El chico de las rosas.

4- desagradable compañía

–no soy novio de Luzu, el es mi nuevo amigo, mi nombre es Quackity.

Dijo nervioso Quackity y a pesar de esto ser cierto, ¿porque le dolía tanto a Luzu?, si a penas se conocían desde ayer, en realidad tenia suerte de que el chico dijiese que son amigos y no solo simples conocidos o peor aún, desconocidos, pero demonios, ¿ponerse tan sentimental por esa simple frase?, que tonto se había vuelto en tan poco tiempo, vio con mala cara a Rubius, el solo sonrio y se acercó a Quackity con la clara intención de fastidiar a la persona que lo estaba acribillando con la mirada.

-buenas Quackity, mi nombre es Rubius pero tu si quieres puedes decirme papi.

"Su nombre en sus labios suena sucio"

Rubius le guiño el ojo a Quackity el cual solo se río, Luzu no podía estar más irritado y eso solo le dio satisfacción a el chico de cabellos plateados.

–viejo mañoso, ¿no ve que voy llegando y ya me quiere tirar los perros?.

Ahí estaba estaba, esa personalidad encantadora que debía de ser solo para el, esas bromas que debían de ser solo para el, esa sonrisa que debía ser solo para el, incluso el pronunciar su nombre debia de ser privado, solo para el, apretó sus manos mientras esperaba, no sacar un lado violento, al menos no frente a Quackity.

-solo estoy siendo amable tío, sin intenciones ocultas, ¿vale?, hay que llevarnos bien.

Dijo aquel oso mientras se acercó lo suficientemente a Quackity para poder rodear sus hombros con su brazo, justo como Quackity había hecho con el cuando se conocieron pero esa acción, solo lo hizo molestarse aún más, rápidamente rodeo la cintura de Quackity con sus brazos y lo atrajo hacia el, pudo sentir la tensión del cuerpo del más bajo entre sus brazos, miró un poco sus orejas y estas estaban rojas, estaba nervioso y le gustaba ponerlo así, Rubius lo miró con  sorpresa y Luzu solo sonrio con satisfacción, como si el solo haber puesto nervioso a Quackity ya fuese un premio en sí.

–lo siento Rabis pero Quackity y yo tenemos cosas que hacer hoy, así que si no te importa...

–hem si...vamos a farmear a una mina...

Dijo Quackity aún nervioso, el pulso de su  corazón no lo dejaba en paz, los brazos de Luzu lo rodeaban de la cintura y el agarre era fuerte, estaba demasiado nervioso, la respiración de Luzu golpeaba suavemente en su oreja derecha y a pesar de que el agarre de su cintura era fuerte, quien le abrazaba tenía cuidado de no aplastarle las alas.

–entonces déjenme acompañarlos, así paso tiempo con mi querido amigo Luzu y puedo conocer a nuestro nuevo compañero.

–no creo que sea buena..

–¡buena idea!.

grito Quackity mientras se safaba del agarre de Luzu dejando al otro irritado, realmente estaba muy nervioso y a pesar de que para Quackity, Rubius cayó en el momento más oportuno, Luzu seguía pensando que era una gran molestia su sola presencia.

–si Quackity esta de acuerdo entonces no veo el porque no ir.

dijo el oso mientras le sonreía triunfador a Luzu el cual solo rodo los ojos con molestia y pesar, ¿tan complicado era pasar un día calmado?, el oso le dijo unas cuantas cosas a Quackity más para poder ir a su casa y buscar sus "herramientas". Luzu solo suspiro cuando se fue aquel chico y Quackity lo noto tenso, demasiado mal humorado, era una cara que Luzu no ponía con el o al menos cerca de el, siempre estaba sonriente, así que para aligerar un poco el ambiente y ver sonreír de nuevo a Luzu empezó a hablar con el.

-hey Luzuuuu

-¿que pasa Quacks?

-note que te llevas muy bien con el, eh -dijo con sarcasmo y Luzu solo sonrió, bien, bien, ya era un progreso-.

-no me desagrada Rabis, es solo que yo quería pasar todo el día contigo y Rabis es un poco... -Luzu por fin dirigió la mirada hacia donde el chico de la gorra y pudo notar sus mejillas rojas, el en automático también enrojeció de las mejillas- ¿dije...algo raro?

-no, no, es solo que...bueno... -Quackity rio nerviosamente mientras tapaba su sonrisa, pero Luzu no quería que la cubriera, era realmente linda- ya sabes... ay no, que pena Luzu.

-no, realmente no se- menciono con una ligera sonrisa, Quackity se "molesto" y le dio un pequeño golpe en el costado de sus costillas- de acuerdo si se.

-viejo mañoso.

Quackity le sonrió y todo había vuelto a ser como antes, todo estaba bien, todo era armonioso y cálido, que buena sensación, incluso después de que  Rubius llegase la misma sensación cálida seguía, incluso Luzu era mucho mas cooperativo con las bromas que Rubius le hacia a ambos, todo eran risas, una que otra mina que después alguien se comería, así el día no era tan malo, pero mejoro de sobre manera cuando Quackity sostuvo de nuevo su mano mientras caminaban, entonces ya era un día perfecto pese a el pequeño contra tiempo.