5- recordando viejas flores

65 13 0
                                    

de camino no hubo ningún contratiempo que resaltar, solo en el cual algunas veces se comían alguna mina de alguno de ellos o las suyas mismas lo que ocasionaba que el viaje hacia la mina de Karmaland fuese divertido, lleno de risas y ameno, en realidad todos la estaban pasando bien entre bromas y chistes tontos que se hacían entre ellos y claro, no podían faltar de vez en cuando alguna que otra mirada fugaz entre Quackity y Luzu los cuales se sonreirán al cruzar miradas sintiendo sus corazones saltar a un ritmo apresurado, Rubius en cambio se había dado cuenta de esto y solo los molestaba diciendo que "no comieran frente a los pobres".

-mira Quackity, yo te recomendaría el hacer tu mina donde vayas a construir tu casa, ¿vale?, siempre es mas fácil el bajar y minar ahí -dijo el hibrido en la entrada de la mina, ya cansado de el recorrido que habían hecho-.

-cierto, que pinche hueva venir hasta acá solo para conseguir materiales.

los tres asintieron, si bien todos en Karmaland tenían una mina personal en la cual farmeaban por su cuenta de vez en cuando (sin contar las cosas ilegales que llagaba a hacer cada uno en sus respectivas minas), había una en especial que tenia buenos y bonitos materiales y en la cual los dioses, cada cierto tiempo, restaurarían para mayor facilidad de sus habitantes, que dioses tan benevolentes con sus devotos.

después de quejarse y adentrarse en la mina no hicieron mucho mas que ayudar a la recolección de materiales, claro, Luzu se hizo cargo de la mayor parte de la recolecta, Rubius se la paso tonteando y aunque al principio Quackity estaba enfocado en la recolección, Rubius le contagio la tontera y el dúo de niños hiperactivos comenzaron a hacer el tonto mientras un mal humorado Luzu se quejaba de que estaba haciendo todo.

–bueno niño, ¿que piensas hacer para tu nuevo hogar? -pregunto el híbrido mientras ponía sus brazos sobre los hombros de ambos chicos, su instinto decía que ya había fastiado demasiado a Luzu durante el día, así que ahora ahora evitaba ponerlo de peor humor si no quería que su casa fuese llenas de minas como alguna vez ya lo había hecho el castaño.

–bueno...no lo eh pesando con cuidado, la neta yo quería hacer un castillo pero cuando vi el de su compañero a los lejos, pff... si que cualquier construcción se queda pendeja.

–¿te refieres a Vegetta?, hombre si, ese tío está loco, nos quita el puto sol a todos.

Luzu y Rubius rieron por eso, si que era verdad que aquel chico amante de lo simétrico era algo extremista con respecto a sus construcciones, Quackity guardo silencio unos segundos mientras ellos reían de manera tan familiar, algo sintió y no supo que fue.

–bueno si, eso, pero wey, la verdad es que no tengo idea de que hacer.

–vale, ¿pero por lo mientras donde te quedas?, en Karmaland hay lugares muy chulos para quedarse a dormir por lo mientras.

–bueno el-

–me estoy quedando en la casa de Luzu.

Dijo Quackity interrumpiendo al de mirada carmín el cual solo se quedó en silencio por unos segundos para después sonreír.

–si, el se está quedando conmigo.

–pero bueno Luzu...no sabia que tan rápido oís aveis casado, si que van a un ritmo muy rápido.

–no es eso... -Luzu se puso rojo cual tomate con aquella frase dicha, ¿estar casado con Quackity cuando a penas lo conocía? –no que va...yo-

–si nos casamos o no es nuestro pedo, pinche vieja metiche.

Ahora Rubius reía escandalosamente por el enojo del más chico de los tres mientras Luzu podría ser fácilmente confundido con un tomate maduro, Quackity estaba enojado y sus mejillas estaban rojas del enojo, Luzu solo pudo sentirse ilusionado con respecto a Quackity pero no podía decir nada por estar demasiado avergonzado, mientras Rubius se burlaba del menor Luzu solo divagaba entre sus pensamientos.

–bueno vale, pero si se casan mínimo espero una invitación por parte vuestra.

‐minimi ispiri ini inviticiin, viejo mamon, no le vamos a mandar nada, ¿oh no Luzu?

–¿ah..?, ah claro, si, lo que dijo Quacks.

–vale, pero recuerden que yo soy el cura de Karmaland y si no los caso yo, no será nadie más.

–no me importa, seguro hay un juez y el nos casa.

–en realidad no, hace mucho que Auron se fue así que no hay un juez por el momento, ¿cierto Luzu?...¿Luzu?

El castaño estaba en silencio, esa actitud de chico enamorado se había esfumado una vez hacia escuchado ese nombre, ¿porque ahora que ya estaba olvidando lo pasado?, Luzu mantuvo la vista fija en el suelo mientras era llamado por ambos chicos los cuales estaban empezando a preocuparse por aquel que parecía una tumba por lo silencioso y pálido que estaba, nuevamente se encontraba aturdido pero no como lo estaba anteriormente por Quackity, sentía un mar de angustia, tristeza y profundo dolor dentro de el, su corazón le empezó a punzar y le empezó a latir tan rápido como una locomotora, no por un sentimiento cálido, era algo realmente amargo y doloroso.

–¿Luzu?, ¿estas bien...?

Dijo Quackity y cuando el de mirada carmín levantó la mirada pudo ver por unos segundos a aquel chico el cual había puesto de cabeza su mundo hace mucho tiempo, su silueta parecía disuelta como acuarela en sus memorias, no podría ver bien su rostro pero sabía que estaba sonriendo, le estaba sonriendo y después su vista se comenzó a nublar.

Luego puro silencio.

¿Por qué le seguía doliendo tanto el recuerdo de ese chico?


Hola buenas, soy el escritor de este fanfic, primero que nada quiero hacer unas aclaraciones con respecto a mi historia porque a penas se me ocurrió (?(

1- la historia se desarrolla después de Karmaland 4, por lo tanto muchos personajes se van a omitir por el momento o por toda la historia...
2-tuve que editar la parte 4 porque la había subido a la mitad xD si pueden re leer la parte 4 sería de gran ayuda para entender la trama.
3- esta historia irá a un ritmo lento pero espero de corazón que les guste lo que escribiré, tenganme paciencia puesto que acabo de salir de exámenes de la universidad, con suerte sigo vivo.
4- lo puse en las advertencias pero lo vuelvo a poner aquí, esta historia va a tener contenido +18 y no mucho de lo que esperan (?( va a tocar temas delicados que no busco normalizar o romantizar, quedan advertidos.

Sin nada más que decir por el momento espero que les guste hasta el momento y lo siguiente que sigue 💛 agradezco infinitamente a los que me leen.

El chico de las rosas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora