Fuera de Juego [Eduardo Camavinga]

Capítulo 11

Valentina

Me lo paso de maravilla toda la tarde trabajando con el equipo. Son todos muy amables conmigo y me dan indicaciones pero también me dejan hacer fotografía libre. Ha sido muy divertido el jueguecito con Hugo, nos pasamos la tarde entre risas, mirada y roces indiscretos, la mayoría de las risitas eran provocadas por la gracia que nos causa comportarnos así. Edu estaba que no podía más con los celos, el piensa que no se le ha notado pero madre mía. No podía ver delante a mi amigo y creo que la invitación repentina a quedarme en su casa no es una casualidad. Nada de esto me parece mal, era mi intención desde el principio y mi plan sigue adelante.

Estoy tumbada en el sofá de su casa cuando noto que entra en la sala.

-Una foto dura más Edu, quieres hacerme una- poso de broma y nos reímos

-Pensaba que la de las fotos eras tú Valen- le miro extrañada

-¿Valen?

-Sí, ¿todos te llaman así no? Hugo te llama así- ui los celitos

-Ya, pero resulta que tú siempre me llamas Val- se sienta a mi lado y me acerco- y me gusta que me llames Val

-Tu me has llamado Cama- ah es por eso- y siempre me llamas Edu- me mira con disgusto

-joder me ha salido solo, lo siento

-O te ha salido solo o era porque estaba tu amiguito delante- así que toda esta escenita era por eso

-Si vamos por ahí todos te llaman Cama- arquea las cejas- y que Hugo estuviera conmigo no tiene nada que ver, somos amigos

-Si vamos por ahí tu siempre me llamas Edu y también me gusta más- le sonrío- ¿amigos? No lo parecía esta tarde

-¿Celoso moreno?- me he acercado más y estamos a escasos centímetros- Solo somos amigos, hace muchos años que nos conocemos, no es una amenaza

-Esa será la percepción que tienes tú, a mí no me dio esa sensación. Cuando estabas con Marco firmando soltó un par de comentarios que no parecían de amigo

-¿Qué dijo?- esa parte no me la conocía y podía ser muy gracioso

-que eres muy guapa- suelta y no puedo evitar reírme, me esperaba algo más de Hugo

-¿acaso no es verdad?

-Si, pero no es lo que dijo sino como lo dijo. Te estaba mirando el culo a lo descarado como un baboso- Dios intento no reírme pero me gustaría haber visto a mi amigo así- y salió el tema de que erais como hermanos pero soltó que por suerte no lo erais- Eso ya me parece más del estilo de jueguecito de Hugo- dando a entender que está por ti.

-Mira yo y Hugo no nos vemos de esa forma, él no diría algo así de mi. Si vas a estar toda la noche así mejor me voy- me hago la cabreada y me doy cuenta de que soy mejor actriz de lo que pensaba.

-Vale, lo siento- me sonríe- mejor ponemos la peli ya, ¿Cuál quieres ver?- coge el mando de la mesa de cristal del centro y me lo tiende- elige

La enciendo y tras abrir netflix selecciono el modo aleatorio para no meternos en una disputa. Mi sorpresa es mayúscula cuando comienza a reproducirse 365 días. Si la noche pintaba bien ahora va a mejorar.

Tras unos diez minutos de película aparece una mujer de unos 40 años por la puerta anunciando que la cena está lista. Me imagino que es Lisa. Edu le indica que va ahora a por ella que cenaremos viendo la película. Nos sentamos en el suelo alrededor de la mesa central y comemos mientras seguimos con la película. Estaba concentrada en la película mientras devoro un trozo de pizza, debo reconocer que es de las mejores que he probado. De repente siento a Cama posar un dedo sobre mi barbilla y me sobresalto.

-Tenías un poco de tomate- me sonríe y ambos estallamos en carcajadas

-Gracias- siento como me pongo roja ante el contacto.

Una vez terminamos estamos por la mitad de la película. En la pantalla aparece una escena de sexo entre los protagonistas y noto como él se remueve en el sofá.

-Val, creo que tu idea del aleatorio no ha sido la mejor- dice girándose para mirarme

-¿No te está gustando?- pregunto sin comprender

-No es que no me guste, es que me están entrando unas ganas horribles de besarte- sonrío y me acerco a él gateando por el sofá.

-Pues no entiendo por qué no lo haces- mis labios quedan casi rozando los suyos

De repente lo siento sobre mi boca. Cubre mis labios con los suyos de forma voraz, me devora con hambre y dejo paso para que introduzca su lengua y danza con la mía. Se compenetran al unísono. Me agarra de la cintura y me coloca de manera que quedo sentada sobre su regazo. Nuestras bocas siguen unidas y mis manos viajan a su nuca mientras que las de él siguen en mi cintura pegándome hacia el.

En un momento se separa de mi y nos miramos a los ojos mientras nuestros alientos chocan y nuestras respiraciones luchan por volver a la normalidad.

-Porque sabía que una vez probara tus labios se iban a convertir en mi adicción y eso es lo último que quiero ahora mismo

-¿Qué no quieres Edu?- sigo sobre su regazo y nuestras frentes casi se tocan

-Esto Valen, no sé que me pasa contigo pero tiene que parar, ya te lo dije cuando nos conocimos, no quiero saber nada de mujeres. He dejado de verte como una amiga y eso me preocupa- mientras dice eso me separa de su regazo.

-Muy bien Edu, acabas de cagarla- me calzo y cojo mi bolso- Gracias por la oportunidad y la cena- Me dirijo a la puerta- Adiós Camavinga

Salgo de la casa y tras meterme en el coche me pongo en marcha. Si el quiere alejarse de mí se lo voy a poner fácil, si el no quiere nada, yo menos.