CAMBIOS [Boku No Hero Academia]

1.

Luego de que el primogénito de los Todoroki tuviera una inesperada pelea con un Nomu un tanto peculiar, acabó en muy mal estado. Debido al hecho de que su cuerpo había nacido para soportar temperaturas bajas y no el calor, gran parte de él, y mayormente en sus brazos, terminó estando al rojo vivo por la constante y cada vez más fuerte exposición.

Cuando la pelea finalmente acabó y se dejó de escuchar los gritos y gruñidos del Nomu, un equipo de emergencia pudo ser capaz de entrar al lugar usando trajes especiales que resisten el calor. En el centro de todos encontraron al primogénito de Enji inconsciente y cerca de él, entre algunos escombros deformes, se lograba ver parte de lo que quedaba del Nomu chamuscado.

Los bomberos y paramédicos no tardaron en llevar al héroe de emergencia por las alarmantes heridas en su cuerpo.

Y luego de un muy largo tiempo en la inconsciencia, Touya Todoroki finalmente despertó.

Sus ojos cansados recorrieron su alrededor intentando reconocer el lugar: el espacio tenía paredes blancas, las cortinas del mismo color, había una bolsa de intravenosa colgando de una percha de metal y una gran máquina molesta a su otro lado. 

Estaba en un hospital, no había duda.

Debió haberlo imaginado, no por nada tenía esta sensación molesta en la nariz. Touya frunció el ceño cuando reconoció esa molestia como parte de la máquina al lado suyo, era un respirador. Sin haber visto aún su cuerpo entero ya se imaginaba su situación actual. Entonces, como si su mente hubiera despertado recién del letargo, de la nada recordó el por qué había terminado aquí en primer lugar.

Aquel Nomu había sido un problema muy grande y lo había obligado a llevar a su cuerpo más allá de sus límites, nuevamente. No era que nunca terminaba en situaciones similares, pero en todas las anteriores Touya procuraba no sobrepasarse, consciente del daño que podía sufrir su cuerpo al hacerlo. Pero sabía de que solo dejando de lado las posibles consecuencias sobre su cuerpo iba a tener siquiera la oportunidad de enfrentar y derrotar a aquel Nomu. 

Ahora sí analizó mejor su cuerpo, su mirada pasó desde su torso vendado, su brazo derecho con parches, el izquierdo con un cabestrillo y sus manos con las típicas marcas de grapas médicas. 

Maldijo su suerte. Al menos esperaba que aquel monstruo deforme hubiera terminado peor que él.

—Maldición.

—¡Hermano! —el primogénito de los Todoroki salió de sus pensamientos y alzó la vista de sus manos para ver a su hermano, Shoto, acercarse a él desde la esquina de la habitación— Que bueno que despertaste, me preocupé cuando no hubo señales de ti luego de la pelea.

Touya se sorprendió a si mismo al notar que no había caído en la presencia de Shoto todo este tiempo en la habitación. Su hermano podía pasar horas en silencio y tan quieto que a veces podía pasar desapercibido ante el ojo de todos.

Eso incluyéndolo en ocasiones.

El mayor analizó a su hermanito una vez lo tuvo más cerca a él: Llevaba el mismo atuendo del de la academia de héroes con la que lo había visto la última vez. Pero este estaba limpio a diferencia de cómo imaginaba que terminaría al "ayudar a mantener a la gente a salvo" como le pidió que hiciera. Al menos esperaba algo de ceniza en sus mejillas, pero su rostro estaba pulcramente lavado.

Y no era que pudiera lavar su ropa tan fácilmente en el fregadero del baño del hospital, ¿O sí?

—¿Cuánto tiempo estuve aquí?

Su pregunta logró desconcertar por momentos a su hermanito. Touya solo quería confirmar sus sospechas.

—Dos días —Shoto respondió sin notar que esas dos simples palabras habían causado un escalofrío en su hermano mayor. Touya hizo un buen trabajo ocultando el sentimiento, mostrando su rostro estoico de siempre—. Fuyu y Mamá están en el pasillo, y Natsu va a venir luego de sus clases.