Capítulo 2: Asimilación

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"¿A dónde fue él otra vez?" Welf reflexiona. "Oh... Ichigo bajó a la mazmorra ayer. Hombre, deberías haber visto la mirada en su rostro cuando tuvo su primer Recluta-Esperanza. Por supuesto, la rechazó, pero aún así. Ese ceño fruncido podría congelar el inframundo". ." Tsubaki dijo, mientras jugueteaba con un cuchillo en proceso, que estaba sobre la mesa.

"¿En serio? Wow. Y pensé que Hefesto era malo cuando negaba a la gente". Welf dijo desde el otro lado de la mesa, con una ceja levantada.

"Eeeugh" Tsubaki hace una mueca con un escalofrío. "No me lo recuerdes"

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"Siguiente... ¿Quién eres tú?" El dios Herrero, dijo Hefesto. Sentado en una cabina que decía '¡Ahora aceptando solicitudes!' con una línea que llega hasta el final de la calle.

"¡Soy el mejor herrero de Orario, Darinn Ormanu! Aquí está mi cuchillo". Un hombre de poco más de veinte años dijo: Con bastante orgullo.

Tomando el arma en sus manos, miró e inspeccionó el arma a fondo. "Diablos, sí. Sin vaina". La mujer dijo: Decepcionada por la falta de seguridad.

"¿Qué es esto?" Preguntó Hephaestus, mientras le tendía un cuchillo a la armadura de cuero de Darinn.

Reflexiona por un segundo, mientras cuestiona la seriedad de la pregunta.

"¿Es un cuchillo?" Él responde, Inseguro.

Hefesto lo mira fijamente con los ojos. Cogió un trozo de metal limado y lo pasó por el lomo de la hoja. Ella se rió entre dientes cuando la lima realmente rasgó el metal y dijo. "¿Incluso trataste con calor este... pedazo de metal? ¿Te aseguraste de que tu agarre estuviera lo suficientemente asegurado a la espiga? (Ella balancea ligeramente la hoja, al ver que el mango se mueve sutilmente hacia adelante y hacia atrás) ¿Qué pasa con esta parte? de herrumbre bajo el guardamanos? Hephaestus dijo, sacando todo lo que estaba mal con la hoja.

"Está pulido, seguro, pero eso es todo para lo que pareces bueno. Tal vez puedas entrar en el negocio de Cordwainer. Escuché que están bajos en pulidores de zapatos". Hephaestus dijo: Ofendido de que el hombre se jactara antes de entregarle la basura real.

"¡Pero pero!" Darinn no pudo terminar cuando Hephaestus partió su espada en dos y la arrojó al suelo.

"Si haces armas de mierda, la gente morirá. Será mejor que te asegures de que la próxima vez que vuelvas a mí, será mejor que tengas buena calidad para sacar. Porque si no, tu espada de mierda tumbará a otro aventurero en ese maldito cementerio." Hephaestus dijo, clavando un dedo en el pecho del tipo.

El rostro de Darinn palideció mientras se alejaba.

"¡Próximo!" Hefesto dijo con un suspiro y se sentó.

"U-Um, ¡Buenos días!" Dijo una mujer medio enana claramente nerviosa.

Hephaestus abrió su ojo y miró a la mujer en escrutinio.

"Quién eres tú." ordenó la diosa.

"Sí, por supuesto... Tsubaki Collbrande". Tsubaki dijo: Y le tendió un wakizashi envainado.

Hephaestus tomó el arma en su mano y levantó una ceja. "Hm. Envainado... Liso y laminado... Envolturas... apretado... Trabajo de archivo... Hmph. Necesita trabajo... Tratamiento térmico..." El herrero divino toma la misma lima de metal de antes y la pasa a lo largo del columna vertebral del Wakizashi. Mostró una pequeña sonrisa cuando la lima resbaló de la hoja, sin dejar rasguños.

"Buen tratamiento térmico, Hoja recta... Borde angosto" Continúa mientras toca la hoja con la uña del índice. "Ooh, mil capas. Genial". El estado de ánimo del dios herrero mejoró inmensamente.

Dios de la muerte de OrarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora