi hacha me lleve suministros y cosas extra. Aproximadamente se tardaba 20 minutos en llegar a pie, no era mucho, pero si acabas de despertar si era un poco costoso.

Cuando llegue, busque un lugar para empezar. No era tan complicado buscarlo, después de todo, no era la primera vez que talaba por la zona.
Puse mis cosas en dónde sacaría la leña, después me puse a talar algunos árboles una tarea costosa que si que costó tiempo.
Después de talar algunos me dedique a cortarlos por pedazos, para así poder llevármelo más fácil.

Esto era más fácil que cortar el árbol entero, si, pero por alguna razón lo sentía más agotador. Cuando decidí por darme un descanso, de mi mochila saque un agua y decidí tomarmela, mientras escuchaba el hermoso sonido de la naturaleza.

"Pss" Escuché en mi oreja, a lo que por reflejo voltee para buscar el causante. Estar fuera del pueblo era peligroso, ya que no tenía la sagrada protección de los dioses (y incluso en el pueblo aún estabas en peligro), por lo que si salías, tenías que atentar a tu suerte.

Cerré mi botella y agarre mi hacha, fuera lo que fuera, tenía que estar alerta. Trate de no hacer mucho ruido, luego había creaturas ciegas bastantes poderosas. "乇ꌚ꓄ꀎᖘꀤꀷꂦ" volví a escuchar cerca de mi oído, pero esto parecía más cómo una voz, más o menos alarmado, hablé, no tanto como un grito, si no una frase. -¿Quién está ahí?- No esperaba nada, porque aunque fuera una broma, no serían tan estúpidos para ceder tan fácilmente.

Un tanto inseguro, seguí haciendo mi tarea, alerta de cualquier sonido fuera de lo normal. Seguí y seguí, hasta que estube satisfecho con la cantidad. Puse todo en mi mochila. Una vez todo adentro me asegure de tener todo. "Que raro..." dije en mi mente al notar la ausencia de mi misma botella de agua de hace un rato. "¿Se la habrá llevado un animal?" Busque posibles razones, aunque igualmente no era de tanta importancia, solo había un trago en la botella.

Me volví a poner mi mochila, con mi espada en la mano por cualquier cosa. De camino,me sentía inseguro, por alguna razón me sentía vigilado, constantemente miraba a todos lados en busca de algo sin saber exactamente que buscaba.

-Auch!- Exclamé cuando sentí que algo me pegó, voltee, mirando mi botella rellena. "¿Qué mierda?" Pensé en mis adentros. Que tú botella la dejes vacía, la roben, y aparezca rellena no era algo de todos los días. Y eso que siempre ocurrían cosas raras.

-¿¡Quién está ahí!?- Grite un tanto alterado, si alguien me estaba siguiendo podría ser malo, había tantas razones por las que alguien sigue a otra. Giraba constantemente en mi propio eje, buscando histérico a la razón, no iba a volver hasta que estuviera más seguro. Si no me aseguraba el pueblo podría peligrar, Merlon ya estaba un tanto viejo, por lo que no podría asegurar el pueblo como antes. Y los dioses solo nos protegían de la mafia externa.

Cuando volví la mirada enfrente me encontré con una cara, una sin rostro.

Por mero instinto retrocedi. -¿QUE COJONES ERES?- Dije asustado, en los libros de las bibliotecas nunca habían mencionado a alguna criatura así (hasta donde sabía), por lo que el miedo y el pánico me indundo.
La criatura enfrente mía retrocedió, parecía dócil, pero no me quería dejar llevar.

Aquella criatura no tenía rostro, portaba un gorro peculiar, un cabello bastante largo, también una vestimenta rara, a tal punto que no puedo describir.

Esa cosa empezó a tocarse la cara, notando el hecho de no tener rostro. Se empezó a paniquear, "mirando" a todos lados, para después mirarme a mí. No comprendía nada. Alcé mi espada, por si tenía que atacar a esa criatura.

La cosa enfrente de mí hizo señas, de que no quería pelea, pero fuera del pueblo, todo era desconocido si no habías tocado un libro en tu vida.

No comprendí bien si quería hablar conmigo o algo, pero después de ver que seguía en defensiva puso su mano en su rostro y se encorbo un poco.

Me miró y después chasqueo, o eso hasta donde recuerdo, pues después de eso desperté en mi casa con un sudor en la frente.

Mire mi inventario algo alterado, por si todo había Sido un sueño. Pero si, ahí seguía la leña que había conseguido.

Algo confundido me pare de mi cama, había escuchado que había unos bichos que causaban alucinaciones, pero eso me causo el temor de seguir en una.

*Toc, toc*

Se escuchó por la puerta trasera. Al instante fui, pensando que era alguien que venía por la comida del festival.
-Hola, Luzu.- Dijo Rubius del otro lado de la puerta, algo preocupado, podía deducir que de mí. -Hola, Rubius, ¿a qué vienes?-- dije amablemente, sin intenciones de dejarlo pasar. -Vine a ver si estabas. Es que ya nos habíamos preocupado, ya son las 9 de la noche y no te aparecías...- Respondió. ¿Ya las 9? Tenía que ser un chiste. Mire el reloj y era cierto, las nueve de la noche.

-¿Al menos ya tienes la comida?- Pregunto, un poco más aliviado, tal vez al saber que no me había suicidado. -Oh, Luzu, si que te luciste.- Dijo mirando a lado mío, ya estaba un festín hecho, sin que yo me haya enterado.

-Vamos, te ayudo a llevarlo al centro del pueblo- Exclamó; entrando a mi casa sin permiso. Yo solo miraba el suelo sin saber cómo reaccionar, recordaba lo del bosque, más sin embargo, no recordaba haber llegado a mi casa, haber cocinado, o haberme acostado a mi cama.

Sin darme cuenta, Rubius ya se había ido con toda la comida. Hubiera ido tras el, pero ahora mismo estaba exaltado, no comprendía absolutamente nada.

No tenía sueño, sentía como si hubiera muerto y reencarnado mientras dormía.
Me pase un buen rato pensando, hasta que me cansé.

Eran las 10, a lo que fui al centro del pueblo, a charlar con quiénes seguían ahí, para tratar de despejar mi mente nublada.

______
1118 palabras del capitulo

Jaja, siento que la redacción no fue la mejor, a veces ni yo comprendía, lo siento mucho <3

Fuera de eso espero que hayan disfrutado

∆×∆

&quot;Corazón&quot; | Luckity Donde viven las historias. Descúbrelo ahora