-Final-

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Narra Natasha

-amor ya estoy en casa- la llamo entrando a casa

- aquí estamos- sonríe y camino a la habitación de Olivia

entro y le está cambiando la ropa

- pero si aquí están lo más bonito que tengo - sonrío acercándome y dándole un beso en los labios

miro a Olivia sonreír mientras mira el juguete que cae para que se divierta

- es preciosa- me agacho y le doy un beso en la cabeza

- ese pelirrojo no sé dé quien es- sonríe y acaba de vestirla

- yo tampoco- nos reímos y caminamos al salón

- ves dándole de comer mientras preparo nuestra cena- hablo y ella asiente

empiezo a prepararla

- ¿qué tal el trabajo?- pregunta

-muy bien, aquí las cosas son muy calmadas, no hay robos- hablo contenta- es un país mucho más avanzado y con más educación, ¿por qué te viniste a los Ángeles?- la miro un momento

- supongo porque tenía que conocerte- contesta- no sé, la vida es caprichosa - nos reímos

- y además de verdad- añado- pero cobras más, por hacer menos- asiento

- si, ahora que tenemos una hija, es mejor esto, antes me aburría, necesitaba acción

- si la tuviste si - nos reímos y sigue dando de comer a la pequeña

Tiene 4 meses ya, es muy buena aunque a veces llora de más, no entiendo eso de los bebes. Lloran para llamar la atención

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después de estar un rato en el sofá al terminar de cenar, Olivia está durmiendo ya en su cuna

- ¿vamos a la cama?- pregunta y asiento

nos levantamos y apagamos todo, es temprano, pero preferimos irnos a dormir pronto porque Oli se levanta y da guerra desde temprano

llego a la habitación y me lo quito todo menos los bóxer, me meto rápido en la cama

- menos mal que nos dejamos pasta en el edredón, que calentito por dios- me tapo y se ríe

se pone un pijama y entra en la cama

apago la luz y se acerca a mi

- dame un beso de buenas noches- gruñe y me giro a ella

le doy un beso y me separo

-¿solo uno?- pregunto con una sonrisa apretando su cadera

- no- pide con una sonrisa y empezamos a besarnos lentamente

estoy tan a gusto con ella... antes me ponía de los nervios, pero después de casi dos años juntas sé que es el amor de mi vida

no voy a mentir, aquí en noruega tengo más éxito, la gente es más abierta de mente, y se nota, y he tenido la oportunidad de serle infiel varias veces, algo que pensé que nunca me pasaría, y me da absolutamente igual, porque lo que tengo con ella no lo cambiaria por nada

me dio confianza, seguridad, me enseño que ir a terapia no es malo, y gracias a ello conocí a Bianca, absolutamente todas las cosas mas felices de mi vida han sido con ella, y eso no lo cambio por nada

los besos suben de intensidad bastante rápido, y ya me encuentro excitada

acerco nuestras caderas y lo nota de inmediato

- mhm- gime flojo y me pongo arriba en un movimiento

se abre de piernas para dejarme hueco y restriego mi pelvis contra la suya

- ah- gimo y bajo a besarla unos segundos

se quita los pantalones de un tirón, y ahora lo notamos más

- amor...- gime y me acerca más

le beso un poco el cuello mientras mi mano baja para acariciarla unos segundos y comprobar como esta

está perfecta

me quito los bóxer y estiro mi mano para agarrar un lubricante que tenemos

desde que los empezamos a usar con más normalidad se ha vuelto algo imprescindible, a mí me gusta más, y a ella también, a día de hoy no nos hace falta, pero nos gusta usarlo

con la mano mojada de lubricante me masturbo unos segundos mientras la beso

su mano baja y hace que quite la mía, y ella se encarga de prepararme a mi

la mueve en la punta y sonrío contra sus labios

- sabes lo que me gusta eh- sonrío

- si- contesta y sube sus manos a mis pezones

sin necesidad de usar las manos, solo con mi cadera, consigo introducirla lentamente

- joder- gemimos a la vez y nos reímos un poco

empiezo un vai ven lento mientras la miro a los ojos

es la postura que más nos gusta... quizás se disfrute más en otras, es posible, pero haciendo esta podemos mirarnos a los ojos, besarnos, acariciarnos perfectamente, y la considero la más cercana que hay

me agacho a abrazarla sin parar de mover de mi cadera

sus uñas se clavan en mi espalda

- Así - gime en mi oreja y sigo con ese ritmo

jamás querré estar en el interior de una mujer que no sea ella, lo tengo clarísimo

empiezo a mover mi cadera en círculos y noto que me voy a venir ya... no quiero y eso ya lo controlo a la perfección

la saco lentamente y empiezo a hacer el movimiento pero en sus labios mayores

a mí no me gusta tanto porque lo noto menos, a ella le gusta más porque es una mujer de clítoris y aguanto un poco más

hemos encontrado el equilibrio perfecto en el sexo, y es maravilloso

- amor...- me aprieta los hombros

- te quiero tanto- me agacho a besarla y me muerde el labio unos segundos- mhm- gimo notando como mueve su cadera a su gusto y yo me paro -¿quieres que te chupe un poco?- pregunto estando a nada del orgasmo

Así lo alargo un poco más

- no... me queda poco - susurra y asiento

la introduzco otro rato y mi mano baja a acariciarle el clítoris hinchado

- ya viene- gime más fuerte

- shh- la mando callar notando como palpita

llegamos al orgasmo a la vez, lo noto por como se tensan los músculos de las dos, estira hasta los dedos de los pies

- mhm- caigo rendida en su pecho

- joder- suspira acariciándome la espalda

agarra una toalla que tenemos, que la cambiamos siempre que hacemos el amor y la baja

la saco lentamente y así no manchamos las sabanas

- ¿puedo limpiarte?- pregunto agarrando la toalla

- nos vamos a casar, no hace falta que preguntes siempre- sonríe ella

- si, si hace falta- la limpio y dejo la toalla en el suelo

cierro los ojos escondiéndome en su cuello

ir a dormir después de tener un orgasmo con tu pareja no tiene precio

- te amo- susurra y la abrazo fuerte

- te amo- contesto

Ella es increíble.

Nota de autor 

En un rato el epílogo

-cosota

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